I Mac 14:23
|
y pareció bien al pueblo recibir estos embajadores honoríficamente, y depositar copia de sus palabras en los registros públicos, para que en lo sucesivo sirva de recuerdo al pueblo de los lacedemonios. Y de esta acta hemos remitido un traslado al sumo sacerdote Simón.
|
I Mac 15:32
|
Llegó, pues, Atenobio, amigo del rey, a Jerusalén , y viendo la magnificencia de Simón, y el oro y plata que brillaba por todas partes, y el gran aparato de su casa, se sorprendió sobremanera. Le dijo luego las palabras que el rey le había mandado."
|
II Mac 6:29
|
Y aquellos que le llevaban, y que poco antes se le habían mostrado muy humanos, pasaron a un extremo de furor por las palabras que había dicho; las cuales creían efecto de arrogancia."
|
II Mac 7:24
|
Antíoco, pues, considerándose humillado, y creyendo que aquellas voces de los mártires eran un insulto a él, como quedase todavía el más pequeño de todos, comenzó no sólo a persuadirle con palabras, sino a asegurarle también con juramento, que lo haría rico y feliz si abandonaba las leyes de sus padres, y que le tendría por uno de sus amigos, y le daría cuanto necesitase.
|
II Mac 9:5
|
Mas el Señor Dios de Israel, que ve todas las cosas, lo hirió con una llaga interior e incurable, pues apenas había acabado de pronunciar dichas palabras, le acometió un acerbo dolor de entrañas y un terrible cólico.
|
II Mac 15:17
|
Animados, pues, todos con estas palabras de Judas, las más eficaces para avivar el valor, e infundir nuevo aliento en la juventud, resolvieron atacar y combatir vigorosamente a los enemigos, de modo que su esfuerzo decidiese la causa, pues así el templo como la ciudad santa estaban en peligro.
|
Mt 6:7
|
En la oración no afectéis hablar mucho, como hacen los gentiles, que se imaginan haber de ser oídos a fuerza de palabras.
|
Mt 10:14
|
Caso que no quieran recibiros, ni escuchar vuestras palabras, saliendo fuera de la casa o ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies.
|
Mt 12:37
|
Porque por tus palabras habrás de ser justificado, y por tus palabras condenado.
|
Mt 12:37
|
Porque por tus palabras habrás de ser justificado, y por tus palabras condenado.
|
Mt 19:22
|
Habiendo oído el joven estas palabras, se retiró entristecido; y era que tenía muchas posesiones.
|
Mt 22:31
|
Mas tocante a la resurrección de los muertos, ¿no habéis leído las palabras que Dios os tiene dichas:
|
Mt 23:5
|
Todas sus obras las hacen con el fin de ser vistos de los hombres; por lo mismo llevan las palabras de la ley en cintas más anchas, y más largas las franjas u orlas de su vestido.
|
Mt 24:35
|
El cielo y la tierra pasarán; pero mis palabras no pasarán.
|
Mt 26:44
|
Y dejándolos, se retiró aún a orar por tercera vez, repitiendo las mismas palabras.
|
Mt 27:37
|
Le pusieron también sobre la cabeza estas palabras, que denotaban la causa de su condenación: Este es Jesús , el Rey de los Judíos.
|
Mc 9:9
|
En efecto, guardaron en su pecho el secreto; aunque andaban discurriendo entre sí qué querría decir con aquellas palabras: Cuando hubiese resucitado de entre los muertos.
|
Mc 10:24
|
Los discípulos quedaron pasmados al oír tales palabras. Pero Jesús , volviendo a hablar les añadió: ¡Ay, hijitos míos, cuán difícil cosa es que los que ponen su confianza en las riquezas entren en el reino de Dios!
|
Mc 13:31
|
El cielo y la tierra faltarán; pero no faltarán mis palabras.
|
Mc 14:39
|
Se fue otra vez a orar, repitiendo las mismas palabras.
|
Lc 1:20
|
Y desde ahora quedarás mudo, y no podrás hablar, hasta el día en que sucedan estas cosas, por cuanto no has creído a mis palabras, las cuales se cumplirán a su tiempo.
|
Lc 1:29
|
Al oír tales palabras la Virgen se turbó, y se puso a considerar qué significaría tal saludo.
|
Lc 3:4
|
como está escrito en el libro de las palabras del profeta Isaías: Se oirá la voz de uno que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas;
|
Lc 4:22
|
Y todos le daban elogios y estaban pasmados de las palabras tan llenas de gracia, que salían de sus labios, y decían: ¿No es éste el hijo de José el carpintero?
