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Sab 8:11
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Y me reconocerán por agudo en juzgar, y seré admirable a los ojos de los grandes, y los príncipes manifestarán en sus semblantes la admiración que les causo.
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Sab 9:9
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estando contigo tu sabiduría, que conoce tus obras; la cual se hallaba también contigo entonces cuando creabas al mundo, y sabía lo que era grato a tus ojos, y qué cosa era conforme a tus decretos.
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Sab 9:16
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Difícilmente llegamos a formar concepto de las cosas de la tierra; y a duras penas entendemos las que tenemos delante de los ojos. ¿Quién podrá, pues, investigar aquellas que están en los cielos?
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Sab 11:19
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o fieras de una nueva especie desconocida, llenas de furor, que respirasen llamas de fuego, o despidiesen una negra humareda, o arrojasen por los ojos espantosas centellas;
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Sab 12:4
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pues hacían obras detestables a tus ojos con hechiceras y sacrificios impíos,
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Sab 15:15
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Porque creen dioses todos los ídolos de las naciones; los cuales ni pueden usar de los ojos para ver, ni de las narices para respirar, ni de las orejas para oír, ni de los dedos de las manos para palpar, ni aún sus pies son capaces de caminar.
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Sab 16:3
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de manera que cuando los otros, aunque hambrientos perdían las ganas aun del necesario sustento, por el asco de las sabandijas que se les ponían delante de los ojos, éstos, padeciendo necesidad por un poco de tiempo, lograron después un exquisito manjar.
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Sab 17:6
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Al mismo tiempo de repente les daban en los ojos terribles fuegos o relámpagos; y aturdidos por el temor de aquellos fantasmas, que veían confusamente, se imaginaban más terribles todos los objetos.
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Ecli 3:23
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Porque no te es necesario ver por tus ojos los ocultos arcanos de Dios.
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Ecli 4:1
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Hijo, no defraudes al pobre de su limosna; y no vuelvas a otra parte tus ojos por no verlo.
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Ecli 4:5
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No apartes desdeñosamente tus ojos del mendigo, irritándolo; ni des ocasión a los que te piden de que maldigan por detrás.
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Ecli 4:16
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Quien la escucha, juzgará las naciones; y quien tiene fijos en ella los ojos reposará seguro.
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Ecli 5:7
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Porque tan pronto como ejerce su misericordia, ejerce su indignación, y con ésta tiene fijos sus ojos sobre el pecador.
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Ecli 9:3
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No pongas los ojos en mujer que quiere a muchos, no sea que caigas en sus lazos.
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Ecli 9:5
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No pongas tus ojos en la doncella; para que su belleza no sea ocasión de tu ruina.
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Ecli 9:8
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Aparta tus ojos de la mujer lujosamente ataviada, y no mires estudiosamente una hermosura ajena.
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Ecli 11:13
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y a éste Dios lo mira con ojos benignos, y lo alza de su abatimiento, y le hace levantar cabeza; de lo cual quedan muchos maravillados, y glorifican a Dios.
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Ecli 12:16
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Derrama lágrimas de sus ojos el enemigo; pero si halla ocasión, no se hartará de sangre.
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Ecli 12:18
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Llorando están los ojos del enemigo; mas en ademán de ayudarte te dará un traspié.
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Ecli 15:20
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Tiene puestos el Señor sus ojos sobre los que le temen, y él observa todas las acciones de los hombres.
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Ecli 16:6
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Muchas cosas semejantes han visto mis ojos, y más graves que éstas las han oído mis oídos.
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Ecli 16:21
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¿y quién es el que entiende sus caminos?; ¿y aquella espantosa tormenta del Juicio Final , que jamás habrán visto igual ojos humanos?
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Ecli 17:5
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De la sustancia del mismo formó Dios una ayuda semejante a él; les dio a ambos razón y lengua, y ojos, y orejas, e ingenio para inventar, y los llenó de las luces del entendimiento.
