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Jer 22:18
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Por tanto esto dice el Señor de Joakim, hijo de Josías y rey de Judá: No lo llorarán los de su casa con aquellos lamentos: ¡Ay hermano mío!, ¡ay hermana mía!, ni los extraños gritarán: ¡Ah Señor!, ¡ah excelso rey!
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Jer 22:24
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Juro yo, dice el Señor, que aunque Jeconías, hijo de Joakim, rey de Judá, fuese tan interesante para mí como el sello o anillo de mi mano derecha, me lo arrancaría del dedo.
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Jer 22:28
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¡Oh Señor!, ¿es quizá ese hombre Jeconías alguna vasija de barro quebrada? ¿Es algún mueble inútil que nadie lo quiere? ¿Por qué motivo han sido abatidos él y su linaje, y arrojados a un país desconocido de ellos?
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Jer 22:29
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¡Tierra, tierra!; oye, ¡oh tierra!, la palabra del Señor, y escarmienta.
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Jer 22:30
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He aquí lo que me dice el Señor: Escribe que ese hombre será estéril en sus cosas; que nada le saldrá bien de lo que emprenda durante su vida; pues que no quedará de su linaje varón alguno que se siente sobre el trono de David, y que tenga jamás en adelante poder alguno en Judá.
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Jer 23:1
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¡Ay de los pastores que arruinan y despedazan el rebaño de mi dehesa!, dice el Señor.
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Jer 23:2
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Por tanto he aquí lo que dice el Señor Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros habéis desparramado mi grey, y la habéis arrojado fuera, y no la habéis visitado: pues he aquí que yo vendré a castigaros a vosotros por causa de la malignidad de vuestras inclinaciones, dice el Señor.
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Jer 23:2
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Por tanto he aquí lo que dice el Señor Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros habéis desparramado mi grey, y la habéis arrojado fuera, y no la habéis visitado: pues he aquí que yo vendré a castigaros a vosotros por causa de la malignidad de vuestras inclinaciones, dice el Señor.
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Jer 23:4
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Y crearé para ellas unos pastores que las apacentarán con pasos saludables; no tendrán ya miedo ni pavor alguno, y no faltará ninguna de ellas en el redil, dice el Señor.
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Jer 23:5
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Mirad que viene el tiempo, dice el Señor, en que yo haré nacer de David un vástago, un Descendiente justo, el cual reinará como rey, y será sabio, y gobernará la tierra con rectitud y justicia.
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Jer 23:6
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En aquellos días suyos, Judá será salvo, e Israel vivirá tranquilamente; y el nombre con que será llamado aquel rey, es el de Justo Señor o Dios nuestro.
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Jer 23:7
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Por eso vendrá tiempo, dice el Señor, en que ya no dirán: Vive el Señor que sacó a los hijos de Israel de la tierra de Egipto:
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Jer 23:7
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Por eso vendrá tiempo, dice el Señor, en que ya no dirán: Vive el Señor que sacó a los hijos de Israel de la tierra de Egipto:
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Jer 23:8
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sino: Vive el Señor que ha sacado y traído el linaje de la casa de Israel del país del Norte y de todas las regiones a donde los había yo arrojado; y habitarán en su propia tierra.
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Jer 23:9
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En orden a los falsos profetas, mi corazón, dijo Jeremías, se despedaza en medio de mi pecho, desencajados tengo todos mis huesos; me hallo como un ebrio, como un hombre tomado del vino, al considerar el enojo del Señor y a vista de sus santas palabras.
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Jer 23:11
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Porque así el profeta como el sacerdote se han hecho inmundos, y dentro de mi casa o templo, allí he encontrado su malicia, dice el Señor.
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Jer 23:12
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Por eso el camino de ellos será como un continuo resbaladero entre tinieblas; en él serán empujados, y caerán; pues yo descargaré desastres sobre ellos en el tiempo en que sean tomadas sus cuentas, dice el Señor.
