Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

dice

Jer 3:1 Comúnmente se dice: Si un marido repudia a su mujer, y ella separada de éste toma otro marido, ¿acaso volverá jamás a recibirla? ¿No quedará la tal mujer inmunda y contaminada? Tú, es cierto, que has pecado con muchos amantes. Esto no obstante vuélvete a mí, dice el Señor, que yo te recibiré.
Jer 3:10 Y después de todas estas cosas no se convirtió a mí, dice el Señor, su hermana, la prevaricadora Judá, con todo su corazón, sino fingidamente.
Jer 3:12 Anda y repite en alta voz estas palabras hacia el septentrión, y di: Conviértete, ¡oh tú, rebelde Israel!, dice el Señor; que no torceré yo mi rostro para no mirarte; pues yo soy santo y benigno, dice el Señor, y no conservaré siempre mi enojo.
Jer 3:12 Anda y repite en alta voz estas palabras hacia el septentrión, y di: Conviértete, ¡oh tú, rebelde Israel!, dice el Señor; que no torceré yo mi rostro para no mirarte; pues yo soy santo y benigno, dice el Señor, y no conservaré siempre mi enojo.
Jer 3:13 Reconoce, tu infidelidad; pues has prevaricado contra el Señor Dios tuyo, y te prostituiste a los dioses extraños debajo de todo árbol frondoso, y no escuchaste mi voz, dice el Señor.
Jer 3:14 Convertíos a mí, ¡oh hijos rebeldes!, dice el Señor, porque yo soy vuestro esposo, y escogeré de vosotros uno de cada ciudad y dos de cada familia, y os introduciré en Sión.
Jer 3:16 Y cuando os hayáis multiplicado y crecido sobre la tierra, en aquellos días, dice el Señor, no se hablará ya del Arca del Testamento del Señor; ni se pensará en ella, ni habrá de ella memoria, ni será visitada, ni se hará ya nada de esto.
Jer 3:20 Pero como una mujer que desprecia al que la ama, así me ha desdeñado a mí la familia de Israel, dice el Señor.
Jer 4:1 ¡Oh Israel, si te has de convertir de tus extravíos, conviértete a mí de corazón, dice el Señor! Si quitas tus escándalos o ídolos de mi presencia, no serás removido de tu tierra.
Jer 4:3 Porque esto dice el Señor a los varones de Judá y de Jerusalén : Preparad surco barbecho, y no sembréis sobre espinas.
Jer 4:9 En aquel día, dice el Señor, desfallecerá el corazón del rey, y el corazón de los príncipes; estarán atónitos los sacerdotes, y consternados los profetas.
Jer 4:17 Se estarán día y noche alrededor de ella como los guardas en las heredades; porque me ha provocado a ira, dice el Señor.
Jer 4:22 El necio pueblo mío, dice el Señor, no me conoció, hijos insensatos son y mentecatos; para hacer el mal son sabios; mas el bien no saben hacerlo.
Jer 4:27 Pero he aquí lo que dice el Señor: Toda la tierra de Judá quedará desierta, mas no acabaré de arruinarla del todo.
Jer 4:31 Porque he oído gritos como de mujer que está de parto, ansias y congojas como de primeriza; la voz de la hija de Sión moribunda que extiende sus manos, y dice: ¡Ay de mí!, que me abandona mi alma al ver la mortandad de mis hijos.
Jer 5:9 Pues, ¿no he de castigar yo estas cosas, dice el Señor, y no se vengará mi alma de una tal gente?
Jer 5:11 puesto que la casa de Israel y la casa de Judá han pecado enormemente contra mí, dice el Señor;
Jer 5:14 Esto me dice el Señor Dios de los ejércitos: Porque habéis proferido vosotros tales palabras, he aquí, ¡oh Jeremías!, que yo desde ahora pongo en tu boca mis palabras cual fuego devorador, y le doy ese pueblo por leña para que sea de él consumido.
Jer 5:15 Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
Jer 5:18 Con todo eso, en aquellos días no acabaré del todo con vosotros, dice el Señor.
Jer 5:19 Que si dijereis: ¿Por qué ha hecho el Señor Dios nuestro contra nosotros todas estas cosas?, tú les responderás: Así como vosotros me habéis abandonado a mí, dice el Señor, y habéis servido a los dioses extraños en vuestra tierra, así les serviréis ahora en tierra extranjera.
Jer 5:22 ¿conque a mí no me temeréis, dice el Señor, ni os arrepentiréis delante de mí? Yo soy el que al mar le puse por término la arena, ley perdurable que no quebrantará; han de levantarse sus olas, y no traspasarán sus límites; y se encresparán, pero no pasarán más adelante.
Jer 5:29 ¿Cómo no he de castigar yo estas cosas, dice el Señor?; ¿o cómo puede mi alma dejar de tomar venganza de esta gente?
Jer 6:6 Pues esto dice el Señor de los ejércitos: Cortad sus árboles, abrid trincheras en torno de Jerusalén . Esta es la ciudad que voy a castigar; en ella se abriga toda especie de calumnia e injusticia.
Jer 6:9 Esto dice el Señor de los ejércitos: Los restos del pueblo de Israel serán cogidos como un pequeño racimo en una viña ya vendimiada: Vuelve, ¡oh caldeo!, tu mano, como el vendimiador para meter en el cuévano el rebusco.
