Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Oh

Tob 8:7 Y dijo Tobías: Oh Señor Dios de nuestros padres, bendígante los cielos, y la tierra, y el mar, y las fuentes, y los ríos, y todas tus criaturas que hay en ellos.
Tob 13:11 Oh Jerusalén , ciudad de Dios, el Señor te ha castigado por causa de tus malas obras.
Tob 13:19 Oh alma mía, bendice al Señor; porque el Señor Dios nuestro ha librado a su ciudad de Jerusalén de todas sus tribulaciones.
Jud 9:17 Oh Dios de los cielos, creador de las aguas y Señor de todas las criaturas, oye benigno a esta miserable que recurre a ti, y lo espera todo de tu misericordia.
Jud 16:16 Oh Adonai, Señor mío, tú eres el grande y el muy glorioso por tu poder, y nadie puede sobrepujarte.
Est 14:3 Y hacía oración al Señor Dios de Israel, diciendo: Oh Señor mío, tú eres el único rey nuestro, socórreme en el desamparo en que me hallo, pues no tengo otro protector fuera de ti.
Est 14:19 Oh Dios poderoso sobre todos, escucha las voces de aquellos que no tienen otra esperanza sino en ti, y sálvanos de las manos de los malvados, y líbrame a mí de mis temores."
Job 14:13 ¡Oh quién me diera que me guarecieses y escondieses en el sepulcro hasta que pase tu furor, y me señalases el plazo en que te has de acordar de mí!
Job 16:18 ¡Oh tierra!, no cubras mi sangre, ni sofoques en tu seno mis clamores.
Job 18:4 Oh tú que te quitas la vida por tu furor, ¿piensas que por ti quedará abandonada la tierra, y serán los peñascos trasladados de su sitio?
Job 19:23 ¡Oh! ¿Quién me diera que las palabras que voy a proferir se quedasen escritas? ¿Quién me diera que se imprimiesen en libro o tablilla,
Job 21:17 ¡Oh, cuán a menudo se apaga de un golpe la antorcha o prosperidad de los impíos, y viene sobre ellos un diluvio de males y Dios en el furor de su ira les reparte buena porción de dolores!
Job 23:3 ¡Oh, quién me diera saber cómo encontrar a Dios, y poder llegar hasta su trono!
Job 31:35 ¡Oh, quién me diera uno que desapasionadamente me oyese y que el Todopoderoso otorgase mi petición, y escribiese el proceso el mismo que juzga,
Job 36:26 ¡Oh, y cuán grande es Dios, y cuánto sobrepuja a nuestra ciencia! Incontable es el número de sus años.
Salm 4:3 ¡Oh, hijos de los hombres!, ¿hasta cuándo seréis de estúpido corazón?; ¿por qué amáis la vanidad y vais en pos de la mentira?
Salm 4:10 Porque tú, ¡Oh Señor!, sólo tú has asegurado mi esperanza.
Salm 8:2 Oh Señor, soberano dueño nuestro, ¡cuán admirable es tu santo Nombre en toda la tierra! Porque tu majestad se ve ensalzada sobre los cielos.
Salm 8:10 ¡Oh Señor, soberano dueño nuestro, ¡y cuán admirable es tu Nombre en toda la redondez de la tierra!
Salm 11:8 ¡Oh Señor!, tú nos salvarás, y nos defenderás siempre de esta raza de gentes.
Salm 13:7 ¡Oh, quién enviará de Sión la salud o el salvador de Israel! Cuando el Señor pusiere fin a la cautividad de su pueblo, saltará de gozo Jacob , y se regocijará Israel.
Salm 18:15 Con lo que te serán gratas las palabras o cánticos de mi boca, como también la meditación de mi corazón que haré yo siempre en tu acatamiento. ¡Oh Señor, amparo mío y redentor mío!
Salm 19:10 ¡Oh Señor!, salva al rey, y óyenos el día en que te invocaremos.
Salm 20:2 Oh, Señor, en tu gran poder hallará el rey su alegría, y saltará de extremado gozo por la salvación que le has enviado.