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Jer 23:15
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Por tanto, esto dice el Señor de los ejércitos a los profetas: He aquí que yo les daré a comer ajenjos y hiel para beber, ya que de los profetas de Jerusalén se ha difundido la corrupción e hipocresía por toda la tierra.
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Jer 23:16
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Moradores de Jerusalén , he aquí lo que os dice el Señor de los ejércitos: No queráis escuchar las palabras de los profetas que os profetizan cosas lisonjeras, y os embaucan, ellos os cuentan las visiones o sueños de su corazón, no lo que ha dicho el Señor.
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Jer 23:16
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Moradores de Jerusalén , he aquí lo que os dice el Señor de los ejércitos: No queráis escuchar las palabras de los profetas que os profetizan cosas lisonjeras, y os embaucan, ellos os cuentan las visiones o sueños de su corazón, no lo que ha dicho el Señor.
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Jer 23:17
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Dicen a aquellos que blasfeman de mí: El Señor lo ha dicho: Tendréis paz. Y a todos los que siguen la perversidad de su corazón les han dicho: No vendrá sobre vosotros ningún desastre.
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Jer 23:18
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Pero ¿quién de ellos asistió al consejo del Señor, y vio y oyó lo que dijo o decretó? ¿Quién penetró su resolución y la comprendió?
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Jer 23:20
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No cesará la saña del Señor hasta cuando se haya ejecutado y cumplido el decreto de su voluntad; en los últimos días es cuando conoceréis su designio sobre vosotros.
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Jer 23:23
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¿Acaso piensas tú, dice el Señor, que yo soy Dios sólo de cerca, y no soy Dios desde lejos?
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Jer 23:24
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¿Sí se ocultará acaso un hombre en algún escondrijo sin que yo le vea, dice el Señor? ¿Por ventura no lleno yo, dice el Señor, el cielo y la tierra?
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Jer 23:24
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¿Sí se ocultará acaso un hombre en algún escondrijo sin que yo le vea, dice el Señor? ¿Por ventura no lleno yo, dice el Señor, el cielo y la tierra?
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Jer 23:28
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Que cuente su sueño aquel profeta que así sueña; y predique mi palabra con toda verdad aquel que recibe mi palabra, y se verá la diferencia. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo, dice el Señor?
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Jer 23:29
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¿No es así que mis palabras son como fuego, dice el Señor, y como martillo que quebranta las peñas?
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Jer 23:30
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Por tanto, vedme aquí, dice el Señor, contra aquellos profetas que roban mis palabras, cada cual a su más cercano profeta.
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Jer 23:31
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Vedme aquí, dice el Señor, contra aquellos profetas que toman en sus lenguas estas palabras: Dice el Señor.
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Jer 23:31
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Vedme aquí, dice el Señor, contra aquellos profetas que toman en sus lenguas estas palabras: Dice el Señor.
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Jer 23:32
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Vedme aquí contra aquellos profetas o visionarios que sueñan mentiras, dice el Señor, y las cuentan, y traen embaucado a mi pueblo con sus falsedades y prestigios; siendo así que yo no los he enviado, ni dado comisión alguna a tales hombres que ningún bien han hecho a este pueblo, dice el Señor.
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Jer 23:32
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Vedme aquí contra aquellos profetas o visionarios que sueñan mentiras, dice el Señor, y las cuentan, y traen embaucado a mi pueblo con sus falsedades y prestigios; siendo así que yo no los he enviado, ni dado comisión alguna a tales hombres que ningún bien han hecho a este pueblo, dice el Señor.
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Jer 23:33
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Si te preguntare, pues, este pueblo, o un profeta, o un sacerdote, burlándose de ti, y te dijere: Vaya, ¿cuál es la carga o duro vaticinio que nos anuncias de parte del Señor?, le responderás: La carga sois vosotros; y yo, dice el Señor, os arrojaré lejos de mí.
