Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

pueblo

II Mac 8:5 El Macabeo, pues, habiendo juntado mucha gente, se hacía formidable a los gentiles; porque la indignación del Señor contra su pueblo se había ya convertido en misericordia.
II Mac 8:15 y que se dignase hacerlo, ya que no por amor de ellos, siquiera por la alianza que había hecho con sus padres, y por el honor que tenían de llamarse con el nombre santo y glorioso de pueblo de Dios.
II Mac 9:2 pues habiendo entrado en la ciudad de Persépolis, llamada Elimaida, e intentado saquear el templo y oprimir la ciudad, corrió todo el pueblo a tomar las armas, y lo puso en fuga con todas sus tropas, por lo cual volvió atrás vergonzosamente.
II Mac 10:21 Así que fue informado de esto el Macabeo, congregados los príncipes o cabezas del pueblo, acusó a aquéllos de haber vendido por dinero a sus hermanos, dejando escapar a sus enemigos.
II Mac 11:6 Pero luego que el Macabeo y su gente supieron que los enemigos habían comenzado a sitiar las fortalezas, rogaban al Señor con lágrimas y suspiros, a una con todo el pueblo, que enviase un ángel bueno para que salvase a Israel.
II Mac 11:16 La carta que Lisias escribió a los judíos era del tenor siguiente: Lisias al pueblo de los judíos, salud:
II Mac 11:34 Asimismo los romanos enviaron también una carta en estos términos: Quinto Memmio y Tito Manilio, legados de los romanos, al pueblo de los judíos, salud.
II Mac 12:42 y en seguida poniéndose en oración rogaron a Dios que echase en olvido el delito que habían cometido. Al mismo tiempo el esforzadísimo Judas exhortaba al pueblo a que se conservase sin pecado, viendo delante de sus mismos ojos lo sucedido por causa de las culpas de los que habían sido muertos."
II Mac 13:10 Teniendo, pues, Judas noticia de ello, mandó al pueblo que invocase al Señor día y noche, a fin de que les asistiese en aquella ocasión, como lo había hecho siempre;
II Mac 13:11 pues temían verse privados de su ley, de su patria y de su santo templo; y para que no permitiese que su pueblo escogido, que poco antes había empezado a respirar algún tanto, se viese nuevamente subyugado por las naciones, que blasfeman su santo Nombre.
II Mac 13:26 Pero subiendo Lisias a la tribuna, expuso las razones que habían mediado para esta alianza, apaciguó al pueblo, y volvió después a Antioquía. Tal fue la expedición del rey y el fin que tuvo.
II Mac 14:15 Luego que éstos supieron la llegada de Nicanor y la reunión de los gentiles con él, esparciendo polvo sobre sus cabezas, dirigieron sus plegarias a aquel Señor que se había formado un pueblo suyo para conservarlo eternamente, y que con evidentes milagros había protegido su herencia.
II Mac 14:20 Y habiendo durado largo tiempo las conferencias sobre el asunto, y dando el mismo general parte de ellas al pueblo, todos unánimemente fueron de parecer que se aceptara la paz.
II Mac 15:12 Esta fue la visión que tuvo: Se le representó que estaba viendo a Onías, sumo sacerdote, que había sido hombre lleno de bondad y de dulzura, de aspecto venerado, modesto en sus costumbres y de gracia en sus discursos, y que desde niño se había ejercitado en la virtud; el cual, levantadas las manos, oraba por todo el pueblo judaico;
II Mac 15:14 y que Onías, dirigiéndole la palabra, le había dicho: Este es el verdadero amante de sus hermanos y del pueblo de Israel; éste es Jeremías, profeta de Dios, que ruega incesantemente por el pueblo y por toda la ciudad santa;
II Mac 15:14 y que Onías, dirigiéndole la palabra, le había dicho: Este es el verdadero amante de sus hermanos y del pueblo de Israel; éste es Jeremías, profeta de Dios, que ruega incesantemente por el pueblo y por toda la ciudad santa;
II Mac 15:16 Toma esta santa espada, como don de Dios, con la cual derribarás a los enemigos de mi pueblo de Israel.
II Mac 15:24 a fin de que queden llenos de espanto los que blasfemando del Nombre tuyo, vienen contra tu santo pueblo. Así terminó su oración.
Mt 1:21 Así que tendrá un hijo a quien pondrás por nombre Jesús ; pues él es el que ha de salvar a su pueblo, o librarle, de sus pecados.
Mt 2:4 Y convocando a todos los príncipes de los sacerdotes y a los escribas del pueblo, les preguntaba en dónde había de nacer el Cristo , o Mesías.
Mt 2:6 Y tú, Belén tierra de Judá, no eres ciertamente la menor entre las principales ciudades de Judá, porque de ti es de donde ha de salir el caudillo que rija mi pueblo de Israel.
