Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Señor

Salm 118:82 Desfallecieron mis ojos de tanto esperar tu promesa. ¿Cuándo será, Señor, decía yo, que me consolarás?
Salm 118:84 ¡Oh Señor! ¿Cuántos son los días de tu siervo? ¿Cuándo harás justicia de mis perseguidores?
Salm 118:86 Todos tus preceptos son la verdad pura. Me han perseguido injustamente, socórreme tú ¡oh Señor!
Salm 118:88 Vivifícame, ¡oh Señor!, según tu misericordia; y observaré los mandamientos salidos de tu divina boca.
Salm 118:89 LAMED. Eternamente, ¡oh Señor!, permanece en los cielos tu palabra.
Salm 118:94 Tuyo soy yo, Señor, sálvame, pues he investigado con ansia tus mandamientos.
Salm 118:97 MEM. ¡Cuán amable me es tu ley!, ¡oh Señor! todo el día es materia de mi meditación.
Salm 118:107 He sido abatido, Señor, en gran manera: vivifícame según tu promesa.
Salm 118:108 Recibe, ¡oh Señor!, con agrado los espontáneos sacrificios de alabanza que te ofrecen mis labios; enséñame tus juicios.
Salm 118:114 Tú eres, Señor, mi auxilio y amparo, y en tu palabra tengo puesta toda mi esperanza.
Salm 118:116 Acógeme Señor, según tu promesa, y haz que yo viva, y no permitas que quede burlada mi esperanza.
Salm 118:126 Tiempo es, oh Señor, de obrar con rigor; los soberbios han echado por el suelo su ley.
Salm 118:137 SADE. Justo eres, oh Señor, y rectos son tus juicios.
Salm 118:145 COPH. Clamé de todo mi corazón: Escúchame, ¡oh Señor!, y haz que yo vaya en pos de tus justísimos preceptos.
Salm 118:149 Escucha, Señor mi voz según tu misericordia, y vivifícame conforme lo has prometido.
Salm 118:151 Cerca estás de mí, ¡oh Señor!, y todos tus caminos son la verdad misma.
Salm 118:153 RES. Mira, Señor, mi abatimiento, y líbrame; pues no me he olvidado de tu ley.
Salm 118:156 Tu misericordia, Señor, es mucha; vivifícame según tu promesa.
Salm 118:159 Mira, ¡oh Señor!, cuánto he amado tus mandamientos; por tu misericordia otórgame la vida.
Salm 118:166 Yo esperaba, Señor, la salud que de ti viene; y entretanto amaba tus mandamientos.
Salm 118:169 TAU. Lleguen, ¡oh Señor!, a tu presencia mis plegarias: conforme a tu promesa dame el don de entendimiento.
Salm 118:174 ¡Oh Señor! ardientemente he deseado la salud que de ti viene, y tu ley es el objeto continuo de mi meditación.
Salm 118:176 He andado errante como una oveja descarriada: ven a buscar a tu siervo, porque no me he olvidado, ¡oh Señor!, de tus mandamientos.
Salm 119:1 Cántico de los grados, ó gradual. Clamé al Señor en mi tribulación, y me atendió.
Salm 119:2 Libra ¡oh Señor! mi alma de los labios inicuos y de la lengua dolosa.
Salm 120:2 Mi socorro viene del Señor que creó el cielo y la tierra.
Salm 120:5 El Señor es el que te custodia; el Señor está a tu lado para defenderte.
Salm 120:5 El Señor es el que te custodia; el Señor está a tu lado para defenderte.
Salm 120:7 El Señor te preservará de todo mal. Guardará el Señor tu alma.
Salm 120:7 El Señor te preservará de todo mal. Guardará el Señor tu alma.
Salm 120:8 El Señor te guardará en todos los pasos de tu vida, desde ahora y para siempre.
Salm 121:1 Cántico gradual. Gran contento tuve cuando se me dijo: Iremos a la casa del Señor.
Salm 121:4 Allá subirán las tribus, todas las tribus del Señor, según la ordenanza dada a Israel, para tributar alabanzas al Nombre del Señor.
Salm 121:4 Allá subirán las tribus, todas las tribus del Señor, según la ordenanza dada a Israel, para tributar alabanzas al Nombre del Señor.
Salm 121:9 Por respeto a la casa del Señor Dios nuestro te procuraré tantos bienes.
Salm 122:1 Cántico gradual. A ti, Señor, que habitas en los cielos, levanté mis ojos.
Salm 122:2 Como los ojos de los siervos están mirando siempre las manos o insinuaciones de sus amos, como la esclava tiene fijos sus ojos en las manos de su señora, así nuestros ojos están clavados en el Señor Dios nuestro, para moverle a que se apiade de nosotros.
Salm 122:3 Apiádate, Señor, ten misericordia de nosotros, porque estamos hartos de oprobios.
Salm 123:1 Cántico gradual. A no haber estado el Señor con nosotros, confiéselo ahora Israel,
Salm 123:2 a no haber estado el Señor a favor nuestro, cuando arremetieron las gentes contra nosotros
Salm 123:6 Bendito sea el Señor, que no permitió que fuésemos presa de sus rabiosos dientes.
Salm 123:8 Nuestro socorro viene del Nombre del Señor, creador del cielo y de la tierra.
Salm 124:1 Cántico gradual. Los que ponen en el Señor su confianza estarán firmes como el monte de Sión; nunca jamás será derrotado el morador
Salm 124:2 de Jerusalén . Rodeada está Jerusalén de montes, y el Señor es el antemural de su pueblo, desde ahora y para siempre.
Salm 124:3 Porque no dejará el Señor sujeto por largo tiempo al dominio de los pecadores el linaje de los justos; para que agobiados no se echen al partido de la iniquidad.
Salm 124:4 Bendice, oh Señor, a los buenos y a los rectos de corazón.
Salm 124:5 Pero a los que se desvían por caminos torcidos, los envolverá el Señor con los malhechores. La paz de Dios estará sobre Israel.
Salm 125:1 Cántico gradual. Cuando el Señor haga volver a Sión los cautivos, será indecible nuestro consuelo.
Salm 125:2 Entonces rebosará de gozo nuestra boca, y de júbilo nuestra lengua. Se dirá entonces entre las naciones: Grandiosas cosas ha hecho por ellos el Señor.
Salm 125:3 Sí, cosas grandes ha obrado el Señor a favor nuestro, inundados estamos de gozo.