Jer 6:12 Y sus casas pasarán a ser de otros, y también las heredades y las mujeres, porque yo extenderé mi mano contra los moradores del país, dice el Señor.
Jer 6:15 ¿Se han avergonzado acaso por las cosas abominables que han hecho? Antes bien no han tenido ni pizca de confusión, ni sabido siquiera qué cosa es tener vergüenza. Por este motivo caerán entre los que perecen y serán precipitados, dice el Señor, cuando llegue el tiempo de tomarles cuentas.
Jer 6:21 Por tanto así dice el Señor: He aquí que yo lloveré desgracias sobre ese pueblo; caerán a una los padres con los hijos, y el vecino perecerá con su vecino.
Jer 6:22 Esto dice el Señor: Mirad que viene un pueblo del septentrión, y una nación grande saldrá de los extremos de la tierra.
Jer 7:3 Esto dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: Enmendad vuestra conducta y vuestras aficiones, y yo habitaré con vosotros en este lugar.
Jer 7:11 Pues, ¿este templo mío en que se invoca mi Nombre, ha venido a ser para vosotros una guarida de ladrones? Yo, yo soy, yo mismo soy el que he visto vuestras abominaciones, dice el Señor.
Jer 7:13 Ahora bien, por cuanto habéis hecho todas estas fechorías, dice el Señor, y en vista de que yo os he predicado, y os he avisado con tiempo y exhortado, y vosotros no me habéis escuchado; y que os he llamado, y no me habéis respondido,
Jer 7:19 Pero, ¿es acaso a mí, dice el Señor, a quien irritan ellos, y perjudican? ¿No es más bien a sí mismos a quien hacen daño, cubriéndose así de ignominia?
Jer 7:20 Por tanto esto dice el Señor Dios: Ya mi furor y mi indignación está para descargar contra ese lugar que han profanado, contra los hombres y las bestias, contra los árboles de la campiña, y contra los frutos de la tierra, y todo arderá y no se apagará.
Jer 7:21 Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Añadid vuestros holocaustos a vuestras víctimas, y comed sus carnes;
Jer 7:30 Pues los hijos de Judá han obrado el mal ante mis ojos, dice el Señor, pusieron sus escándalos o ídolos en el templo en que se invoca mi Nombre, a fin de contaminarlo;
Jer 7:32 Por tanto, ya viene el tiempo, dice el Señor, y no se llamará más Tofet, ni Valle del hijo de Ennom; sino Valle de la Mortandad; y enterrarán en Tofet por falta de otro sitio.
Jer 8:1 En aquel tiempo, dice el Señor, arrojarán los caldeos fuera de los sepulcros los huesos de los reyes de Judá, y los huesos de sus príncipes, y los huesos de los sacerdotes, y los huesos de los profetas, y los huesos de los que habitaron en Jerusalén .
Jer 8:3 Y todos aquellos que restaren de esta perversa raza, en todos los lugares o sitios abandonados a donde yo los arroje, dice el Señor de los ejércitos, preferirán más morir que vivir en tantos trabajos.
Jer 8:4 Tú, les dirás: Esto dice el Señor: ¿Acaso aquel que cae, no cuida de levantarse luego? ¿Y no procura volver a la senda el que se ha descarriado de ella?
Jer 8:12 ¿Y están acaso corridos de haber hecho cosas abominables? Ni aun ligeramente han llegado a avergonzarse, ni saben qué cosa es tener vergüenza, por tanto serán envueltos en la ruina de los demás, y precipitados en el tiempo de la venganza, dice el Señor.
Jer 8:13 Pues yo los reuniré todos juntos para perderlos, dice el Señor, las viñas están sin uvas, y sin higos las higueras, hasta las hojas han caído; y las cosas que yo les diera, se les han escapado de las manos.
Jer 8:17 Porque he aquí que yo enviaré contra vosotros a los caldeos, como serpientes y viboras, contra los cuales no sirve ningún encantamiento y os morderán, dice el Señor.
Jer 9:3 Se sirven de su lengua como de un arco, para disparar mentiras, y no verdades; se han hecho poderosos en la tierra con pasar de un crimen a otro crimen; y a mí me han desconocido y despreciado, dice el Señor.
Jer 9:6 Tú, ¡oh Jeremías!, vives rodeado de engañadores; porque aman el dolo, rehúsan conocerme a mí, dice el Señor.
Jer 9:7 Por tanto, esto dice el Señor de los ejércitos: Sábete que yo los fundiré, y ensayaré al fuego. Porque, ¿qué otra cosa puedo hacer para convertir a los de la hija de mi pueblo?
Jer 9:9 Pues qué, ¿no he de tomarles yo cuentas sobre estas cosas?, dice el Señor. ¿O dejaré de tomar venganza de un pueblo como ése?
Jer 9:11 En fin, yo reduciré a Jerusalén , dice el Señor, a un montón de escombros, y a ser guarida de dragones, y a las ciudades de Judá las convertiré en despoblados, sin que en ellas quede un solo morador.
Jer 9:13 La causa es, dice el Señor, porque abandonaron la ley que yo les había dado, y no han escuchado mi voz, ni la han seguido;
Jer 9:15 Por tanto, esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que yo a este pueblo le daré para comida ajenjos, y para bebida agua de hiel.