Hech 19:32
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Por lo demás unos gritaban una cosa y otros otra; porque todo el concurso era un tumulto, y la mayor parte de ellos no sabían a qué se habían juntado.
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Hech 20:20
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cómo nada de cuanto os era provechoso, he omitido de anunciároslo y enseñároslo en público y por las casas,
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Hech 21:8
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Partiendo al siguiente, llegamos a Cesarea. Y entrando en casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete diáconos, nos hospedamos en ella.
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Hech 21:29
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Y era que habían visto andar con él por la ciudad a Trófimo de Efeso, al cual se imaginaron que Pablo le había llevado consigo al templo.
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Hech 21:33
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Entonces llegando el tribuno le prendió, y le mandó asegurar con dos cadenas, y preguntaba quién era, y qué había hecho.
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Hech 22:19
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Señor, respondí yo, ellos saben que yo era el que andaba por las sinagogas, metiendo en la cárcel y maltratando a los que creían en ti;
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Hech 22:29
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Al punto se apartaron de él los que iban a darle el tormento. Y el mismo tribuno entró en temor después que supo que era ciudadano romano, y que le había hecho atar.
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Hech 23:27
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A ese hombre preso por los judíos, y a punto de ser muerto por ellos, acudiendo con la tropa le libré, noticioso de que era ciudadano romano;
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Hech 23:34
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Luego que leyó la carta, le preguntó de qué provincia era, y oído que de Cilicia, dijo:
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Hech 24:24
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Algunos días después volviendo Félix a Cesarea, y trayendo a su mujer Drusila, la cual era judía, llamó a Pablo, y le oyó explicar la fe de Jesucristo.
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Hech 27:20
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Entretanto, había muchos días que no se dejaban ver ni el sol, ni las estrellas, y la borrasca era continuamente tan furiosa, que ya habíamos perdido todas las esperanzas de salvarnos.
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Hech 27:39
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Siendo ya día claro, no reconocían qué tierra era la que descubrían; echaban sí de ver cierta ensenada que tenía playa, donde pensaban arrimar la nave, si pudiesen.
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Hech 28:6
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Los bárbaros, al contrario, se persuadían a que se hincharía, y de repente caería muerto. Mas después de aguardar largo rato, reparando que ningún mal le acontecía, cambiando de opinión, decían que era un dios.
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Rom 4:11
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Y así él recibió la marca o divisa de la circuncisión, como un sello, o señal de la justicia que había adquirido por la fe, cuando era aún incircunciso; para que fuese padre de todos los que creen sin estar circuncidados, a quienes se les imputase también la fe por justicia;
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Rom 8:3
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Pues lo que era imposible que la ley hiciese, estando como estaba debilitada por la carne, lo hizo Dios cuando habiendo enviado a su Hijo revestido de una carne semejante a la del pecado, y héchole víctima por el pecado, mató así al pecado en la carne,
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Rom 9:25
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conforme a lo que dice por Oseas: Llamaré pueblo mío al que no era mi pueblo; y amado, al que no era amado; y objeto de misericordia, al que no había conseguido misericordia.
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Rom 9:25
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conforme a lo que dice por Oseas: Llamaré pueblo mío al que no era mi pueblo; y amado, al que no era amado; y objeto de misericordia, al que no había conseguido misericordia.
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Rom 15:20
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Por lo demás, al cumplir con mi ministerio, he tenido cuidado de no predicar la buena nueva en los lugares en que era ya conocido el nombre de Cristo , por no edificar sobre fundamento de otro, verificando de esta manera lo que dice la Escritura:
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I Cor 5:10
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Claro está que no entiendo decir con los deshonestos de este mundo, o con los avarientos o con los que viven de rapiña, o con los idólatras; de otra suerte era necesario que os salieseis de este mundo.
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I Cor 10:4
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y todos bebieron la misma bebida espiritual (porque ellos bebían del agua que salía de la misteriosa piedra, y los iba siguiendo, la cual piedra era figura de Cristo );
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I Cor 13:11
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Así cuando yo era niño, hablaba como niño, juzgaba como niño, discurría como niño. Pero cuando fui ya hombre hecho, dejé mano a las cosas de niño.
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II Cor 3:7
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Que si el ministerio de aquella ley de muerte, grabada con letras sobre dos piedras, fue tan glorioso que no podían los hijos de Israel fijar la vista en el rostro de Moisés por el resplandor de su cara, resplandor que no era duradero,
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II Cor 3:9
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Porque si el ministerio de la ley antigua, no obstante que era ocasión de condenación, fue acompañado de tanta gloria, mucho más glorioso es el ministerio o publicación de la ley de la justicia.
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II Cor 5:17
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Por tanto, si alguno está en Cristo ya es una criatura nueva, se acabo lo que era viejo, y todo viene a ser nuevo; pues que todo ha sido renovado.
