Mt 4:18
|
Caminando un día Jesús por la ribera del mar de Galilea vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, echando la red en el mar (pues eran pescadores)
|
Mt 4:18
|
Caminando un día Jesús por la ribera del mar de Galilea vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, echando la red en el mar (pues eran pescadores)
|
Mt 8:24
|
y he aquí que se levantó una tempestad tan recia en el mar, que las ondas cubrían la barca; mas Jesús estaba durmiendo;
|
Mt 8:26
|
Y les dijo Jesús : ¿De qué teméis, oh hombres de poca fe? Entonces, puesto en pie, mandó a los vientos y al mar que se apaciguaran, y siguió una gran calma.
|
Mt 8:27
|
De lo cual asombrados todos los que estaban allí, se decían: ¿Quién es éste que los vientos y el mar obedecen?
|
Mt 8:32
|
Y él les dijo: Id. Y habiendo ellos salido, entraron en los cerdos, y he aquí que toda la piara corrió impetuosamente a despeñarse por un derrumbadero en el mar de Genezaret, y quedaron ahogados en las aguas.
|
Mt 13:1
|
Aquel día, saliendo Jesús de casa, fue y se sentó a la orilla del mar.
|
Mt 13:47
|
También es semejante el reino de los cielos a una red, que echada en el mar allega todo género de peces ;
|
Mt 14:13
|
Jesús , pues, habiendo oído aquello que Herodes decía de él, se retiró de allí por mar a un lugar desierto, fuera de poblado. Mas sabiéndolo las gentes, salieron de sus ciudades, siguiéndole a pie por tierra.
|
Mt 14:24
|
Entretanto la barca estaba en medio del mar, batida reciamente de las olas, por tener el viento contrario.
|
Mt 14:25
|
Cuando ya era la cuarta vela de la noche, vino Jesús hacia ellos caminado sobre el mar.
|
Mt 14:26
|
Y viéndole los discípulos caminar sobre el mar, se conturbaron y dijeron: Es un fantasma. Y llenos de miedo comenzaron a gritar.
|
Mt 15:29
|
De allí pasó Jesús a la ribera del mar de Galilea; y subiendo a un monte, se sentó en él.
|
Mt 17:26
|
Con todo eso, por no escandalizarlos, ve al mar y tira el anzuelo, y coge el primer pez que saliere, y abriéndole la boca hallarás una pieza de plata de cuatro dracmas; tómala y dásela por mí y por ti.
|
Mt 18:6
|
Mas quien escandalizare a uno de estos párvulos que creen en mí, mejor le sería que le colgasen del cuello una de esas piedras de molino que mueve un asno, y así fuese sumergido en el profundo del mar.
|
Mt 21:21
|
Y respondiendo Jesús , les dijo: En verdad os digo que si tenéis fe y no andáis vacilando, no solamente haréis esto de la higuera, sino que aun cuando digáis a ese monte: Arráncate y arrójate al mar, así lo hará;
|
Mt 23:15
|
¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, porque andáis girando por mar y tierra a trueque de convertir un gentil; y después de convertido, le hacéis con vuestro ejemplo y doctrina digno del infierno dos veces más que vosotros!
|
Mc 1:16
|
En esto, pasando por la ribera del mar de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, echando las redes al mar (pues eran pescadores);
|
Mc 1:16
|
En esto, pasando por la ribera del mar de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, echando las redes al mar (pues eran pescadores);
|
Mc 2:13
|
Otra vez salió hacia el mar, y todas las gentes se iban tras él, y las adoctrinaba.
|
Mc 3:7
|
Y Jesús con sus discípulos se retiró a la ribera del mar de Tiberíades, y le fue siguiendo mucha gente de Galilea y de Judea,
|
Mc 4:1
|
Otra vez se puso a enseñar cerca del mar; y acudió tanta gente, que le fue preciso subir en una barca, y sentarse en ella dentro del mar, estando toda la gente en tierra a la orilla.
|
Mc 4:1
|
Otra vez se puso a enseñar cerca del mar; y acudió tanta gente, que le fue preciso subir en una barca, y sentarse en ella dentro del mar, estando toda la gente en tierra a la orilla.
|
Mc 4:39
|
Y él, levantándose, amenazó al viento, y dijo al mar: Calla tú, sosiégate; y al instante calmó el viento y sobrevino una gran tranquilidad.
|
Mc 4:41
|
y quedaron sobrecogidos de gran espanto, diciéndose unos a otros: ¿Quién es éste a quien aun el viento y el mar prestan obediencia?
|
Mc 5:13
|
y Jesús se lo permitió al instante; y saliendo los espíritus inmundos, entraron en los cerdos; y con gran furia toda la piara, en que se contaban al pie de dos mil, corrió a precipitarse en el mar, en donde se anegaron todos.
