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Gen 3:5
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Sabe, Dios que en cualquier tiempo que comiereis de él, se abrirán vuestros ojos y seréis como dioses, conocedores de todo, del bien y del mal.
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Gen 3:6
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Vio, pues, la mujer que el fruto de aquel árbol era bueno para comer, y bello a los ojos y de aspecto deleitable, y cogió del fruto y le comió: dio también de él a su marido, el cual comió.
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Gen 3:7
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Luego se les abrieron a ambos los ojos; y como echasen de ver que estaban desnudos, cosieron o se acomodaron unas hojas de higuera, y se tuvieron unos delantales o ceñidores.
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Gen 13:10
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Lot, pues, habiendo alzado los ojos, miró, toda la ribera del Jordán, por el camino que va a Segor, la cual era de regadío por todas partes; y, antes que asolase el Señor a Sodoma y Gomorra, fecunda como un paraíso del Señor, y como el feraz Egipto.
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Gen 13:13
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Mas los sodomitas eran perversísimos, y muy grandes pecadores a los ojos de Dios.
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Gen 13:14
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Y dijo el Señor a Abram, después que Lot se separó de él: Alza tus ojos y mira, desde el sitio en que ahora estás, hacia el norte y el mediodía, hacia el oriente y el poniente.
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Gen 18:2
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Sucedió, pues, que alzando los ojos, vio cerca de sí parados a tres personajes: y luego que los vio, corrió a su encuentro desde la puerta del pabellón, y les hizo reverencia inclinándose hasta el suelo.
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Gen 19:19
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pues que tu siervo ha encontrado gracia en tus ojos, y has mostrado conmigo tan gran misericordia, poniendo en salvo mi vida, ya que no puedo arribar al monte, antes que quizá me alcance el azote, y muera:
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Gen 20:16
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Mas a Sara le dijo: Mira que he dado a tu hermano mil monedas de plata, para que, en cualquier lugar que vayas, tengas siempre un velo sobre los ojos en señal de casada delante de todos aquéllos con quienes te hallares: y acuérdate de que has sido cogida y reputada por soltera.
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Gen 21:19
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En esto abrió Dios los ojos a Agar, la cual viendo allí cerca un pozo de agua, fue corriendo, y llenó el odre, y dio de beber al muchacho.
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Gen 22:4
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Al tercer día de camino, alzando los ojos divisó el lugar a lo lejos.
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Gen 22:13
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Alzó Abrahán los ojos, y vio detrás de sí un carnero enredado por las astas en un zarzal, y habiéndole cogido le ofreció en holocausto en vez del hijo.
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Gen 24:63
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Y había salido al campo a meditar, caído ya el día; y habiendo alzado los ojos, vio venir a los camellos a lo lejos.
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Gen 29:17
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Pero Lía tenía los ojos legañosos; Raquel era de lindo semblante y de hermoso talle.
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Gen 30:27
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Le dijo Labán: Halle yo gracia en tus ojos, tengo conocido por experiencia que Dios me ha bendecido por tu causa.
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Gen 30:38
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Así las puso en las canales, donde se vertía el agua, para que cuando viniesen a beber las ovejas, tuviesen ante los ojos las varas y concibiesen aún después a vista de ellas.
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Gen 30:40
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De esta suerte dividió Jacob la grey, poniendo las varas en las canales ante los ojos de los carneros, de manera que todas las crías blancas y las negras eran de Labán; quedando para Jacob las demás de varios colores, teniendo separados entre sí los rebaños.
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Gen 30:41
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Al tiempo, pues, de concebir las ovejas en la primavera, ponía Jacob las varas en los canales ante los ojos de los carneros y de las ovejas, para que concibiesen estándolas mirando.
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Gen 31:10
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Porque llegado el tiempo en que debían concebir las ovejas, alcé los ojos, y vi entre sueños que los machos que cubrían a las hembras, eran pintados y manchados, y de diversos colores.
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Gen 31:12
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Y me dijo: Alza tus ojos, y mira los machos cubriendo las hembras, todos de varios colores, manchados, y moteados. Porque yo he visto todas cuantas cosas ha hecho Labán contigo.
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Gen 31:40
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Día y noche andaba quemado del calor, y del hielo, y el sueño huía de mis ojos.
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Gen 33:1
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Y alzando después Jacob los ojos, vio venir a Esaú, y con él los cuatrocientos hombres; y dividió los hijos de Lía, y los de Raquel, y de las dos siervas,
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Gen 33:5
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Levantando en seguida los ojos, vio a las mujeres y a sus niños, y preguntó: ¿Quiénes son éstos?; ¿son por ventura tuyos? Respondió Jacob : Son los niños que ha dado Dios a tu siervo.
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Gen 33:10
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Replicó Jacob : No hagas tal, te suplico; antes bien, si es que yo he hallado gracia en tus ojos, recibe de mis manos ese pequeño regalo; ya que viendo tu semblante, me ha parecido ver el semblante de Dios: hazme este favor,
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Gen 38:7
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Pero Her, primogénito de Judá, fue un malvado a los ojos del Señor, que por eso le quitó la vida.