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Jer 23:33
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Si te preguntare, pues, este pueblo, o un profeta, o un sacerdote, burlándose de ti, y te dijere: Vaya, ¿cuál es la carga o duro vaticinio que nos anuncias de parte del Señor?, le responderás: La carga sois vosotros; y yo, dice el Señor, os arrojaré lejos de mí.
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Jer 23:34
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Que si el profeta o el sacerdote, o alguno del pueblo dice: ¿Cuál es la carga del Señor?, yo castigaré severamente a tal hombre y a su casa.
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Jer 23:35
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Lo que habéis de decir cada uno a su vecino y a su hermano es: ¿Qué ha respondido el Señor? O ¿qué es lo que el Señor ha hablado?
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Jer 23:35
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Lo que habéis de decir cada uno a su vecino y a su hermano es: ¿Qué ha respondido el Señor? O ¿qué es lo que el Señor ha hablado?
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Jer 23:36
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Y no se ha de nombrar más por burla la carga del Señor, que de lo contrario la carga de cada uno será su modo de hablar, ya que habéis pervertido las palabras del Dios vivo, del Señor de los ejércitos, nuestro Dios.
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Jer 23:36
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Y no se ha de nombrar más por burla la carga del Señor, que de lo contrario la carga de cada uno será su modo de hablar, ya que habéis pervertido las palabras del Dios vivo, del Señor de los ejércitos, nuestro Dios.
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Jer 23:37
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Le preguntarás, pues, al profeta: ¿Qué te ha respondido el Señor? O ¿qué es lo que el Señor ha dicho?
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Jer 23:37
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Le preguntarás, pues, al profeta: ¿Qué te ha respondido el Señor? O ¿qué es lo que el Señor ha dicho?
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Jer 23:38
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Mas si todavía dijereis, mofándoos: La carga del Señor ¿cuál es? En tal caso, esto dice el Señor: Porque dijisteis esa expresión de burla: La carga del Señor; siendo así que yo os envié a decir: No pronunciéis más por mofa esa expresión: La carga del Señor.
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Jer 23:38
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Mas si todavía dijereis, mofándoos: La carga del Señor ¿cuál es? En tal caso, esto dice el Señor: Porque dijisteis esa expresión de burla: La carga del Señor; siendo así que yo os envié a decir: No pronunciéis más por mofa esa expresión: La carga del Señor.
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Jer 23:38
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Mas si todavía dijereis, mofándoos: La carga del Señor ¿cuál es? En tal caso, esto dice el Señor: Porque dijisteis esa expresión de burla: La carga del Señor; siendo así que yo os envié a decir: No pronunciéis más por mofa esa expresión: La carga del Señor.
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Jer 23:38
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Mas si todavía dijereis, mofándoos: La carga del Señor ¿cuál es? En tal caso, esto dice el Señor: Porque dijisteis esa expresión de burla: La carga del Señor; siendo así que yo os envié a decir: No pronunciéis más por mofa esa expresión: La carga del Señor.
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Jer 24:1
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Me mostró el Señor una visión, y vi dos canastillos llenos de higos puestos en el atrio delante del templo del Señor, después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había transportado de Jerusalén a Babilonia a Jeconías, hijo de Joakim, rey de Judá, y a sus cortesanos, y a los artífices, y a los joyeros.
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Jer 24:1
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Me mostró el Señor una visión, y vi dos canastillos llenos de higos puestos en el atrio delante del templo del Señor, después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, había transportado de Jerusalén a Babilonia a Jeconías, hijo de Joakim, rey de Judá, y a sus cortesanos, y a los artífices, y a los joyeros.
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Jer 24:3
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Y me dijo el Señor: ¿Qué es lo que ves, Jeremías? Yo respondí: Higos, higos buenos, y tan buenos que no pueden ser mejores; y otros malos, muy malos, que no se pueden comer de puro malos.
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Jer 24:4
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Entonces me habló el Señor, diciendo:
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