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Isa 21:1
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Duro anuncio contra el desierto del mar. De un desierto, de una tierra horrible viene el enemigo, como vienen del abrego los torbellinos.
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Isa 23:1
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Duro anuncio contra Tiro. Prorrumpid en aullidos naves del mar; porque desolada ha sido la casa, o ciudad, de donde acostumbraban hacerse a la vela. De la tierra de Cetim les ha venido el aviso.
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Isa 23:2
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Callad vosotros ¡oh habitantes de la isla!; tú estabas llena de comerciantes de Sidón que pasaban el mar.
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Isa 23:4
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Avergüénzate, ¡oh Sidón!, pues así habla esta ciudad del mar, la señora del mar: Tú que dices: No concebí, ni parí, y no crié mancebos, ni eduqué doncellas hasta la edad florida.
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Isa 23:4
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Avergüénzate, ¡oh Sidón!, pues así habla esta ciudad del mar, la señora del mar: Tú que dices: No concebí, ni parí, y no crié mancebos, ni eduqué doncellas hasta la edad florida.
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Isa 23:8
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¿Quién es el que tales cosas decretó contra Tiro, la cual en otro tiempo era la reina del mar, cuyos comerciantes eran príncipes, y sus mercaderes los más ilustres de la tierra?
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Isa 23:10
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Atraviesa corriendo tu tierra como un río, ¡oh tú, hija del mar!: Ya no tienes más ceñidor o amparo.
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Isa 23:11
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El Señor ha extendido su mano contra el mar, ha conmovido los reinos; él ha dado sus órdenes contra Canaán, para exterminar a sus campeones.
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Isa 23:14
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Aullad, ¡oh naves del mar!, porque destruida ha sido vuestra fortaleza.
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Isa 24:14
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Estos restos de Israel levantarán su voz, y entonarán alabanzas: Mostrarán su júbilo desde el mar, luego que fuere el Señor glorificado.
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Isa 24:15
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Por tanto, glorificad al Señor con la ilustración de la doctrina de la salud: Anunciad el Nombre del Señor Dios de Israel en las islas del mar o remotas regiones.
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Isa 27:1
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Aquel día el Señor con su espada cortante, y grande, y fuerte, tomará cuentas a Leviatán, serpiente gruesa; a Leviatán, serpiente tortuosa; y matará la ballena, que está en el mar de este mundo.
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Isa 43:16
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Esto dice el Señor que abrió camino en el mar, y senda en medio de corrientes impetuosas.
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Isa 48:18
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¡Ojalá hubieras atendido a mis mandamientos; hubieras sido tú paz o felicidad como un río, y tu justicia o santidad tan copiosa como los abismos del mar,
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Isa 49:12
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Mira cómo vienen unos de remotos países, y otros desde el septentrión, y desde el mar u occidente, y estos otros de las regiones del mediodía.
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Isa 50:2
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Porque yo vine al mundo, y no hubo nadie que me recibiese; llamé y no hubo quien me escuchase. ¿Es por ventura que se ha acortado o achicado mi mano, de suerte que no pueda redimir? ¿O no tengo yo poder para libertaros? Sabed que a una amenaza mía haré del mar un desierto, y secaré los ríos; se pudrirán los peces por falta de agua, y morirán en seco.
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Isa 51:10
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¿No eres tú el que secaste el mar, las aguas de tempestuoso abismo; el que abriste camino en el profundo mar, para que pasaran los que habías libertado?
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Isa 51:10
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¿No eres tú el que secaste el mar, las aguas de tempestuoso abismo; el que abriste camino en el profundo mar, para que pasaran los que habías libertado?
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Isa 51:15
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En fin, yo soy el Señor Dios tuyo que embravezco el mar, y encrespo sus olas. Señor de los ejércitos es mi nombre.
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Isa 57:20
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Pero los impíos son como un mar alborotado, que no puede estar en calma; cuyas olas rebosan en lodo y cieno.
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Isa 60:5
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Entonces te verás en la abundancia; se asombrará tu corazón, y se ensanchará cuando vengan a unirse contigo naciones de la otra parte del mar; cuando a ti acudan poderosos pueblos.
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Isa 60:9
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Sé, dice el Señor, que me están esperando con ansia las islas o naciones, y las naves del mar ya desde el principio , para que traiga de las remotas regiones a tus nuevos hijos, y con ellos su plata y su oro, que consagran al nombre del Señor Dios tuyo, y al Santo de Israel que te ha glorificado.
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Isa 63:11
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Pero luego se acordó de los tiempos antiguos; de Moisés y de su pueblo: ¿Dónde está, dijo, ahora aquel que los sacó del mar Rojo a ellos y a los que eran pastores de su grey? ¿Dónde está aquél que puso en medio de ellos el espíritu de su Santo?
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Isa 63:12
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¿Dónde el que puesto a la derecha de Moisés los sacó de Egipto con su majestuoso brazo; el que delante de ellos dividió las aguas del mar, con lo cual ganó un renombre sempiterno;
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Isa 66:19
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Y levantaré en medio de ellos una señal de salud; y de los que se salvaren, yo enviaré a las naciones de la otra parte del mar, al Africa, a la Lidia (que son pueblos flecheros) a Italia, a Grecia, a las islas más remotas, a gentes que jamás han oído hablar de mí, ni han visto mi gloria. Y estos enviados anunciarán a las naciones la gloria mía;
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Jer 5:22
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¿conque a mí no me temeréis, dice el Señor, ni os arrepentiréis delante de mí? Yo soy el que al mar le puse por término la arena, ley perdurable que no quebrantará; han de levantarse sus olas, y no traspasarán sus límites; y se encresparán, pero no pasarán más adelante.
