Rom 14:6
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El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.
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Rom 14:6
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El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.
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Rom 14:8
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Que como somos de Dios, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos para el Señor morimos. Ora, pues, vivamos, ora muramos, del Señor somos.
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Rom 14:8
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Que como somos de Dios, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos para el Señor morimos. Ora, pues, vivamos, ora muramos, del Señor somos.
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Rom 14:8
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Que como somos de Dios, si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos para el Señor morimos. Ora, pues, vivamos, ora muramos, del Señor somos.
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Rom 14:11
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Pues escrito está: Yo juro por mí mismo, dice el Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, y que toda lengua o nación ha de confesar que soy Dios.
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Rom 14:14
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Yo bien sé, y estoy seguro según la doctrina del Señor Jesús , que ninguna cosa es de suyo inmunda, sino que viene a ser inmunda para aquel que por tal la tiene.
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Rom 15:6
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a fin de que no teniendo sino un mismo corazón y una misma boca, glorifiquéis unánimes a Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo.
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Rom 15:9
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Mas los gentiles deben alabar a Dios por su misericordia, según está escrito: Por eso publicaré, ¡oh Señor!, entre las naciones tus alabanzas, y cantaré salmos a la gloria de tu Nombre.
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Rom 15:11
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Y en otra parte: Alabad todas las gentes al Señor, y ensalzadle los pueblos todos.
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Rom 15:30
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Entretanto, hermanos, os suplico por nuestro Señor Jesucristo y por la caridad del Espíritu Santo, que me ayudéis con las oraciones que hagáis a Dios por mí,
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Rom 16:2
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para que la recibáis por amor del Señor, como deben recibirse los santos, o fieles, y le deis favor en cualquier negocio que necesitare de vosotros; pues ella lo ha hecho así con muchos, y en particular conmigo.
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Rom 16:8
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Saludad a Ampliato, a quien amo entrañablemente en el Señor.
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Rom 16:11
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Saludad a los de la familia de Aristóbolo. Saludad a Herodión, mi pariente. Saludad a los de casa de Narciso, que creen en el Señor.
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Rom 16:12
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Saludad a Trifena y a Trifosa, las cuales trabajan para el servicio del Señor. Saludad a nuestra carísima Pérsida, la cual asimismo ha trabajado mucho por el Señor.
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Rom 16:12
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Saludad a Trifena y a Trifosa, las cuales trabajan para el servicio del Señor. Saludad a nuestra carísima Pérsida, la cual asimismo ha trabajado mucho por el Señor.
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Rom 16:13
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Saludad a Rufo, escogido del Señor, y a su madre, que también lo es mía en el amor.
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Rom 16:18
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pues los tales no sirven a Cristo Señor nuestro, sino a su propia sensualidad, y con palabras melosas y con adulaciones seducen los corazones de los sencillos.
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Rom 16:20
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El Dios de la paz quebrante y abata presto a Satanás debajo de vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.
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Rom 16:22
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Os saludo en el Señor yo, Tercio, que he sido el amanuense en esta carta.
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Rom 16:24
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La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.
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I Cor 1:2
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a la Iglesia de Dios, que está en Corinto, a los fieles santificados por Jesucristo, llamados santos por su profesión, y a todos los que en cualquier lugar que sea invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y de nosotros:
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I Cor 1:2
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a la Iglesia de Dios, que está en Corinto, a los fieles santificados por Jesucristo, llamados santos por su profesión, y a todos los que en cualquier lugar que sea invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y de nosotros:
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I Cor 1:3
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Gracia y paz de parte de Dios padre nuestro , y de Jesucristo nuestro Señor.
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I Cor 1:7
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de manera que nada os falte de gracia alguna, a vosotros que estáis esperando la manifestación de Jesucristo nuestro Señor,
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I Cor 1:8
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el cual os confortará todavía hasta el fin, para que seáis hallados irreprensibles en el día del advenimiento de Jesucristo Señor nuestro.
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I Cor 1:9
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Porque Dios, por el cual habéis sido llamados a la compañía de su Hijo Jesucristo nuestro Señor, es fiel en sus promesas.