|
Lc 6:47
|
Quiero mostraros a quién es semejante cualquiera que viene a mí, y escucha mis palabras y las practica:
|
Lc 6:49
|
Pero aquel que escucha mis palabras, y no las practica, es semejante a un hombre que construyó su casa sobre tierra sin poner cimiento, contra la cual descargó su ímpetu el río; y luego cayó, y fue grande la ruina de aquella casa.
|
Lc 9:26
|
Porque quien se avergonzare de mí y de mis palabras, de ése se avergonzará el Hijo del hombre, cuando venga en su majestad, y en la de su Padre, y de los santos ángeles.
|
Lc 9:28
|
Sucedió, pues, que cerca de ocho días después de dichas estas palabras, tomó consigo a Pedro, y a Santiago, y a Juan, y subió a un monte a orar.
|
Lc 9:45
|
Pero ellos no entendieron este lenguaje, y les era tan oscuro el sentido de estas palabras, que nada comprendieron, ni tuvieron valor para preguntarle sobre lo dicho.
|
Lc 13:17
|
Y a estas palabras quedaron avergonzados todos sus contrarios; y todo el pueblo se complacía en sus gloriosas acciones.
|
Lc 18:15
|
Y le traían también algunos niños para que los tocase. Lo cual viendo los discípulos, lo impedían con ásperas palabras.
|
Lc 18:34
|
Pero ellos ninguna de estas cosas comprendieron; antes era éste un lenguaje desconocido para ellos, ni entendían el significado de las palabras dichas.
|
Lc 21:15
|
Pues yo pondré las palabras en vuestra boca, y una sabiduría a que no podrán resistir, ni contradecir todos vuestros enemigos.
|
Lc 21:33
|
El cielo y la tierra se mudarán, pero mis palabras no faltarán.
|
Lc 24:8
|
Ellas, en efecto, se acordaron de las palabras de Jesús .
|
Lc 24:19
|
Replicó él: ¿Qué? Lo de Jesús Nazareno, respondieron, el cual fue un profeta, poderoso en obras y en palabras, a los ojos de Dios y de todo el pueblo;
|
Jn 2:22
|
Así, cuando hubo resucitado de entre los muertos, sus discípulos hicieron memoria de que lo dijo por esto, y creyeron, con más viva fe, a la Escritura y a las palabras de Jesús .
|
Jn 3:34
|
Porque éste a quien Dios ha enviado, habla las mismas palabras que Dios; pues Dios no le ha dado su Espíritu con medida.
|
Jn 4:39
|
El hecho fue que muchos samaritanos de aquella ciudad creyeron en él, por las palabras de la mujer, que aseguraba: Me ha dicho todo cuanto yo hice.
|
Jn 6:63
|
El espíritu es quien da la vida; la carne o el sentido carnal de nada sirve para entender este misterio; las palabras que yo os he dicho, espíritu y vida son.
|
Jn 6:68
|
Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
|
Jn 7:36
|
¿Qué es lo que ha querido decir con estas palabras: Me buscaréis, y no me hallaréis; y a donde yo voy a estar, no podéis venir vosotros?
|
Jn 8:47
|
Quien es de Dios escucha las palabras de Dios. Por eso vosotros no las escucháis, porque no sois de Dios.
|
Jn 8:55
|
Vosotros no le habéis conocido; yo sí que le conozco: y si dijere que no le conozco, sería como vosotros un mentiroso. Pero le conozco bien, y observo sus palabras.
|
Jn 10:21
|
Otros decían: No son palabras éstas de quien está endemoniado, ¿por ventura puede el demonio abrir los ojos de los ciegos?
|
Jn 12:38
|
De suerte que vinieron a cumplirse las palabras que dijo el profeta Isaías: ¡Oh Señor! ¿quién ha creído lo que oyó de nosotros? ¿Y de quién ha sido conocido el brazo del Señor?
|
Jn 12:47
|
Que si alguno oye mis palabras, y no las observa, yo no le doy la sentencia, pues no he venido ahora a juzgar al mundo, sino a salvarlo.
|
Jn 12:48
|
Quien me menosprecia, y no recibe mis palabras, ya tiene juez que le juzgue; la palabra que yo he predicado, ésa será la que le juzgue el último día;
|
Jn 14:10
|
¿No creéis que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo de mí mismo. El Padre que está en mí, él mismo hace conmigo las obras que yo hago.
|
Jn 15:7
|
Al contrario, si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pediréis lo que quisiereis, y se os otorgará.
|