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Jer 6:23
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Echará mano de las saetas, y del escudo; es cruel y no se apiadará de nadie; el ruido de sus tropas es como el ruido del mar, y montarán sobre caballos, dispuestos a combatir como valientes contra ti, ¡oh hija de Sión!
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Jer 15:8
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Yo he hecho más viudas entre ellos que arenas tiene el mar; he enviado contra ellos quien en el mismo mediodía les mate a las madres de sus hijos; he esparcido sobre las ciudades un repentino terror.
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Jer 25:22
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y a todos los reyes de Tiro, y a todos los reyes de Sidón, y a los reyes de las islas que están al otro lado del mar Mediterráneo,
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Jer 27:19
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Porque esto dice el Señor de los ejércitos acerca de las columnas, y del mar o concha de bronce, y de las basas, y de los otros vasos o muebles que han quedado en esta ciudad,
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Jer 31:35
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Esto dice el Señor, aquel Señor que envía el sol para dar luz al día, y ordena el curso de la luna y de los astros para esclarecer la noche; el que alborota el mar, y al instante braman sus olas; el que se llama Señor de los ejércitos.
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Jer 33:22
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Así como no pueden contarse las estrellas del cielo, ni numerarse las arenas del mar; así yo multiplicaré sin cuento los descendientes de mi siervo David y los levitas mis ministros.
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Jer 46:18
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Juro yo por vida mía (dice aquel rey que tiene por nombre Señor de los ejércitos), que así como el Tabor descuella entre los montes, y el Carmelo sobre el mar, así vendrá él.
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Jer 48:32
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Del modo que lloré por Jazer, así lloraré por ti, ¡oh viña de Sabama!; tus sarmientos pasaron a la otra parte del mar, llegaron hasta el mar de Jazer; el ladrón, el exterminador se arrojó sobre tu mies y sobre tu vendimia.
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Jer 48:32
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Del modo que lloré por Jazer, así lloraré por ti, ¡oh viña de Sabama!; tus sarmientos pasaron a la otra parte del mar, llegaron hasta el mar de Jazer; el ladrón, el exterminador se arrojó sobre tu mies y sobre tu vendimia.
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Jer 49:21
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Al rumor de su ruina se conmovió la tierra, hasta el mar Rojo llegaron sus voces y clamores.
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Jer 49:23
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Contra Damasco: Confundidas han sido Emat y Arfad; porque han oído una malísima nueva, se han turbado los de las islas del mar; su inquietud no la deja sosegar.
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Jer 50:42
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Asirán del arco y del escudo; son crueles y sin misericordia; sus voces serán como un mar que brama, y montarán sobre sus caballos, como un guerrero apercibido para combatir contra ti, ¡oh hija de Babilonia!
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Jer 51:36
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Por lo tanto esto dice el Señor: He aquí que yo tomaré por mi cuenta tu causa, y te vengaré de los agravios; yo dejaré sin agua su mar, y secaré sus manantiales.
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Jer 51:42
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Un mar ha inundado a Babilonia, y la cantidad de sus olas la ha ahogado.
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Jer 52:17
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Los caldeos hicieron también pedazos las columnas de bronce que estaban en el templo del Señor, y los pedestales, y el mar o concha de bronce que había en el templo del Señor; y se llevaron a Babilonia todo su cobre.
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Jer 52:20
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y las dos columnas, y el mar de bronce, y los doce becerros de bronce que estaban debajo de las basas, que había mandado hacer Salomón en el templo del Señor. Inmenso era el peso del metal de todos estos muebles.
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Lam 2:13
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¿Con quién te compararé, o a qué cosa te asemejaré, oh hija de Jerusalén ? ¿A quién te igualaré, a fin de consolarte, oh virgen hija de Sión? Porque grande es como el mar tu tribulación. ¿Quién podrá remediarte?
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Ezeq 1:16
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y las ruedas y la materia de ellas eran a la vista como del color del mar; y todas cuatro eran semejantes, y su forma y su estructura eran como de una rueda que está en medio de otra rueda.
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Ezeq 25:16
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por tanto, esto dice el Señor Dios: He aquí que yo descargaré mi mano sobre los filisteos, y mataré a los matadores, y exterminaré lo que queda en la costa del mar,
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Ezeq 26:3
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por tanto, esto dice el Señor Dios: ¡Oh Tiro!, heme aquí contra ti; yo haré subir contra ti muchas gentes, como olas del mar borrascoso.
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Ezeq 26:5
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Ella, en medio del mar, será como un tendedero para enjugar las redes; porque yo le he dicho, dice el Señor Dios, será ella hecha presa de las naciones.
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Ezeq 26:12
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Saquearán todos tus tesoros, pillarán tus mercaderías y destruirán tus muros, derribarán tus magníficos edificios, arrojando al mar tus piedras, tus maderas, y hasta tu polvo.
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Ezeq 26:16
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Y todos los príncipes del mar descenderán de sus tronos, y se despojarán de sus insignias, y arrojarán sus vestidos bordados, y su cubrirán de espanto; se sentarán en el suelo, y atónitos de tu repentina caída quedarán como fuera de sí.
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Ezeq 26:17
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Y deplorando tu desgracia, te dirán: ¡Cómo has perecido, oh habitadora del mar, ciudad esclarecida, que fuiste poderosa en el mar con tus moradores, a quienes temían todos!
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