Mc 9:1
|
Seis días después tomó Jesús consigo a Pedro, y a Santiago, y a Juan; y los condujo a un elevado monte, en lugar apartado, y se transfiguró en su presencia;
|
Mc 9:3
|
Al mismo tiempo se les aparecieron Elías y Moisés, que estaban conversando con Jesús .
|
Mc 9:4
|
Y Pedro, absorto con lo que veía tomando la palabra, dijo a Jesús : ¡Oh Maestro!, bueno será quedarnos aquí: hagamos tres pabellones, uno para ti, otro para Moisés, y otro para Elías.
|
Mc 9:7
|
Y mirando luego a todas partes, no vieron consigo a nadie más que a Jesús .
|
Mc 9:14
|
Y todo el pueblo, luego que vio a Jesús , se llenó de asombro y de pavor; y acudieron todos corriendo a saludarle.
|
Mc 9:18
|
Jesús , dirigiendo a todos la palabra, les dijo: ¡Oh gente incrédula!, ¿hasta cuándo habré de estar entre vosotros?; ¿hasta cuándo habré yo de sufriros? Traedlo a mí.
|
Mc 9:19
|
Se lo trajeron. Y apenas vio a Jesús , cuando el espíritu empezó a agitarlo con violencia; y tirándose contra el suelo, se revolcaba, echando espumarajos.
|
Mc 9:20
|
Jesús preguntó a su padre: ¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto? Desde la niñez, respondió,
|
Mc 9:22
|
A lo que Jesús le dijo: Si tú puedes creer, todo es posible para el que cree.
|
Mc 9:24
|
Viendo Jesús la gente que iba acudiendo, amenazó al espíritu inmundo, diciendo: Espíritu sordo y mudo, yo te lo mando, sal de este muchacho, y no vuelvas más a entrar en él.
|
Mc 9:26
|
Pero Jesús , cogiéndolo de la mano, le ayudó a alzarse, y se levantó.
|
Mc 9:27
|
Cuando entró Jesús en la casa donde moraba, sus discípulos le preguntaban a solas: ¿Por qué motivo nosotros no le hemos podido lanzar?
|
Mc 9:34
|
Entonces Jesús , sentándose, llamó a los doce, y les dijo: Si alguno pretende ser el primero, hágase el último de todos y el siervo de todos.
|
Mc 9:38
|
No hay para qué prohibírselo, respondió Jesús , puesto que nadie que haga milagros en mi nombre podrá luego hablar mal de mí.
|
Mc 10:5
|
A los cuales replicó Jesús : En vista de la dureza de vuestro corazón os dejo mandado eso.
|
Mc 10:14
|
Lo que advirtiendo Jesús , lo llevó muy a mal y les dijo: Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo estorbéis; porque de los que se asemejan a ellos es el reino de Dios.
|
Mc 10:18
|
Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno sino sólo Dios.
|
Mc 10:21
|
Y Jesús mirándole de hito en hito, mostró quedar prendado de él, y le dijo: Una cosa te falta aún, anda, vende cuanto tienes, y dalo a los pobres, que así tendrás un tesoro en el cielo; y ven después y sígueme.
|
Mc 10:23
|
Y echando Jesús una ojeada alrededor de sí, dijo a sus discípulos: ¡Oh, cuán difícilmente los acaudalados entrarán en el reino de Dios!
|
Mc 10:24
|
Los discípulos quedaron pasmados al oír tales palabras. Pero Jesús , volviendo a hablar les añadió: ¡Ay, hijitos míos, cuán difícil cosa es que los que ponen su confianza en las riquezas entren en el reino de Dios!
|
Mc 10:27
|
Pero Jesús fijando en ellos la vista, les dijo: A los hombres es esto imposible, mas no a Dios; pues para Dios todas las cosas son posibles.
|
Mc 10:29
|
A lo que Jesús , respondiendo dijo: Pues yo os aseguro que nadie hay que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas o padre o madre, o hijos o heredades por amor de mí y del mensaje de salvación,
|
Mc 10:32
|
Continuaban su viaje subiendo a Jerusalén , y Jesús se les adelantaba: y estaban sus discípulos como atónitos, y le seguían llenos de temor. Y tomando aparte de nuevo a los doce, comenzó a repetirles lo que había de sucederle.
|
Mc 10:38
|
Mas Jesús les replicó: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber el cáliz que yo voy a beber?; ¿o ser bautizados con el bautismo con que yo voy a ser bautizado?
