Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

hombres

Juec 20:31 Pero los hijos de Benjamín salieron de rebato y osadamente de la plaza, y fueron persiguiendo por largo trecho a los contrarios, que de propósito huían: de manera que los iban hiriendo y acuchillando como el primero y segundo día, y dejaron tendidos en el suelo unos treinta hombres de los que iban huyendo por dos veredas, de las cuales una conducía a Betel y la otra a Gabaa;
Juec 20:34 avanzando por la parte occidental de la ciudad. Entretanto otros diez mil hombres destacados del grueso del ejército de Israel, volviendo de frente, provocaban a los habitantes de la ciudad a que saliesen al combate. Con esto se empeñó la acción contra los hijos de Benjamín; los cuales no advirtieron que por todos lados los estaba aguardando la muerte.
Juec 20:35 En efecto, el Señor los castigó a la vista de los hijos de Israel, que mataron de ellos en aquel día veintincinco mil cien hombres, toda gente guerrera y valiente.
Juec 20:39 Lo cual observado por los hijos de Israel en el mismo ardor del combate (cuando los hijos de Benjamín, creyendo que huían, los aguijaban con más empeño por haberles muerto ya treinta hombres),
Juec 20:44 fueron dieciocho mil hombres, guerreros todos muy valientes.
Juec 20:45 Los otros que habían quedado de Benjamín al ver esto, huyeron hacia el desierto, tirando a refugiarse en la peña llamada Remmón. Pero como estaban desordenados y huían dispersos, en la misma fuga fueron muertos cinco mil hombres. A los que tiraron adelante los fueron también persiguiendo, y mataron aún otros dos mil.
Juec 20:48 Pero los hijos de Israel, vueltos del combate, pasaron a cuchillo a todo el resto de la ciudad, desde los hombres hasta las bestias. Y todas las demás ciudades y lugarcillos de Benjamín fueron consumidos por las voraces llamas.
Juec 21:10 Con esto destacaron diez mil hombres muy valientes, dándoles esta orden: Id, y pasad a cuchillo a los moradores de Jabes-Galaad, sin perdonar a sus mujeres y niños.
Rut 3:14 Durmió, pues, a sus pies hasta el fin de la noche. Y levantándose antes que los hombres pudiesen conocerse unos a otros, le dijo Booz: Procura que nadie sepa que has venido acá.
I Rey 2:26 Entretanto el niño Samuel iba adelantando y creciendo, y era grato no menos al Señor que a los hombres.
I Rey 4:2 y presentaron a Israel la batalla. Comenzada ésta, Israel volvió las espaldas a los filisteos; quienes mataron en aquel choque, y dejaron tendidos por los campos, como cuatro mil hombres.
I Rey 6:19 Mas el Señor castigó a los moradores de Betsamés, y ciudades vecinas, porque se pusieron a mirar con curiosidad el interior del arca del Señor contra lo mandado; y mató setenta hombres de los ancianos del pueblo, y cincuenta mil del vulgo. Y prorrumpieron todos en llanto, al ver que el Señor había herido al pueblo con tan gran mortandad.
I Rey 10:2 Cuando hoy te hayas separado de mí encontrarás dos hombres junto al sepulcro de Raquel, en la frontera de Benjamín, hacia la parte meridional, que te dirán: Se han hallado ya las burras que fuiste a buscar; y no pensando ya tu padre en ellas, está inquieto por causa de vosotros, y dice: ¿Qué le habrá sucedido a mi hijo?;
I Rey 10:3 y luego que partas de allí, y pases más adelante, llegando a la encina del Tabor, encontrarás tres hombres, que irán a adorar a Dios en Betel, uno que llevará tres cabritos, otro tres hogazas de pan, y el tercero una bota de vino;
I Rey 11:8 Pasó Saúl revista de ellos en Bezec, y se hallaron trescientos mil hombres de los hijos de Israel, y treinta mil de sola la tribu de Judá.
I Rey 11:12 Entonces dijo el pueblo a Samuel: ¿Quiénes son los que decían: Saúl será acaso nuestro rey? Entréganos esos hombres y los mataremos.
