Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

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Ezeq 3:17 Hijo de hombre, yo te he puesto por centinela en la casa de Israel, y de mi boca oirás mis palabras y se las anunciarás a ellos de mi parte.
Ezeq 3:23 Y poniéndome en camino, salí al campo; y he aquí que la gloria del Señor que estaba allí era el modo de aquella que vi junto al río Cobar; y me postré sobre mi rostro.
Ezeq 4:5 Ahora bien, yo te he dado el número de trescientos noventa días, por otros tantos años de la maldad de ellos, y tú llevarás la pena de la iniquidad de la casa de Israel.
Ezeq 4:6 Y concluidos estos días dormirás otra vez, y dormirás sobre tu lado derecho, y llevarás la pena de la iniquidad de la casa de Judá por cuarenta días, día por año, pues por cada año te he señalado un día.
Ezeq 4:8 Mira que yo te he rodeado de cadenas, y no te podrás volver de un lado al otro, hasta que hayas cumplido los días del sitio.
Ezeq 4:14 Entonces dije yo: ¡Ah, ah, Señor Dios! ¡Ah!, mira que mi alma no está contaminada, y desde mi infancia hasta ahora no he comido cosa mortecina, ni despedazada de fieras, ni jamás ha entrado en mi boca especie ninguna de carne inmunda.
Ezeq 5:5 Pues he aquí lo que dice el Señor Dios: Esta es aquella Jerusalén que yo fundé en medio de los gentiles, habiendo puesto las regiones de éstos alrededor de ella.
Ezeq 5:9 Y haré contra ti, a causa de todas tus abominaciones, aquello que nunca he hecho, y tales cosas, que jamás las haré semejantes.
Ezeq 5:13 Y desahogaré mi furor, y haré que pose sobre ellos la indignación mía, y quedaré satisfecho; y cuando yo hubiere desahogado sobre ellos mi indignación, entonces conocerán que yo el Señor he hablado lleno de celo por mi gloria.
Ezeq 5:16 Y conocerán que yo el Señor he hablado, cuando yo arroje contra ellos las funestas saetas del hambre; las cuales llevarán consigo la muerte: que para mataros las despediré yo; y amontonaré sobre vosotros el hambre, y os quitaré el sustento del pan.
Ezeq 5:17 Despacharé, pues, contra vosotros el hambre y las bestias y fieras hasta destruiros enteramente; y se pasearán por en medio de ti, ¡oh pueblo infiel!, la peste y la mortandad, y haré que la espada descargue sobre ti. Yo el Señor lo he dicho.
Ezeq 7:5 Esto dice el Señor Dios: La aflicción única, la aflicción singularísima, he aquí que viene.
Ezeq 7:10 He aquí el día, he aquí que ya llega, el exterminio viene ya, la vara del castigo floreció, la soberbia u obstinación ha echado sus ramas.
Ezeq 7:13 Pues el que vende, no volverá a adquirir lo vendido, aunque viva todavía, porque la visión que he tenido y comprende todo su pueblo, no quedará sin efecto; y ninguno se sostendrá por medio de las maldades de su vida.
Ezeq 8:2 Y miré, y he aquí la imagen de un hombre que parecía de fuego: Desde la cintura a los pies era todo fuego, y desde la cintura arriba era como una luz resplandeciente, como electro que brilla.
Ezeq 8:5 Y él me dijo: Hijo de hombre, levanta tus ojos hacia la parte del norte; y alzando mis ojos hacia la banda del norte, he aquí al norte de la puerta del altar, en la entrada misma, el ídolo del celo.
Ezeq 8:10 Y habiendo entrado, miré; y he aquí figuras de toda especie de reptiles y de animales; y la abominación de la familia de Israel, y todos sus ídolos estaban pintados por todo el alrededor de la pared.