|
Mc 10:39
|
Le respondieron: Sí que podemos. Pues tened por cierto, les dijo Jesús , que beberéis el cáliz y seréis bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado;
|
Mc 10:42
|
Mas Jesús , llamándolos todos a sí, les dijo: Bien sabéis que los que tienen autoridad de mandar a las naciones, las tratan con imperio; y que sus príncipes ejercen sobre ellos un poder absoluto.
|
Mc 10:47
|
Habiendo oído, pues, que era Jesús Nazareno el que venía, comenzó a dar voces, diciendo: ¡Jesús , hijo de David, ten misericordia de mí!
|
Mc 10:47
|
Habiendo oído, pues, que era Jesús Nazareno el que venía, comenzó a dar voces, diciendo: ¡Jesús , hijo de David, ten misericordia de mí!
|
Mc 10:49
|
Parándose entonces Jesús , le mandó llamar. Y le llamaron, diciéndole: ¡Ea, buen ánimo!, levántate, que te llama.
|
Mc 10:51
|
Y Jesús le dijo: ¿Qué quieres que te haga? El ciego le respondió: Maestro, haz que yo vea.
|
Mc 10:52
|
Y Jesús : Anda, que tu fe te ha curado. Y de repente vio, y él iba siguiendo por el camino.
|
Mc 11:6
|
Los discípulos respondieron conforme a lo que Jesús les había mandado, y se lo dejaron llevar.
|
Mc 11:7
|
Y trajeron el burro a Jesús ; y habiéndole aparejado con los vestidos de ellos, montó Jesús en él.
|
Mc 11:7
|
Y trajeron el burro a Jesús ; y habiéndole aparejado con los vestidos de ellos, montó Jesús en él.
|
Mc 11:8
|
Muchos en seguida tendieron sus vestidos en el camino; y otros cortaban ramas u hojas de los árboles, y las esparcían por donde había de pasar Jesús .
|
Mc 11:11
|
Así entró Jesús en Jerusalén y se fue al templo, donde después de haber observado por una y otra parte todas las cosas, siendo ya tarde, se salió a Betania con los doce.
|
Mc 11:15
|
Llegan, pues, a Jerusalén . Y habiendo Jesús entrado en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en él, y derribó las mesas de los cambistas, y los asientos de los que vendían palomas para los sacrificios;
|
Mc 11:22
|
Y Jesús tomando la palabra, les dijo: Tened confianza en Dios.
|
Mc 11:27
|
Volvieron, pues, otra vez a Jerusalén . Y paseándose Jesús por el atrio exterior del templo instruyendo al pueblo, se acercaron a él los príncipes de los sacerdotes, y los escribas, y los ancianos;
|
Mc 11:29
|
Y respondiendo Jesús , les dijo: Yo también os haré una pregunta. Respondedme, y después os diré con qué autoridad hago estas cosas:
|
Mc 11:33
|
y así respondieron a Jesús , diciendo: No lo sabemos. Entonces Jesús les replicó: Pues yo tampoco os diré con qué autoridad hago estas cosas.
|
Mc 11:33
|
y así respondieron a Jesús , diciendo: No lo sabemos. Entonces Jesús les replicó: Pues yo tampoco os diré con qué autoridad hago estas cosas.
|
Mc 12:15
|
Jesús penetrando su malicia, les dijo: ¿Para qué venis a tentarme? Dadme a ver un denario, o la moneda corriente.
|
Mc 12:17
|
Entonces replicó Jesús , y les dijo: Pagad, pues, a César lo que es de César; y a Dios lo que es de Dios. Con cuya respuesta los dejó maravillados.
|
Mc 12:24
|
Jesús en respuesta les dijo: ¿No veis que habéis caído en error, por no entender las Escrituras, ni el poder de Dios?
|
Mc 12:29
|
Y Jesús le respondió: El primero de todos los mandamientos es éste: Escucha, ¡oh Israel!, el Señor Dios tuyo, es el solo Dios:
|
Mc 12:34
|
Viendo Jesús que había respondido sabiamente, le dijo: No estás lejos del reino de Dios. Y ya nadie osaba hacerle más preguntas.
|
Mc 12:35
|
Y enseñando y razonando después Jesús en el templo, decía: ¿Cómo dicen los escribas que el Cristo o Mesías es hijo de David?
|
Mc 12:41
|
Estando Jesús sentado frente al arca de las ofrendas, estaba mirando cómo la gente echaba dinero en ella; y muchos ricos echaban grandes cantidades.
|
Mc 13:2
|
Jesús le dio por respuesta: ¿Vez todos esos magníficos edificios? Pues serán de tal modo destruidos, que no quedará piedra sobre piedra.
|