II Tes 2:13
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Mas nosotros debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, ¡oh hermanos amados de Dios!, por haberos Dios escogido por primicias de salvación en toda la Macedonia, mediante la santificación del espíritu y la verdadera fe que os ha dado,
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II Tes 2:13
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Mas nosotros debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, ¡oh hermanos amados de Dios!, por haberos Dios escogido por primicias de salvación en toda la Macedonia, mediante la santificación del espíritu y la verdadera fe que os ha dado,
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II Tes 2:16
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Y nuestro Señor Jesucristo, y Dios y padre nuestro , que nos amó, y dio eterno consuelo y buena esperanza por la gracia,
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II Tes 3:1
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Por último, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra de Dios se propague más y más, sea glorificada en todo el mundo, como lo es ya entre vosotros,
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II Tes 3:3
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Pero fiel es Dios, que os fortalecerá y defenderá del espíritu maligno.
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II Tes 3:5
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El Señor entretanto dirija vuestros corazones en el amor de Dios y en la paciencia de Cristo .
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I Tim 1:1
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Pablo, apóstol de Jesucristo por mandato de Dios, salvador nuestro y de Cristo Jesús , nuestra esperanza,
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I Tim 1:2
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a Timoteo, querido hijo o discípulo en la fe, gracia, misericordia y paz de Dios Padre, y de nuestro Señor Jesucristo.
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I Tim 1:4
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ni se ocupasen en fábulas y genealogías interminables, que son más propias para excitar disputas que para formar por la fe el edificio de Dios.
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I Tim 1:11
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la cual es conforme a la buena nueva gloriosa de Dios bendito, que se me ha encomendado.
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I Tim 1:13
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que fui antes blasfemo, y perseguidor, y opresor; pero alcancé misericordia de Dios, por haber procedido con ignorancia careciendo del don de fe;
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I Tim 1:17
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Por tanto, al rey de los siglos inmortal, invisible, al solo y único Dios, sea dada la honra y la gloria por siempre jamás. Amén.
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I Tim 2:3
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Porque ésta es una cosa buena, y agradable a los ojos de Dios, salvador nuestro.
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I Tim 2:5
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Porque uno es Dios, y uno también el mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,
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I Tim 2:5
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Porque uno es Dios, y uno también el mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,
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I Tim 3:5
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Pues si uno no sabe gobernar su casa, ¿cómo cuidará de la Iglesia de Dios?
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I Tim 3:15
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y si tardare, para que sepas cómo debes portarte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y apoyo de la verdad.
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I Tim 3:15
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y si tardare, para que sepas cómo debes portarte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y apoyo de la verdad.
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I Tim 3:16
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Y es ciertamente grande a todas luces el misterio de la piedad, o amor divino, en que el Hijo de Dios se ha manifestado en carne mortal, ha sido justificado por el Espíritu Santo, ha sido visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, elevado a la gloria.
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I Tim 4:3
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quienes prohibirán el matrimonio y el uso de los manjares, que Dios creó para que los tomasen con acción de gracias los fieles y los que han conocido la verdad.
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I Tim 4:4
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Porque toda criatura de Dios es buena, y nada se debe desechar de lo que se toma, o come con acción de gracias;
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I Tim 4:5
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puesto que se santifica por la palabra de Dios y por la oración, o bendición.
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I Tim 4:10
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que en verdad por eso sufrimos trabajos y oprobios, porque ponemos la esperanza en Dios vivo, el cual es salvador de los hombres todos, ante todo de los fieles.
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I Tim 5:4
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Que si alguna viuda tiene hijos o nietos, atienda primero a gobernar bien su casa y dar el retorno debido a sus padres; pues esto es lo que a Dios agrada.
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I Tim 5:5
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Mas la que verdaderamente es viuda y desamparada, espere en Dios, y ejercítese en plegarias y oraciones noche y día.
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I Tim 5:21
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Te conjuro delante de Dios y de Jesucristo, y de sus santos ángeles, que observes estas cosas sin dejarte prevenir, y sin hacer nada por inclinación ni afición particular.