Ezeq 8:16 Y me introdujo en el atrio interior del templo del Señor, y he aquí que vi en la puerta del templo del Señor, entre el vestíbulo y el altar, como unos veinticinco hombres que tenían sus espaldas vueltas al templo del Señor, y las caras hacia el oriente, adorando al sol que nacía.
Ezeq 8:17 Y me dijo: Ya lo has visto, ¡oh hijo de hombre! Pues, ¿es cosa de poco momento para la casa de Judá cometer esas abominaciones que han hecho aquí, que aun después de haber llenado de iniquidad la tierra, se han empleado en irritarme? Y he aquí que aplican un ramo a su olfato.
Ezeq 9:2 Y he aquí seis varones respetables que venían por el camino de la puerta superior que mira al norte, y cada uno de ellos traía en su mano un instrumento de muerte; había también en medio de ellos un varón, o personaje, con vestiduras de lino, el cual traía un recado de escribir en la cintura, y entraron, y se pusieron junto al altar de bronce.
Ezeq 9:11 Y he aquí que el varón que llevaba la vestidura de lino, y tenía en su cintura el recado de escribir, vino a dar parte, diciendo: He hecho lo que me mandaste.
Ezeq 12:6 Luego, a la vista de ellos, te harás llevar en hombros de otros, y serás conducido fuera siendo ya casi de noche; cubrirás tu rostro, y no verás la tierra, porque yo te he puesto para anunciar portentos a la casa de Israel.
Ezeq 12:11 Diles: Yo soy para vosotros un portento, o señal maravillosa; como lo que yo he hecho, así se les hará a ellos; serán transportados a otro país, y hechos cautivos.
Ezeq 13:7 ¿Acaso dejan de ser vanas vuestras visiones, y mentirosas las adivinaciones que habéis propalado? Vosotros decís: Así ha hablado el Señor; cuando yo nada os he hablado.
Ezeq 14:9 Y cuando cayere el profeta en error, y hablare falso, yo el Señor he dejado que se engañase aquel profeta: mas yo descargaré mi mano sobre él, y lo borraré del censo del pueblo mío de Israel.
Ezeq 14:22 sin embargo, se salvarán algunos de ellos, los cuales sacarán fuera de la tierra a sus hijos e hijas; y he aquí que éstos vendrán a vosotros aquí a Babilonia, y veréis su conducta y sus obras, y os consolaréis entonces de los desastres que yo he descargado sobre Jerusalén , y de todo el peso con que la he oprimido.
Ezeq 14:22 sin embargo, se salvarán algunos de ellos, los cuales sacarán fuera de la tierra a sus hijos e hijas; y he aquí que éstos vendrán a vosotros aquí a Babilonia, y veréis su conducta y sus obras, y os consolaréis entonces de los desastres que yo he descargado sobre Jerusalén , y de todo el peso con que la he oprimido.
Ezeq 14:22 sin embargo, se salvarán algunos de ellos, los cuales sacarán fuera de la tierra a sus hijos e hijas; y he aquí que éstos vendrán a vosotros aquí a Babilonia, y veréis su conducta y sus obras, y os consolaréis entonces de los desastres que yo he descargado sobre Jerusalén , y de todo el peso con que la he oprimido.
Ezeq 16:35 Por tanto, ¡oh mujer pecadora!, he aquí lo que dice el Señor;
Ezeq 16:37 he aquí que yo reuniré a tus amantes, con quienes has pecado, y a todos tus queridos, y a todos los que habías aborrecido, y los reuniré contra ti de todas partes, y delante de ellos descubriré tu ignominia, y verán ellos toda tu torpeza;
Ezeq 16:43 Por cuanto te olvidaste de los días de tu mocedad, y me provocaste con todas esas cosas; por lo mismo yo también he hecho que recaigan sobre ti los desórdenes de tu vida, dice el Señor Dios; y aún no te castigaré conforme merecen los delitos de todas tus abominaciones.