I Rey 13:2 Y escogió tres mil hombres de Israel; de los cuales dos mil estaban con Saúl frente a Macmas, y en el monte de Betel; y otros mil con Jonatás enfrente de Gabaa de Benjamín; y despidió todo el resto del pueblo, cada uno a su casa.
I Rey 13:15 Con esto se retiró Samuel, y subió de Gálgala a Gabaa de Benjamín. Lo restante de la gente avanzó siguiendo a Saúl contra unos enemigos que asaltaban en el cerro de Benjamín a los que iban de Gálgala a Gabaa. Saúl, hecha la revista de la gente que tenía, se halló con unos seiscientos hombres.
I Rey 14:2 Y estaba Saúl acampado en la extremidad del territorio de Gabaa, debajo de un granado que había en Magrón. Y tenía consigo un tercio de gente como de unos seiscientos hombres.
I Rey 14:8 Añadió Jonatás: Mira, nosotros nos vamos acercando a esos hombres; si luego que nos hayan descubierto
I Rey 14:14 Y éste fue el primer destrozo en que Jonatás y su escudero mataron como unos veinte hombres, en el espacio de tierra que suele arar un yunta de bueyes en medio día.
I Rey 14:22 Asimismo todos los israelitas escondidos en la montaña de Efraín, habiendo sabido que los filisteos huían, se juntaron con los suyos para pelear; por los que se hallaba ya Saúl con cerca de unos diez mil hombres.
I Rey 15:3 Ve, pues, ahora y destroza a Amalec, y arrasa cuanto tiene; no le perdones, ni codicies nada de sus bienes, sino mátalo todo, hombres y mujeres, muchachos y niños de pecho, bueyes y ovejas, camellos y asnos.
I Rey 15:4 Conforme a esto Saúl convocó al pueblo, y pasándole revista, como cuenta el pastor sus corderos, se halló con doscientos mil hombres de a pie de todas las tribus de Israel, y diez mil de la de Judá.
I Rey 18:13 Por lo cual le alejó de él y le hizo tribuno de mil hombres; con los cuales hacía David sus expediciones a vista del pueblo.
I Rey 22:3 Se acercaron también todos aquellos que se hallaban angustiados y oprimidos de deudas, y en amargura de corazón; de los cuales se hizo caudillo, y juntó como unos cuatrocientos hombres bajo su mando.
I Rey 22:20 Después de esto pasó a cuchillo a Nobe, ciudad de los sacerdotes, matando a hombres y mujeres, muchachos y niños de pecho, hasta los bueyes, los asnos y las ovejas.
I Rey 23:14 Por lo que dispuso David marcharse de allí con toda su gente, que eran como unos seiscientos hombres; y saliendo de Ceila, andaban de una a otra parte sin asiento fijo. Tuvo Saúl aviso de que había huido David de Ceila, se había puesto a salvo; por lo cual aparentó no querer moverse.
I Rey 24:2 Tomando, pues, Saúl tres mil hombres escogidos en todo Israel, salió en busca de David y de su gente; yendo hasta por las rocas más escarpadas, accesibles sólo a las cabras monteses.
I Rey 25:11 ¿Cómo tomaré yo mis panes y mi agua y la carne de las reses que he hecho matar para mis esquiladores, y daré todo a unos hombres que no sé de dónde son?
I Rey 25:13 Entonces David les dijo a sus gentes: Tome cada cual su espada. Tomaron todos sus espadas, y David también la suya y siguieron a David como unos cuatrocientos hombres, quedándose doscientos con el bagaje.
I Rey 25:15 Estos hombres han sido muy buenos para nosotros; no nos han inquietado, y jamás nos ha faltado nada, mientras hemos estado juntos en el desierto.
I Rey 26:2 Con esto Saúl se puso en camino, y acompañado de tres mil hombres escogidos de todo Israel, bajó al desierto de Zif para ir en busca de David.
