II Par 13:17
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Con esto Abía y su gente hicieron en ellos gran destrozo, tanto que cayeron heridos quinientos mil valientes por parte de Israel.
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II Par 14:8
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Tenía Asá en su ejército trescientos mil hombres de Judá, armados de escudos y picas, y de Benjamín doscientos ochenta mil de rodela y aljaba, todos ellos gente valerosísima.
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II Par 14:13
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Los persiguió Asá con su gente hasta Gerara, y fueron los etíopes destrozados hasta no quedar hombre con vida; exterminados por el Señor que los hería y por su ejército que peleaba. Cogieron, pues, un gran botín,
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II Par 16:6
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Entretanto el rey Asá tomó consigo toda la gente de Judá, y trajeron de Rama todas las piedras y maderas acopiadas por Baasa para la construcción, y con ellas fortificó a Gabaa y a Masfa.
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II Par 18:2
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Al cabo de algunos años pasó a visitar a éste en Samaria, por cuya llegada hizo matar Acab muchísimos carneros y bueyes para él y para la gente que con él había venido, y lo persuadió de ir con él contra Ramot de Galaad.
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II Par 19:2
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a cuyo encuentro vino Jehú, profeta, hijo de Hanani, y le dijo: Tú das socorro a un impío, y te estrechas en amistad con gente que aborrece al Señor; por tanto merecías experimentar la ira del Señor.
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II Par 20:4
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Y se juntó el pueblo de Judá para implorar el socorro del Señor, y toda la gente venía desde sus ciudades a presentarle sus ruegos.
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II Par 23:5
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La tercera parte de vosotros, así sacerdotes y levitas como porteros que entráis de semana, estará en las puertas; otra tercera parte en la habitación del rey; y la otra tercera en la puerta llamada del Fundamento; el resto de la gente esté en los patios del templo del Señor.
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II Par 23:6
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Nadie entre en la casa del Señor sino los sacerdotes y levitas que están de servicio; éstos sólo entren, por estar consagrados, y todo el resto de la gente esté de centinela ante la casa del Señor.
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II Par 23:10
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y apostó toda la gente armada de dagas, desde la parte derecha del templo hasta la izquierda delante del altar y del templo, alrededor del rey.
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II Par 23:20
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Y juntando consigo a los centuriones, y a los soldados más valientes, y a los príncipes del pueblo, y a toda la gente del país, dispusieron que bajase el rey de la casa del Señor, y lo introdujeron por la puerta superior en el palacio del rey, y lo colocaron en el real solio.
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II Par 25:11
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Amasías lleno de confianza puso en movimiento su gente, y se dirigió al valle de las Salinas, donde derrotó a diez mil de los hijos de Seir o idumeos.
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II Par 28:5
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Por eso el Señor Dios lo entregó en poder del rey de Siria, el cual le derrotó, y cogió un gran botín de su reino, y se lo llevó a Damasco. También fue entregado en manos del rey de Israel, que hizo gran destrozo en su gente.
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II Par 28:17
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Entretanto entraron los idumeos en el país de Judá, y mataron mucha gente, y cogieron un gran botín.
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II Par 30:17
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porque como muchísima gente no estaba todavía purificada, por eso los levitas degollaron el cordero pascual por aquellos padres de familia que no habían acudido a tiempo para purificarse delante del Señor.
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II Par 30:25
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Así pues, rebosaba de alegría toda la gente de Judá, junto con los sacerdotes y levitas, no menos que todo el concurso que había acudido de Israel, como también los extranjeros, tanto los del país de Israel, como los que habitaban en tierra de Judá.
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I Esd 4:4
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De aquí resultó que la gente de aquella tierra inquietaba a los obreros del pueblo de Judá, y le estorbaba la construcción.
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I Esd 4:21
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Ahora, pues, oíd nuestra decisión: Prohibid a esa gente la reedificación de dicha ciudad, hasta tanto que yo quizá mande otra cosa.
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I Esd 10:13
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mas como la gente es mucha y el tiempo está lluvioso, no podemos estar al descubierto, y no es este negocio de un día ni de dos (por ser tan grande y de tantos el pecado que hemos cometido),
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II Esd 2:9
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Con eso llegué a los gobernadores del territorio de la otra parte del río, y les di las cartas del rey. Había el rey enviado conmigo oficiales de guerra y gente de a caballo.
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II Esd 4:16
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Y desde aquel día la mitad de la gente moza trabaja en la obra y la otra mitad sobre las armas, con lanzas y escudos, y ballestas, y corazas, y detrás de ellos los capitanes en toda la familia de Judá.
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II Esd 7:4
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Era la ciudad muy ancha y capaz, y la gente que la habitaba poca; no estando reedificadas las casas.
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II Esd 7:66
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Toda esta gente, reunida como si fuera un solo hombre, ascendía a cuarenta y dos mil trescientos sesenta,
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II Esd 8:5
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Abrió, pues, Esdras el libro a vista de todo el pueblo, como que se hallaba en un lugar más elevado que todos; y así lo abrió, se puso en pie toda la gente.