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I Tim 6:11
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Pero tú, ¡oh varón de Dios!, huye de estas cosas, y sigue en todo la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la paciencia, la mansedumbre.
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I Tim 6:13
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Yo te ordeno en presencia de Dios, que vivifica todas las cosas, y de Jesucristo, que ante Poncio Pilatos dio testimonio, confesando generosamente la verdad,
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I Tim 6:17
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A los ricos de este siglo mándales que no sean altivos, ni pongan su confianza en las riquezas caducas, sino en Dios vivo (que nos provee de todo abundantemente para nuestro uso);
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II Tim 1:1
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Pablo, apóstol de Jesucristo por voluntad de Dios, según la promesa de vida que tenemos en Jesucristo,
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II Tim 1:2
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a Timoteo, hijo carísimo, gracia, misericordia y paz, de parte de Dios Padre y de nuestro Señor Jesucristo.
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II Tim 1:3
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Doy gracias a Dios, a quien sirvo a ejemplo de mis mayores con conciencia pura, de que sin cesar hago memoria de ti en mis oraciones, noche y día,
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II Tim 1:6
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Por esta causa te exhorto a que avives la gracia de Dios, que reside en ti por la imposición de mis manos.
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II Tim 1:7
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Porque no nos ha dado Dios a nosotros un espíritu de timidez, sino de fortaleza, y de caridad, y de templanza, y prudencia.
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II Tim 1:8
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Por tanto, no te avergüences del testimonio de nuestro Señor, o de confesar tu fe públicamente, ni de mí que estoy en cadenas por amor suyo, antes bien padece y trabaja a una conmigo por el evangelio con la virtud que recibirás de Dios.
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II Tim 2:4
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Alguien que se ha alistado en la milicia de Dios no debe embarazarse con negocios del siglo, a fin de agradar a aquel que le alistó y escogió por soldado.
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II Tim 2:7
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Entiende bien lo que digo, que no necesito añadir más, porque Dios te dará en todo inteligencia.
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II Tim 2:9
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por el cual estoy yo padeciendo hasta verme entre cadenas, como malhechor; si bien la palabra de Dios no está encadenada.
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II Tim 2:14
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Estas cosas has de amonestar, poniendo a Dios por testigo. Huye de contiendas de palabras, porque de nada sirven, sino para pervertir a los oyentes.
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II Tim 2:15
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Ponte en estado de comparecer delante de Dios como un ministro digno de su aprobación, que nada hace de que tenga motivo de avergonzarse, y que sabe dispensar bien la palabra de la verdad.
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II Tim 2:19
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Pero el fundamento de Dios se mantiene firme, el cual está marcado con el sello de estas palabras: El Señor conoce a los suyos, y no se perderá uno de ellos; y apártese de la maldad cualquiera que invoca el nombre del Señor.
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II Tim 2:24
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Al siervo de Dios no le conviene o cae bien altercar, sino ser manso con todos, propio para instruir, paciente,
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II Tim 2:25
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que reprenda con modesta dulzura a los que contradicen a la verdad, por si quizá Dios los trae a penitencia para que conozcan la verdad,
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II Tim 3:4
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traidores, temerarios, hinchados, y más amadores de deleites que de Dios,
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II Tim 3:16
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Toda escritura inspirada de Dios es propia para enseñar, para convencer, para corregir a los pecadores, para dirigir a los buenos en la justicia o virtud,
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II Tim 3:17
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en fin, para que el hombre de Dios o el cristiano sea perfecto, y esté apercibido para toda obra buena.
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II Tim 4:1
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Te conjuro, pues, delante de Dios y de Jesucristo, que ha de juzgar vivos y muertos, al tiempo de su venida y de su reino,
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II Tim 4:2
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predica la palabra de Dios con toda fuerza y valentía, insiste con ocasión y sin ella, reprende, ruega, exhorta con toda paciencia y doctrina.
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II Tim 4:16
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En mi primera defensa, nadie me asistió, antes todos me desampararon, ruego a Dios se lo perdone.
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Tit 1:1
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Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesucristo para instruir a los escogidos de Dios en la fe y en el conocimiento de la verdad que es según la piedad,
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