|
Mc 5:21
|
Habiendo pasado Jesús otra vez con el barco a la orilla opuesta, concurrió mucha gente a su encuentro; y estando todavía en la ribera del mar,
|
Mc 6:47
|
Venida la noche, la barca estaba en medio del mar, y él solo en tierra,
|
Mc 6:48
|
desde donde viéndolos remar con gran fatiga (por cuanto el viento les era contrario), a eso de la cuarta vela de la noche vino hacia ellos caminando sobre el mar, e hizo ademán de pasar adelante.
|
Mc 6:49
|
Mas ellos, como le vieron caminar sobre el mar, pensaron que era algún fantasma, y levantaron el grito;
|
Mc 7:31
|
Dejando Jesús otra vez los confines de Tiro, se fue por los de Sidón hacia el mar de Galilea, atravesando el territorio de Decápolis;
|
Mc 9:41
|
Y al contrario, al que escandalizare a alguno de estos pequeñitos que creen en mí, mucho mejor le fuera que le ataran al cuello una de esas ruedas de molino que mueve un asno, y lo echaran al mar.
|
Mc 11:23
|
En verdad os digo, que cualquiera que dijere a este monte: Quítate de ahí, y échate al mar, no vacilando en su corazón, sino creyendo que cuanto dijere se ha de hacer, así se hará.
|
Lc 5:4
|
Acabada la plática, dijo a Simón: Guíad mar adentro, y echad vuestras redes para pescar.
|
Lc 8:25
|
Entonces les dijo: ¿Dónde está vuestra fe? Mas ellos llenos de temor se decían con asombro unos a otros: ¿Quién diremos que es éste, que así da órdenes a los vientos y al mar, y le obedecen?
|
Lc 17:2
|
Menos mal sería para él que le echasen al cuello una rueda de molino, y le arrojasen al mar; que no que él escandalizara a uno de estos pequeños.
|
Lc 17:6
|
Y el Señor les dijo: Si tuviereis fe tan grande como un granito de mostaza, diréis a ese moral: Arráncate de raíz, y trasplántate en el mar, y os obedecerá.
|
Lc 21:25
|
Se verán fenómenos prodigiosos en el sol, la luna y las estrellas, y en la tierra estarán consternadas y atónitas las gentes por el estruendo del mar y de las olas,
|
Jn 6:1
|
Después de esto pasó Jesús al otro lado del mar de Galilea, que es el lago de Tiberíades.
|
Jn 6:16
|
Siendo ya tarde, sus discípulos bajaron a la orilla del mar.
|
Jn 6:17
|
Y habiendo entrado en un barco, iban atravesando el mar hacia Cafarnaúm; era ya noche cerrada, y Jesús no se había juntado todavía con ellos.
|
Jn 6:18
|
Entretanto el mar, soplando un viento muy recio, se hinchaba.
|
Jn 6:22
|
Al día siguiente, aquel gentío que se había quedado en la otra parte del mar, advirtió entonces que allí no había más de una barca, y que Jesús no se había metido en ella con sus discípulos, sino que éstos habían marchado solos.
|
Jn 21:1
|
Después de esto Jesús se apareció otra vez a los discípulos a la orilla del mar de Tiberíades; y fue de esta manera:
|
Jn 21:7
|
Entonces el discípulo aquel que Jesús amaba, dijo a Pedro: Es el Señor. Simón Pedro apenas oyó: Es el Señor, se vistió la túnica (pues estaba desnudo, o en paños menores) y se echó al mar.
|
Hech 4:24
|
Ellos al oírlo, levantaron todos unánimes la voz a Dios, y dijeron: ¡Señor!, tú eres el que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo cuanto en ellos se contiene;
|
Hech 10:6
|
el cual está hospedado en casa de otro Simón curtidor, cuya casa está cerca del mar: éste te dirá lo que te conviene hacer.
|
Hech 10:32
|
Envía, pues, a Jope, y haz venir a Simón, por sobrenombre Pedro, el cual está hospedado en casa de Simón el curtidor, cerca del mar.
|
Hech 14:15
|
y diciendo: Hombres, ¿qué es lo que hacéis? También somos nosotros, de la misma manera que vosotros, hombres mortales que venimos a predicaros que, dejadas esas vanas deidades, os convirtáis al Dios vivo, que ha creado el cielo, la tierra, el mar y todo cuanto en ellos se contiene.
|
Hech 17:14
|
Entonces los hermanos dispusieron inmediatamente que Pablo se retirase hacia el mar, quedando Silas y Timoteo en Berea.
|