I Par 29:4
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tres mil talentos de oro de Ofir, y siete mil talentos de plata finísima para dorar o cubrir de oro las paredes del Templo.
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I Par 29:5
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De suerte que donde quiera que sea necesario, los artífices puedan hacer de oro lo que se haya de hacer de oro, y de plata lo que se haya de hacer de plata. Mas si alguno quiere hacer espontáneamente oferta, preséntela hoy por su mano, y ofrezca al Señor lo que gustare.
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I Par 29:5
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De suerte que donde quiera que sea necesario, los artífices puedan hacer de oro lo que se haya de hacer de oro, y de plata lo que se haya de hacer de plata. Mas si alguno quiere hacer espontáneamente oferta, preséntela hoy por su mano, y ofrezca al Señor lo que gustare.
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I Par 29:7
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y dieron para las obras de la casa de Dios cinco mil talentos de oro, y diez mil sueldos o monedas de oro, y diez mil talentos de plata, y dieciocho mil de cobre, con cien mil talentos de hierro.
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II Par 1:15
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E hizo el rey que la plata y el oro en Jerusalén fuese tan común como las piedras, y los cedros como las higueras silvestres que con tanta abundancia crecen en los campos.
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II Par 1:17
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Un tiro de cuatro caballos en seiscientos siclos de plata, y un caballo en ciento cincuenta; y del mismo modo se hacían semejantes compras en todos los reinos de los heteos y de los reyes de Siria.
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II Par 2:7
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Envíame, pues, un hombre inteligente, diestro en trabajar el oro, y la plata, y el bronce, y el hierro y la púrpura, y la escarlata, y el jacinto, y que sepa esculpir molduras, para que trabaje con estos artífices míos que he tomado de la Judea y de Jerusalén , escogidos por mi padre David.
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II Par 2:14
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hijo de una mujer de la tribu de Dan, de padre natural de Tiro, el cual sabe trabajar en oro, y en plata, en bronce, y en hierro, y en mármol, y en maderas, y asimismo en púrpura, y en jacinto, y en lino fino, y en escarlata, y que sabe igualmente hacer toda obra de entalladura, e inventar ingeniosamente cuanto es menester en todas labores, y estará en compañía de tus artífices, y con aquellos de mi señor David, tu padre.
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II Par 5:1
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Salomón , pues, hizo traer y guardar en los tesoros de la casa de Dios todo lo que su padre David había ofrecido: la plata y el oro y todos los vasos.
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II Par 9:14
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sin contar la suma con que solían contribuir los diputados de diferentes naciones, y los comerciantes, y todos los reyes de Arabia, y los sátrapas de las provincias, los cuales llevaban oro y plata a Salomón .
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II Par 9:20
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Asimismo toda la vajilla de la mesa del rey era de oro, y era también de oro finísimo la vajilla de la casa o palacio del Bosque del Líbano; porque la plata en aquel tiempo era reputada por nada.
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II Par 9:21
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Pues la flota del rey iba de tres en tres años a Tarsis con los siervos de Hiram, y traía de allí oro, y plata, y marfil, y monas, y pavos.
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II Par 9:24
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y le llevaban presentes todos los años, vasos de oro y de plata, ropas preciosas, y armas, y aromas, y caballos, y mulos.
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II Par 9:27
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e hizo abundar tanto la plata en Jerusalén como las piedras, y los cedros como las higueras silvestres que crecen en los cam-pos.
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II Par 15:18
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Entregó también al templo del Señor las cosas que su padre y él tenían ofrecidas con voto, el oro y la plata, y diferentes especies de vasos o utensilios.
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II Par 16:2
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Entonces sacó Asá la plata y el oro de los tesoros del templo del Señor y de los tesoros del rey; y se lo envió a Benadad, rey de Siria, que tenía su corte en Damasco, diciéndole:
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II Par 16:3
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Hay alianza entre yo y tú; al modo que la hubo entre mi padre y el tuyo; por tanto te remito ese oro y plata, para que, rompiendo el tratado que tienes hecho con Baasa, rey de Israel, le obligues a retirarse de mi país.
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II Par 21:3
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Y les dio su padre muchas sumas de oro y de plata, y preciosidades, y ciudades muy bien pertrechadas en Judá; pero el reino se lo entregó a Joram, por ser el primogénito.
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II Par 24:14
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Acabadas todas las obras, presentaron al rey y a Joíada el sobrante del dinero, del cual se hicieron los vasos para el servicio del templo y para los holocaustos, como las tazas y demás vasos de oro y de plata. Y mientras vivió Joíada se ofrecían continuamente holocaustos en la casa del Señor.
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II Par 25:6
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Tomó también a su sueldo cien mil valientes de Israel, por cien talentos de plata.
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II Par 25:24
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Y se llevó a Samaria todo el oro y la plata, y cuantos vasos halló en la casa de Dios, y en la habitación de Obededom, y en los tesoros de la casa real, y asimismo los hijos de los que estaban en rehenes.
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II Par 27:5
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Este hizo guerra al rey de los amonitas, a los cuales sujetó; por lo que le dieron por entonces los amonitas cien talentos de plata, diez mil coros o cargas de trigo, y otros tantos de cebada; esto mismo le dieron los amonitas el segundo y tercer año.
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II Par 32:27
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Como quiera, Ezequías fue muy rico y esclarecido, y juntó grandes tesoros de plata y oro, y piedras preciosas, y aromas, y todo género de armas y de alhajas de gran valor.
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II Par 34:17
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La plata encontrada en la casa del Señor se ha fundido, y se ha entregado a los capataces de los artífices y obreros de diferentes labores.
