ÁNTICO de los grados, ó gradual. Clamé al Señor en mi tribulación, y me atendió.
Libra ¡oh Señor! mi alma de los labios inicuos y de la lengua dolosa.
¿Qué se te dará, o qué fruto sacarás de tus calumnias, oh lengua fraudulenta?
El ser traspasada con agudas saetas, vibradas por una mano robusta, y ser arrojada en un fuego devorador.
¡Ay de mí, que mi destierro se ha prolongado! He habitado entre los moradores de Cedar.
Largo tiempo ha estado mi alma peregrinando.
Yo era pacífico con los que aborrecían la paz; pero ellos, así que les hablaba, se levantaban contra mí sin motivo alguno.
Padre
Hijo
Espíritu Santo
Ángeles
Satanás
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Referencia
Ilustración
Atlas