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I Cor 1:10
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Mas os ruego encarecidamente, hermanos míos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que todos tengáis un mismo lenguaje, y que no haya entre vosotros cismas ni partidos; antes bien viváis perfectamente unidos en un mismo pensar y en un mismo sentir;
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I Cor 1:31
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a fin de que como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.
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I Cor 2:8
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sabiduría que ninguno de los príncipes de este siglo ha entendido; que si la hubiesen entendido, nunca hubieran crucificado al Señor de la gloria;
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I Cor 2:16
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Porque ¿quién conoce la mente o designios del Señor, para darle instrucciones? Mas nosotros tenemos el Espíritu de Cristo .
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I Cor 3:5
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Unos ministros, y no más, de aquél en quien habéis creído; y eso según el don que a cada uno ha concedido el Señor.
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I Cor 3:13
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sepa que la obra de cada uno ha de manifestarse. Por cuanto el día del Señor la descubrirá, como quiera que se ha de manifestar por medio del fuego; y el fuego mostrará cuál es la obra de cada uno.
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I Cor 3:20
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Y en otra parte: El Señor penetra las ideas de los astutos, y conoce la vanidad de ellas.
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I Cor 4:4
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Porque si bien no me remuerde la conciencia de cosa alguna, no por eso me tengo por justificado; pues el que me juzga es el Señor.
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I Cor 4:5
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Por tanto, no queráis sentenciar antes de tiempo, suspended vuestro juicio hasta tanto que venga el Señor, el cual sacará a plena luz lo que está en los escondrijos de las tinieblas, y descubrirá en aquel día las intenciones de los corazones; y entonces cada cual será de Dios alabado según merezca.
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I Cor 4:17
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Con este fin he enviado a vosotros a Timoteo, el cual es hijo mío, carísimo y fiel en el Señor; para que os informe de mi proceder o manera de vivir en Jesucristo, conforme a lo que yo enseño por todas partes en todas las iglesias.
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I Cor 5:4
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En nombre de nuestro Señor Jesucristo, uniéndose con vosotros mi espíritu, con el poder que he recibido de nuestro Señor Jesús ,
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I Cor 5:4
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En nombre de nuestro Señor Jesucristo, uniéndose con vosotros mi espíritu, con el poder que he recibido de nuestro Señor Jesús ,
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I Cor 5:5
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sea ese que tal hizo entregado a Satanás, para castigo de su cuerpo, a cambio de que su alma sea salva en el día de nuestro Señor Jesucristo.
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I Cor 6:11
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Tales habéis sido algunos de vosotros en otro tiempo; pero fuisteis lavados, fuisteis santificados, fuisteis justificados, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, y por el Espíritu de nuestro Dios.
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I Cor 6:13
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Las viandas son para el vientre, y el vientre para las viandas; mas Dios destruirá a aquél y a éstas; el cuerpo no es para la fornicación, sino para gloria del Señor, como el Señor para el cuerpo.
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I Cor 6:13
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Las viandas son para el vientre, y el vientre para las viandas; mas Dios destruirá a aquél y a éstas; el cuerpo no es para la fornicación, sino para gloria del Señor, como el Señor para el cuerpo.
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I Cor 6:14
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Pues así como Dios resucitó al Señor, nos resucitará también a nosotros por su virtud.
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I Cor 6:17
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Al contrario, quien está unido con el Señor, es con él un mismo espíritu.
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I Cor 7:10
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Pero a las personas casadas mando, no yo, sino el Señor, que la mujer no se separe del marido;
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I Cor 7:12
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Pero a los demás digo yo mi dictamen, no que el Señor lo mande, si algún hermano tiene por mujer a un infiel o idólatra, y ésta consiente en habitar con él, no la repudie.
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I Cor 7:22
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Pues aquel que siendo esclavo es llamado al servicio del Señor, se hace liberto del Señor; y de la misma manera aquel que es llamado siendo libre, se hace esclavo de Cristo .
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I Cor 7:22
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Pues aquel que siendo esclavo es llamado al servicio del Señor, se hace liberto del Señor; y de la misma manera aquel que es llamado siendo libre, se hace esclavo de Cristo .
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I Cor 7:25
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En orden a las vírgenes, precepto del Señor yo no lo tengo; doy, sí, consejo, como quien ha conseguido del Señor la misericordia de ser fiel ministro suyo.
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