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Gen 39:4
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Así José halló gracia en los ojos de su amo, al cual servía con esmero; y puesto por él al frente de todo, gobernaba la casa confiada a su cuidado, y todos los bienes que se le habían entregado.
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Gen 39:7
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por lo que al cabo de muchos días puso su señora los ojos en él, y le dijo: Duerme conmigo.
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Gen 39:21
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Pero el Señor asistió a José, y compadecido de él, le hizo grato a los ojos del alcaide de la cárcel.
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Gen 43:29
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En esto, alzando José los ojos, vio a Benjamín, su hermano uterino, y dijo: ¿Es ése vuestro hermano el pequeño, de quien me hablasteis? E inmediatamente añadió: Dios te dé su gracia, hijo mío y te bendiga.
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Gen 45:12
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Reparad que vuestros ojos, y los ojos de mi querido hermano Benjamín, están viendo que soy yo quien os hablo en persona.
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Gen 45:12
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Reparad que vuestros ojos, y los ojos de mi querido hermano Benjamín, están viendo que soy yo quien os hablo en persona.
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Gen 46:4
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Yo iré allá contigo, y seré tu guía cuando vuelvas. Y José cerrará tus ojos, así que mue-ras.
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Gen 47:19
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¿Por qué, pues, nos dejarás morir delante de tus ojos? Tanto nosotros, como nuestras tierras, seremos tuyos; cómpranos para servicio del rey, y danos con qué sembrar, no sea que pereciendo los labradores, quede la tierra despoblada.
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Gen 48:10
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Porque los ojos de Israel se habían oscurecido a causa de su extremada vejez, y no podía ver con claridad. Habiéndoselos, pues, acercado, los besó y abrazó,
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Gen 49:12
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Sus ojos son más hermosos que el vino, y sus dientes más blancos que la leche.
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Ex 2:25
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y volvió los ojos hacia los hijos de Israel, y los reconoció por hijos suyos.
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Ex 3:21
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Haré también que ese pueblo mío halle gracia en los ojos de los egipcios, para que al partir no salgáis vacíos;
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Ex 4:31
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Y creyó el pueblo. Y entendieron que el Señor venía a visitar a los hijos de Israel por haber vuelto los ojos a su tribulación; y postrados en tierra, le adoraron.
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Ex 5:21
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y les dijeron: Atienda el Señor a esto que nos pasa, y juzgue; pues vosotros nos habéis hecho abominables a los ojos del faraón y de sus servidores, y habéis puesto en su mano el cuchillo para que nos degüelle.
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Ex 8:26
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No puede ser eso, respondió Moisés, por cuanto hemos de sacrificar al Señor Dios nuestro, animales, que entre los egipcios es un sacrilegio el matarlos. Pues si delante de sus ojos matáramos aquellos animales que ellos adoran, nos apedrearían como sacrílegos.
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Ex 12:36
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Y el Señor dio al pueblo gracia en los ojos de los egipcios, para que les prestasen lo que pedían; y de esta manera despojaron a los egipcios.
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Ex 13:9
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Y será como una señal en tu mano, y como un recuerdo delante de tus ojos, a fin de que la ley del Señor esté siempre en tu boca; por cuanto con brazo fuerte te sacó de Egipto el Señor.
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Ex 13:16
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Lo que has de tener como una señal impresa en tu mano, y como un recuerdo pendiente ante tus ojos, que te advierte habernos el Señor sacado de Egipto con brazo fuerte.
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Ex 14:10
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Y así que el faraón se hubo acercado, alzando los hijos de Israel sus ojos, vieron en pos de sí a los egipcios; con lo que se amedrentaron sobremanera.
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Ex 16:10
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Aún estaba hablando Aarón a toda la muchedumbre de los hijos de Israel, cuando volviendo ellos los ojos hacia el desierto, he aquí que la majestad del Señor se apareció en medio de la nube,
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Ex 21:8
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Si desagradare a los ojos de su dueño, a quien fue entregada, la despedirá; mas no tendrá facultad de venderla a otra gente o familia, si él la despreció.
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Ex 24:17
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La gloria del Señor aparecía como un fuego ardiente, que abrasaba la cumbre del monte, a los ojos de los hijos de Israel.
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Ex 33:8
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Y cuando Moisés salía para ir al Tabernáculo, se levantaban todas las gentes, y quedaba cada cual en pie a la puerta de su pabellón, siguiendo con sus ojos tras de Moisés, hasta que entraba en el Tabernáculo
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Ex 33:12
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Dijo Moisés al Señor: Tú me mandas que salga conduciendo a este pueblo; y no me haces saber quién es aquel a quien has de enviar conmigo, y eso habiéndome dicho: Te conozco o amo particularmente, y has hallado gracia en mis ojos.
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Ex 33:13
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Si es así que yo he hallado gracia en tu presencia, muéstrame tu rostro, para que yo te conozca, y halle gracia ante tus ojos; vuélvelos sobre esta nación, la cual es el pueblo tuyo.
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