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II Par 36:3
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Porque el rey de Egipto, viniendo a Jerusalén lo depuso, y multó al país en cien talentos de plata y un talento de oro;
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I Esd 1:4
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Y todos los demás que se quedaren, dondequiera que habiten, ayúdenle desde el lugar de su residencia con plata y oro, y otras cosas, y con ganados, además de lo que voluntariamente ofrezcan al templo de Dios, que está en Jerusalén .
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I Esd 1:6
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Y todos aquellos que vivían en la comarca les ayudaron, poniendo en sus manos vasos de plata y oro, hacienda, ganados y alhajas, además de otras ofrendas voluntarias que habían hecho.
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I Esd 1:9
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He aquí el número de ellos: Treinta copas de oro, mil copas de plata, veintinueve cuchillos, treinta tazas de oro,
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I Esd 1:10
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cuatrocientas diez tazas de plata de segunda magnitud; y mil otros vasos.
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I Esd 1:11
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La suma de todos los vasos de oro y de plata ascendía a cinco mil cuatrocientos; todos éstos los llevó Sasabasar al tiempo que volvían a Jerusalén los que habían sido transportados cautivos a Babilonia.
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I Esd 2:69
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Dieron, según las facultades de cada uno, para los gastos de la construcción sesenta y un mil sueldos o monedas de oro, cinco mil marcos de plata, y cien vestiduras sacerdotales.
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I Esd 5:14
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Pues aun los vasos de oro y de plata del templo de Dios, que Nabucodonosor había quitado del templo de Jerusalén , y transportado al templo de Babilonia, los sacó el rey Ciro del templo de Babilonia, y fueron entregados a uno llamado Sasabasar o Zorobabel, a quien ade-más constituyó príncipe o gobernador de los judíos;
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I Esd 7:15
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y a llevar la plata y el oro, que así el rey como sus consejeros han ofrecido espontáneamente al Dios de Israel, cuyo tabernáculo está en Jerusalén ,
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I Esd 7:16
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Además toda la plata y oro que recogieres en la provincia de Babilonia de ofertas voluntarias del pueblo, y lo que espontáneamente ofrecieren los sacerdotes para la casa de su Dios que está en Jerusalén ,
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I Esd 7:18
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Y si a ti y tus hermanos les pareciere bien hacer alguna otra cosa del remanente de la plata y del oro, ejecutadlo conforme a la voluntad de Dios.
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I Esd 7:22
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hasta la cantidad de cien talentos de plata, y de cien coros de trigo, y de cien batos de vino, y otros tantos de aceite; mas la sal sin medida.
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I Esd 8:25
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y les entregué por peso el oro y la plata, y los vasos consagrados a la casa de nuestro Dios, ofrecidos por el rey, y sus consejeros, y magnates, y por todos los israelitas que se habían hallado allí.
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I Esd 8:26
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Y puse en sus manos seiscientos cincuenta talentos de plata, y cien vasos de plata, con cien talentos de oro;
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I Esd 8:26
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Y puse en sus manos seiscientos cincuenta talentos de plata, y cien vasos de plata, con cien talentos de oro;
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I Esd 8:28
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Y les dije: Vosotros sois santos o consagrados al Señor, y santos son los vasos, y la plata y el oro ofrecido espontáneamente al Señor Dios de nuestros padres.
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I Esd 8:30
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Recibieron, pues, los sacerdotes y levitas por peso la plata y el oro, y los vasos, para llevarlo a Jerusalén a la casa de nuestro Dios.
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I Esd 8:33
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Al cuarto día se hizo la entrega por peso del oro y de la plata y de los vasos en la casa de nuestro Dios, por mano de Meremot, hijo de Urías, sacerdote, estando presente Eleazar, hijo de Finees, en compañía de los levitas Jozabed, hijo de Josué y Noadaya, hijo de Bennoi.
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II Esd 7:71
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Y varios jefes de familias dieron para el tesoro de la obra veinte mil dracmas de oro y dos mil doscientas minas de plata.
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II Esd 7:72
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Lo que dio el resto del pueblo fueron veinte mil dracmas de oro, y dos mil minas de plata, y sesenta y siete túnicas sacerdotales.
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Tob 1:16
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Como, pues, hubiese llegado a Ragés, ciudad de la Media, y se hallase con diez talentos de plata, procedentes de los gajes y dádivas que había recibido del rey,
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Tob 4:21
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Te hago saber también, hijo mío, cómo presté, siendo tú aún niño, diez talentos de plata a Gabelo, residente en Ragés, ciudad de los medos, y conservo en mi poder el recibo firmado de su mano.
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Jud 2:10
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Y tomó también del erario del rey grandísimas sumas de oro y plata.
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Jud 15:14
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Pero todas las cosas que se conoció haber sido propias de Holofernes, así oro, como plata, y vestidos, y pedrería, y toda suerte de muebles, se las dieron a Judit; todo se lo entregó el pueblo.
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Est 1:6
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Se habían tendido por todas partes toldos de color azul celeste y blanco, y de jacinto o cárdeno, sostenido de cordones de finísimo lino, y de púrpura, que pasaban por sortijas de marfil, y se ataban a una columna de mármol. Estaban también dispuestos canapés o tarimas de oro y plata, sobre el pavimento enlosado de piedra, de color de esmeralda o de pórfido, y de mármol de Paros, formando varias figuras a lo mosaico, con admirable variedad.
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Job 3:15
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o con los príncipes que amontonan oro y llenan de plata sus casas;
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