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II Cor 5:19
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Porque Dios era el que reconciliaba consigo al mundo en Jesucristo, no imputándoles a ellos sus delitos, y él es el que nos ha encargado a nosotros predicar la reconciliación.
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Gál 4:13
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al contrario, bien sabéis que cuando hace tiempo os prediqué la buena nueva, lo hice entre las persecuciones y aflicciones de la carne, y en tal estado de mi carne o de humillación mía, que os era materia de tentación,
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Gál 4:22
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Porque escrito está que Abrahán tuvo dos hijos, uno de la esclava Agar, y otro de la libre, que era Sara.
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Col 2:14
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y cancelada la cédula del decreto firmado contra nosotros, que nos era contrario, la quitó de en medio, enclavándola en la cruz.
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Heb 2:10
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Por cuanto era cosa digna que aquel Dios para quien y por quien son todas las cosas, habiendo de conducir a muchos hijos adoptivos a la gloria, consumase o inmolase por medio de la pasión y muerte al autor y modelo de la salvación de los mismos, Jesucristo Señor nuestro.
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Heb 5:8
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Y cierto que aunque era Hijo de Dios, aprendió como hombre, por las cosas que padeció, a obedecer.
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Heb 7:2
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a quien así mismo dio Abrahán el diezmo de todos los despojos que había recogido, cuyo nombre en primer lugar significa rey de justicia; además de eso era rey de Salem, que quiere decir rey de paz,
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Heb 9:9
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Todo lo cual era figura de lo que pasa ahora, y pasaba en aquel tiempo en los dones y sacrificios que se ofrecían, los cuales no podían purificar la conciencia de los que tributaban a Dios este culto, pues no consistía sino en viandas, y bebidas,
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Heb 9:24
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Porque no entró Jesús en el santuario hecho de mano de hombre, que era figura del verdadero; sino que entró en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros en el acatamiento de Dios;
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Heb 11:3
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La fe es la que nos enseña que el mundo todo fue hecho por la palabra de Dios; y que de invisible que era fue hecho visible.
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Heb 11:26
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juzgando que el oprobio de Jesucristo era un tesoro más grande que todas las riquezas de Egipto; porque fijaba su vista en la recompensa.
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Heb 11:31
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Por la fe Rahab, que era, o había sido, una ramera no pereció con los demás ciudadanos incrédulos, dando en su posada acogida segura a los exploradores que envió Josué.
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Heb 11:38
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de los cuales el mundo no era digno, yendo perdidos por las soledades, por los montes, y recogiéndose en las cuevas y en las cavernas de la tierra.
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Heb 12:21
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Y era tan espantoso lo que se veía, que dijo Moisés: Despavorido estoy y temblando.
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Sant 5:17
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Elías era un hombre pasible semejante a nosotros, y pidió fervorosamente que no lloviese sobre la tierra de Israel, y no llovió por espacio de tres años y seis meses.
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I Ped 3:6
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Al modo que Sara era obediente a Abrahán, a quien llamaba su señor. De ella sois hijas vosotras, si vivís bien y sin amedrentaros por ningún temor.
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I Ped 3:21
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Lo que era figura del bautismo de ahora, el cual de una manera semejante os salva a vosotros, no con quitar las manchas de la carne, sino justificando la conciencia para con Dios por la virtud de la resurrección de Jesucristo;
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I Jn 3:12
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No como Caín, el cual era hijo del maligno espíritu, y mató a su hermano. ¿Y por qué le mató? Porque sus obras eran malignas, y las de su hermano justas.
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Apoc 1:4
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Juan a las siete iglesias del Asia Menor. Gracia y paz a vosotros, de parte de aquel que es, y que era, y que ha de venir, y de parte de los siete espíritus, que asisten ante su trono,
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Apoc 1:8
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Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin de todas las cosas, dice el Señor Dios, que es, y que era, y que ha de venir, el Todopode-roso.
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Apoc 1:16
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Y tenía en su mano derecha siete estrellas, y de su boca salía una espada de dos filos, y su rostro era resplandeciente como el sol de mediodía.
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Apoc 4:3
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Y el que estaba sentado era parecido a una piedra de jaspe y de sardio o granate; y en torno del solio un arco iris, de color de esmeralda;
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Apoc 4:8
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Cada uno de los cuatro animales tenía seis alas, y por fuera de las alas y por dentro, estaban llenos de ojos, y no reposaban de día ni de noche, diciendo: Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios todopoderoso, el cual era, el cual es, y el cual ha de venir.
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Apoc 5:11
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Vi también y oí la voz de muchos ángeles alrededor del solio, y de los animales, y de los ancianos, y su número era millares de millares,
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Apoc 9:9
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Vestían también corazas como de hierro, y el ruido de sus alas era como el estruendo de los carros tirados de muchos caballos que van corriendo al combate.
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Apoc 9:16
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Y el número de las tropas de a caballo era de doscientos millones. Porque yo oí el número de ellas.
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