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Ecli 17:7
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Acercó la luz de sus divinos ojos a sus corazones, para hacerles conocer la magnificencia de sus obras,
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Ecli 17:11
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Vieron con los propios ojos la grandeza de su gloria, y la majestad de su voz les hirió los oídos y les dijo: Guardaos de toda suerte de iniquidad.
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Ecli 17:13
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Están siempre a su vista los procederes de ellos; no pueden encubrirse a sus divinos ojos.
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Ecli 17:16
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Todas las obras de ellos están patentes como el sol en la presencia de Dios, cuyos ojos están siempre fijos sobre sus procederes.
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Ecli 17:18
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La limosna del hombre la guarda Dios como un sello, y tendrá cuidado de las buenas obras del hombre como de las niñas de sus ojos.
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Ecli 18:18
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El necio prorrumpe ásperamente en improperios, y la dádiva del hombre mal criado y duro entristece y saca lágrimas de los ojos.
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Ecli 18:26
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De la mañana a la tarde se cambiará el tiempo, y todo esto se hace muy pronto a los ojos de Dios."
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Ecli 20:14
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La dádiva del necio no te aprovechará; porque sus ojos tienen muchas miras de interés en lo que te da.
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Ecli 20:31
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Los regalos y las dádivas ciegan los ojos de los jueces, y les cierran la boca para no corregir a los malos."
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Ecli 23:5
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No permitas en mis ojos la altanería; y aleja de mí todo mal deseo.
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Ecli 23:28
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y no sabe que los ojos del Señor son mucho más luminosos que el sol, y que descubren todos los procederes de los hombres y lo más profundo del abismo, y ven hasta los más recónditos senos del corazón humano."
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Ecli 26:12
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La deshonestidad de la mujer se deja conocer en su mirar desvergonzado y en la altivez de sus ojos.
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Ecli 26:13
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Vela atentamente sobre la hija que no refrena sus ojos; no sea que hallando oportunidad, desfogue sus pasiones.
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Ecli 26:14
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Te sea sospechosa toda inmodestia de sus ojos, y no te maravilles si después no hace caso de ti.
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Ecli 27:25
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Adula uno con los ojos, y está al mismo tiempo fraguando picardías, y nadie lo desecha de sí.
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Ecli 30:21
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Está mirando con sus ojos muchos bienes, y no hace sino gemir, como el eunuco que abraza una doncella, y da un suspiro.
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Ecli 34:15
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porque tienen ellos puesta su esperanza en su salvador , y los ojos de Dios están fijos sobre los que le aman.
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Ecli 34:18
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¿En quién pone ella sus ojos, y quién es su fortaleza?
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Ecli 34:19
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Fijos están los ojos del Señor sobre los que le temen; el Señor es el poderoso protector, el apoyo fuerte, un toldo contra los ardores del sol y fresca sombra contra el sol del medio día.
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Ecli 34:20
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Guardia para no tropezar, socorro en las caídas, el que eleva el alma y alumbra los ojos; el que da sanidad, y vida, y bendiciones.
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Ecli 35:21
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La oración del humilde o afligido traspasará las nubes, y no reposará hasta acercarse al Altísimo; del cual no se apartará hasta cuando incline hacia él los ojos.
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Ecli 36:1
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¡Oh Dios de todas las cosas!, ten misericordia de nosotros y vuelve hacia nosotros tus ojos, y muéstranos la luz de tu piedad.
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Ecli 36:4
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Porque así como a vista de tus ojos demostraste en nosotros tu santidad, así también a nuestra vista muestres en ellas tu grandeza;
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Ecli 38:30
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El estruendo del martillo le aturde los oídos, y tiene fijos sus ojos en el modelo de su obra.
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Ecli 39:24
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Están a su vista las acciones de todos los hombres, y no hay cosa escondida a sus ojos.
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Ecli 41:25
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de no responder a los que te saludan; de fijar tus ojos sobre la mujer fornicaria; y de torcer tu rostro para no ver al pariente.
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Ecli 41:27
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No pongas tus ojos en la mujer de otro, ni solicites a su criada; no te arrimes a su lecho.
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