Ezeq 17:7 Y vino otra águila grande, de grandes alas y de muchas plumas; y he aquí que aquella parra, como que volvió sus raíces, y extendió sus sarmientos hacia ella, para ser regada con sus fecundos canales.
Ezeq 17:21 Y perecerán al filo de la espada todos sus fugitivos y todos sus escuadrones, y los que quedaren serán esparcidos por toda la tierra, y conoceréis que yo el Señor he hablado.
Ezeq 20:48 Y conocerán todos los hombres que yo el Señor he puesto el fuego; y éste no se apagará.
Ezeq 21:4 Y por cuanto he de matar en ti al justo y al impío, por eso saldrá mi espada de su vaina contra todo hombre, desde el mediodía hasta el septentrión,
Ezeq 21:5 a fin de que sepan todos que yo el Señor he desenvainado mi irresistible espada.
Ezeq 21:15 y desmayar de ánimo, y multiplicará los estragos. A todas sus puertas he llevado yo el terror de la espada aguda y bruñida, a fin de que brille, y esté pronta para dar la muerte.
Ezeq 21:17 Lo aplaudiré yo también con palmadas, y se saciará mi indignación. Yo el Señor soy el que he hablado.
Ezeq 21:32 Servirás, ¡oh caldeo!, de cebo al fuego; despreciada se verá por el suelo la sangre tuya, y serás entregado a perpetuo olvido; porque yo el Señor he hablado.
Ezeq 22:4 Tú has pecado, derramando la sangre, y te has contaminado con los ídolos que fabricaste y has acelerado el tiempo de tu castigo, y hecho llegar el fin de tus años. Por este motivo te he hecho el oprobio de las naciones y el escarnio de toda la tierra.
Ezeq 22:19 Por lo cual esto dice el Señor Dios: Por cuanto todos habéis venido a ser no más que escoria, por eso he aquí que yo os reuniré en medio de Jerusalén ,
Ezeq 22:26 Sus sacerdotes han despreciado mi ley, han contaminado mis santuarios, no han sabido hacer diferencia entre lo sagrado y lo profano, ni distinguir entre lo inmundo y lo puro, y no hicieron caso de mis sábados, y he sido yo deshonrado en medio de ellos.
Ezeq 23:34 Y lo beberás hasta sus últimos tragos y morderás sus tiestos, y te despedazarás el pecho, porque yo he hablado, dice el Señor Dios.
Ezeq 24:13 Digna de execración es tu inmundicia pues yo te he querido limpiar de tu porquería, y tú no te has limpiado, ni te limpiarás hasta cuando que yo haya desfogado en ti la indignación mía.
Ezeq 24:14 Yo el Señor he hablado: Vendrá el tiempo y lo ejecutaré; no volverá atrás mi palabra, ni perdonaré, ni me aplacaré, según tus caminos y tus procederes te juzgaré yo, dice el Señor.
Ezeq 24:22 Y tendréis que hacer lo que yo he hecho, pues no os cubriréis el rostro con velo, ni os alimentaréis con las viandas que usan los que están de luto.
Ezeq 25:7 he aquí que yo descargaré mi mano contra ti, y te haré presa de las naciones, y te borraré del número de los pueblos, y te exterminaré de la superficie de la tierra, y te reduciré a polvo, y sabrás que yo soy el Señor.
Ezeq 25:9 por eso he aquí que yo dejaré descubierto el flanco del país de Moab por la parte de las ciudades, de las ciudades, digo, que están en sus confines, las más famosas del país, Betiesimot, y Beelmeón, y Cariataím;
Ezeq 26:5 Ella, en medio del mar, será como un tendedero para enjugar las redes; porque yo le he dicho, dice el Señor Dios, será ella hecha presa de las naciones.
Ezeq 26:14 Y te dejaré tan arrasada como una limpísima peña, y servirás de tendedero para enjugar las redes; y no volverás a ser reedificada; porque yo lo he decretado, dice el Señor Dios.