Salm 21:2 ¡Oh Dios!, ¡oh Dios mío, vuelve a mí tus ojos! ¿Por qué me has desamparado? Los gritos de los pecados míos alejan de mí la salud.
Salm 21:24 Oh, vosotros que teméis al Señor, alabadle; glorificadle vosotros, descendientes todos de Jacob .
Salm 24:22 ¡Oh Dios mío!, libra a Israel de todas sus tribulaciones.
Salm 25:1 Para el fin: Salmo de David. ¡Oh Señor!, sé tú mi juez, puesto que yo he procedido según mi inocencia; y esperando en el Señor no vacilaré.
Salm 25:12 Mis pies se han dirigido siempre por el camino de la rectitud. ¡Oh Señor!, yo cantaré tus alabanzas en las reuniones de tu pueblo.
Salm 26:8 Contigo ha hablado mi corazón; en busca de ti han andado mis ojos. ¡Oh, Señor! tu cara es la que yo busco.
Salm 29:3 ¡Oh Señor Dios mío!, yo clamé a ti, y me diste la salud.
Salm 29:5 ¡Oh vosotros santos del Señor!, cantadle himnos, y celebrad su memoria sacrosanta.
Salm 29:8 ¡Oh Señor!, tu buena voluntad es la que ha dado consistencia a mi floreciente estado. Apartaste de mí tu rostro, y al instante fui trastornado.
Salm 29:13 a fin de que sea mi gloria el cantar tus alabanzas, y nunca tenga yo penas. ¡Oh Señor Dios mío!, yo te alabaré eternamente.
Salm 30:2 Oh Señor, en ti tengo puesta mi esperanza; no quede yo para siempre confundido; sálvame, pues eres justo.
Salm 30:18 ¡Oh Señor!, no quede yo confundido ya que te he invocado. Queden, sí, avergonzados los impíos, y sean derribados al profundo.
Salm 30:20 ¡Oh, cuán grande es, Señor, la dulzura que tienes reservada para los que te temen! Tú la has comunicado abundantemente, a vista de los hijos de los hombres, a aquellos que tienen puesta en ti su esperanza.
Salm 34:10 De todas las coyunturas de mis huesos saldrán voces que digan: ¡Oh Señor!, ¿quién hay semejante a ti, que libras al desvalido de las manos de los que pueden más que él, al necesitado y al pobre de los que lo despojan?
Salm 34:17 ¡Oh Señor!, ¿cuándo volverás tus ojos? Libra mi alma de la malignidad de estos hombres, libra de estos leones al alma mía.
Salm 34:22 ¡Oh, Señor!, tú lo has visto, no guardes más tiempo silencio. Señor, no te alejes de mí.
Salm 35:6 ¡Oh Señor!, llega hasta el cielo tu misericordia, y hasta las nubes tu verdad.
Salm 35:8 ¡Oh, cuánto has multiplicado, oh Dios, tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres esperarán bajo las sombras de tus alas.
Salm 37:2 Oh Señor, no me reprendas en medio de tu saña; ni en medio de tu cólera me castigues.
Salm 37:10 Oh Señor, bien ves todos mis deseos, y no se te ocultan mis gemidos.
Salm 39:14 ¡Oh! Dígnate, Señor, librarme; vuelve hacia mí tus ojos para socorrerme.
Salm 44:3 ¡Oh tú el más gentil en hermosura entre los hijos de los hombres!, derramada se ve la gracia en tus labios; por eso te bendijo Dios para siempre.
Salm 50:17 ¡Oh Señor!, tú abrirás mis labios; y publicará mi boca tus alabanzas.
Salm 52:7 ¡Oh! ¿Quién enviará de Sión al salvador de Israel? Cuando Dios ponga fin al cautiverio de su pueblo, se regocijará Jacob , y saltará de gozo Israel.
Salm 54:7 Por esta razón he dicho: ¡Oh, quién me diera alas como a la paloma para echar a volar, y hallar reposo!
Salm 55:9 ¡Oh Dios!, te he expuesto cuál es la situación de mi vida; tú tienes presentes ante tus ojos mis lágrimas, conforme a tu promesa.