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II Esd 8:7
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Los levitas Josué, Bani, y Serebías, Accub, Septai, Odía, Maasía, Celita, Azarías, Jozabed, Hanán y Falía cuidaban de hacer guardar silencio al pueblo para que oyese la ley; y estaba la gente en pie, cada uno en su lugar.
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II Esd 8:12
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Con eso se retiró toda la gente a comer y beber, y a repartir porciones y celebrar una gran fiesta, por haber entendido las palabras que se lers habían explicado.
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II Esd 11:1
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Los príncipes o magnates del pueblo fijaron su habitación en Jerusalén ; mas el resto de la gente se sacó por suerte la décima parte para que se estableciese en Jerusalén , ciudad santa, y las otras nueve en las demás ciudades.
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II Esd 12:31
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Yo hice subir a los magnates de Judá sobre la muralla y formé también dos grandes coros de gente que cantaba. Y se encaminaron a la derecha sobre el muro hacia la puerta llamada del Estercolero.
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II Esd 13:21
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Pero yo les amenacé, y dije: ¿Por qué os quedáis así delante de las murallas? Si otra vez lo hiciereis, enviaré gente a prenderos. Con esto desde entonces no volvieron más en sábado.
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Tob 1:17
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viendo entre la mucha gente de su nación a Gabelo, de su misma tribu, el cual padecía necesidad, le dejó prestada, mediante un recibo de su mano, esa suma de dinero.
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Tob 3:17
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Jamás me acompañé con gente licenciosa, ni tuve trato con los que se portan livianamente.
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Jud 2:16
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Y se llevó toda la gente de Madián, robando todas las riquezas, y pasando a cu-chillo a cuantos le resistían.
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Jud 4:3
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Por lo que enviaron gente a toda la frontera de Samaria hasta Jericó , y ocuparon de antemano todas las cimas de los montes;
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Jud 5:3
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y les habló de esta manera: Decidme qué casta de pueblo es ese que tiene ocupados los desfiladeros de los montes; o qué ciudades son las suyas, cuáles y cuán grandes; cuál sea también su valor, cuánta su gente y quién es el que gobierna sus tropas.
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Jud 6:12
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Estando, pues, Aquior en medio de los ancianos, y a vista de toda la gente, refirió todo cuanto había respondido a las preguntas de Holofernes; y cómo la gente de Holofernes lo había querido matar por haber hablado de aquella manera;
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Jud 6:12
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Estando, pues, Aquior en medio de los ancianos, y a vista de toda la gente, refirió todo cuanto había respondido a las preguntas de Holofernes; y cómo la gente de Holofernes lo había querido matar por haber hablado de aquella manera;
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Jud 13:25
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Porque hoy ha hecho tan célebre tu nombre, que no cesarán jamás de publicar tus alabanzas cuantos conservaren en los siglos venideros la memoria de los prodigios del Señor; pues no has temido exponer tu vida por tu pueblo, viendo las angustias y la tribulación de tu gente, sino que has acudido a nuestro Dios para impedir su ruina.
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Jud 14:15
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Y habiendo entrado en el alojamiento de Judit, no la encontró. Con esto salió corriendo fuera a la gente,
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Est 10:9
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Mi gente es Israel, la cual clamó al Señor, y el Señor salvó a su pueblo; librándonos de todos los males, y obrando grandes milagros y portentos entre los gentiles.
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Job 5:5
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Sus mieses las devorará un hambriento; y gente armada echará mano de él, y se le llevará cautivo, y hombres sedientos se sorberán sus riquezas.
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Job 24:9
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A viva fuerza saquearon a los huérfanos, y despojaron a la gente pobre.
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Job 30:8
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Hijos de gente insensata y grosera, y que no se atreven a aparecer en el mundo.
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Job 30:28
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Ando melancólico, pero sin enfurecerme; me levanto a veces, y doy gritos en medio de la gente.
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Job 34:34
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Pero yo quisiera escuchar a hombres de entendimiento, y hablar con gente sabia.
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Salm 21:7
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Bien que yo soy un gusano, y no un hombre; el oprobio de los hombres, y el desecho de la gente.
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Salm 25:4
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Nunca he ido a sentarme en las reuniones de gente vana, ni conversé jamás con los que obran la iniquidad.
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Salm 42:1
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Salmo de David. Júzgame tú, oh Dios, y toma en tus manos mi causa; líbrame de la gente impía, y del hombre inicuo y engañador.
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Salm 55:1
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Para el fin: para la gente que estaba lejos del Santuario. Inscripción para ponerse sobre una columna por David, cuando los estrangeros ó filisteos le detuvieron en Get.
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Salm 73:22
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Levántate, ¡oh Dios!, y juzga tu causa: Ten presentes tus ultrajes, los ultrajes que te está haciendo de continuo una gente insensata.
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Salm 82:5
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Venid, dijeron, y borremos esa gente de la lista de las naciones, y no quede más memoria del nombre de Israel.
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