I Rey 26:19 Oye, pues, ahora, te ruego, mi rey y señor, las palabras de tu siervo: Si es el Señor el que te incita contra mí, acepte el olor de este sacrificio; mas si son los hombres, malditos sean en la presencia del Señor, ellos, que me han hoy desterrado, para que no habite en la heredad del Señor; como quien dice: Anda y sirve a dioses ajenos.
I Rey 27:2 Y así David partió con sus seiscientos hombres, y se fue a Aquis, rey de Get, hijo de Maoc.
I Rey 28:8 Se disfrazó luego, y mudado el traje se puso en camino, acompañado de dos hombres. Fue de noche a casa de la mujer, y le dijo: Adivíname por el espíritu de Pitón, y hazme aparecer quien yo te dijere.
I Rey 29:2 Los sátrapas de los filisteos marchaban al frente de sus tropas, divididas en compañías de a ciento, y regimientos de a mil hombres; mas David y su gente iban en la retaguardia con Aquis.
I Rey 30:9 Partió, pues, David con los seiscientos hombres que le seguían, y anduvieron hasta el torrente Besor, donde algunos de puro cansados se detuvieron.
I Rey 30:10 Mas David siguió adelante con cuatrocientos hombres, quedándose atrás doscientos que por el cansancio no pudieron pasar el torrente Besor.
I Rey 30:21 Llegado David a donde estaban los doscientos hombres, que de puro cansados se habían quedado y no habían podido seguirle, y a los cuales dejó mandado que descansaran en la orilla del torrente Besor, salieron éstos a recibirle a él y la tropa que le acompañaba. Luego que David estuvo cerca de ellos, los saludó con agrado.
I Rey 30:22 Mas todos los malignos y perversos de entre los hombres que habían ido con David, comenzaron a decir: Ya que no vinieron con nosotros, no les daremos cosa alguna de la presa que hemos recobrado; conténtese cada uno con que se le devuelva su mujer e hijos; y recibido esto, váyase.
II Rey 2:30 Joab por su parte, cesando de perseguir a Abner, volvió atrás, juntó toda su gente, y faltaron de los soldados de David diecinueve hombres, sin contar a Asael.
II Rey 3:29 Caiga su sangre sobre la cabeza de Joab y sobre toda la casa de su padre; no falte jamás de la casa de Joab un flujo vergonzoso que los vuelva estériles, como ni tampoco leprosos, y hombres que lleven rueca en vez de espada, y haya siempre quienes mueran a cuchillo, y gentes que vayan mendigando el pan.
II Rey 4:11 ¿cuánto más, oh hombres malvados, que habéis asesinado a un inocente dentro de su misma casa, sobre su cama, he de vengar yo ahora su sangre en vosotros que la habéis derramado con vuestras manos, y extirparos de la tierra?
II Rey 6:19 Y distribuyó a toda la muchedumbre de israelitas que le habían acompañado, tanto a hombres como a mujeres, a cada persona una torta de pan, un pedazo de carne de buey asada, y flor de harina frita en aceite. Con esto se retiró toda la gente, cada cual a su casa.
II Rey 7:14 Yo seré su padre, y él será mi hijo; que si en algo obrare mal, yo lo corregiré paternalmente con vara de hombres, y con castigos de hijos de hombres.
II Rey 7:14 Yo seré su padre, y él será mi hijo; que si en algo obrare mal, yo lo corregiré paternalmente con vara de hombres, y con castigos de hijos de hombres.
II Rey 8:13 Adquirió también David gran nombradía cuando en el valle de las Salinas, al volver de la conquista de Siria, mató a dieciocho mil hombres.
II Rey 10:6 Mas los amonitas reflexionando en la injuria hecha a David, tomaron a su sueldo veinte mil infantes de la Siria de Rohob y de la Siria de Soba, mil hombres del rey de Maaca y doce mil de Istob.
II Rey 10:19 Pues como todos aquellos reyes que seguían el partido de Adarecer se viesen vencidos por Israel, se llenaron de pavor, y volvieron las espaldas a presencia de Israel cincuenta y ocho mil hombres. Al fin hicieron paces con los israelitas, y se les sujetaron; y no se atrevieron más los siros a prestar socorro a los amonitas.