Mt 4:16 este pueblo que yacía en las tinieblas, ha visto una luz grande: Luz que ha venido a iluminar a los que habitan en la región de las sombras de la muerte.
Mt 4:23 E iba Jesús recorriendo toda la Galilea, enseñando en sus sinagogas y predicando la buena nueva del reino celestial, y sanando toda dolencia y toda enfermedad en los del pueblo;
Mt 11:7 Luego que se fueron éstos, empezó Jesús a hablar de Juan, y dijo al pueblo: ¿Qué es lo que salisteis a ver en el desierto? ¿Alguna caña que a todo viento se mueve?
Mt 12:23 Con lo que todo el pueblo quedó asombrado, y decía: ¿Es éste tal vez el Hijo de David, el Mesías?
Mt 12:46 Todavía estaba él hablando al pueblo, y he aquí su madre y sus hermanos estaban fuera, que le querían hablar.
Mt 13:2 Y se juntó a su alrededor un concurso tan grande de gente, que le fue preciso entrar en una barca, y tomar asiento en ella; y todo el pueblo estaba en la ribera;
Mt 13:15 Porque ha endurecido este pueblo su corazón, y ha cerrado sus oídos, y tapado sus ojos a fin de no ver con ellos, ni oír con los oídos, ni comprender con el corazón, por miedo de que, convirtiéndose, yo le dé la salud.
Mt 13:34 Todas estas cosas dijo Jesús al pueblo por parábolas, sin las cuales no solía predicarles;
Mt 14:5 Y Herodes bien quería hacerle morir, pero no se atrevía por temor del pueblo; porque todos tenían a Juan por un profeta.
Mt 15:8 Este pueblo me honra con los labios; pero su corazón lejos está de mí.
Mt 15:10 Y habiendo llamado a sí al pueblo, les dijo: Escuchadme, y atended bien a esto:
Mt 15:36 Y él, cogiendo los siete panes y los peces , dadas las gracias, o hecha oración, los partió y dio a sus discípulos, y los discípulos los repartieron al pueblo.
Mt 21:23 Llegado al templo, se acercaron a él, cuando estaba ya enseñando, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos o senadores del pueblo, y le preguntaron: ¿Con qué autoridad haces estas cosas, y quién te ha dado tal potestad?
Mt 21:26 Si respondemos del cielo, nos dirá: ¿Pues por qué no habéis creído en él? Si respondemos de los hombres, tenemos que temer al pueblo (porque todos miraban a Juan como un profeta).
Mt 21:46 y queriendo prenderle, tuvieron miedo al pueblo; porque era mirado como un profeta.
Mt 22:17 Esto supuesto, dinos qué te parece de esto: ¿Es o no es lícito a los judíos, pueblo de Dios, pagar tributo a César?
Mt 22:33 Lo que habiendo oído el pueblo, estaba asombrado de su doctrina.
Mt 23:1 Entonces, dirigiendo Jesús su palabra al pueblo y a sus discípulos,
Mt 26:3 Al mismo tiempo se juntaron los príncipes de los sacerdotes y los magistrados del pueblo en el palacio del sumo sacerdote, que se llamaba Caifás;
Mt 26:5 Y de miedo de que se alborotara el pueblo, decían: No conviene que se haga esto durante la fiesta.
Mt 26:47 Aún no había acabado de decir esto, cuando llegó Judas, uno de los doce, seguido de gentes armadas con espadas y con palos, que venían enviadas por los príncipes y sacerdotes y ancianos o senadores del pueblo.
Mt 27:1 Venida la mañana, todos los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo tuvieron consejo contra Jesús para hacerle morir.
Mt 27:15 Acostumbraba el gobernador conceder por razón de la fiesta de la Pascua , la libertad de un reo, a elección del pueblo.
Mt 27:20 Entretanto, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos indujeron al pueblo a que pidiese la libertad de Barrabás y la muerte de Jesús .
Mt 27:24 Con lo que viendo Pilato que nada adelantaba, antes bien, que cada vez crecía el tumulto, mandando traer agua, se lavó las manos a la vista del pueblo, diciendo: Inocente soy yo de la sangre de este justo, allá os lo veáis vosotros.
Mt 27:25 A lo cual respondiendo todo el pueblo, dijo: Recaiga su sangre sobre nosotros y sobre nuestros hijos.
Mc 1:21 Entraron después en Cafarnaúm, y Jesús comenzó a enseñar los sábados al pueblo en la sinagoga.
Mc 4:36 Y despidiendo al pueblo, estando Jesús como estaba en la barca, se hicieron con él a la vela; y le iban acompañando otros barcos.
Mc 6:45 Inmediatamente obligó a sus discípulos a subir en la barca para que pasasen antes que él al otro lado del lago, hacia Betsaida, mientras él despedía al pueblo.