|
Ezeq 40:10
|
Las cámaras de la puerta de oriente eran tres a un lado y tres al otro, una misma era la medida de las tres cámaras; e igual medida tenían las fachadas de ambas partes.
|
|
Ezeq 40:21
|
Y sus cámaras, tres a un lado y tres al otro; y su frontispicio y su vestíbulo eran según la medida de la primera puerta, de cincuenta codos de largo, y veinticinco codos de ancho.
|
|
Ezeq 40:22
|
Y sus ventanas, y el vestíbulo, y las entalladuras eran según la medida de la puerta que miraba al oriente; y para subir a ella había siete gradas, y delante de ella un zaguán.
|
|
Ezeq 40:24
|
Y me llevó a la parte del mediodía, en donde estaba la puerta que miraba al mediodía; y midió su fachada y su vestíbulo, que eran de las mismas medidas que las otras.
|
|
Ezeq 40:25
|
También sus ventanas y los zaguanes alrededor eran, como las otras ventanas, de cincuenta codos de largo y veinticinco de ancho.
|
|
Ezeq 41:11
|
Y las puertas de las cámaras eran para ir a la oración; una puerta al norte y otra al mediodí; y el lugar para la oración tenía de ancho cinco codos por todos lados.
|
|
Ezeq 41:22
|
La altura del altar de madera era de tres codos, y su longitud de dos codos, y sus ángulos, y su superficie y sus lados eran de madera. Y me dijo el ángel: He aquí la mesa que está delante del Señor.
|
|
Ezeq 41:24
|
Y en estas dos puertas había en una y en otra parte otras dos pequeñas puertas; las que se doblaban una sobre otra, pues dos eran las hojas de una y otra parte de las puertas.
|
|
Ezeq 41:25
|
Y en las dichas puertas del templo había entallados querubines y palmas; así como se veían también de relieve en las paredes; por cuya razón eran más gruesas las vigas en la frente del vestíbulo de afuera,
|
|
Ezeq 42:6
|
Porque había tres pisos, y aquellas cámaras no tenían columnas, como eran las columnas de los patios, por esto se levantaban de tierra cincuenta codos, comprendidas la estancia ínfima y la del medio.
|
|
Ezeq 42:12
|
Las cuales eran como las puertas de las cámaras que estaban al mediodía, tenían una puerta en la cabeza del pasadizo, y este pasadizo estaba delante del pórtico separado para quien venía del lado oriental.
|
|
Dan 1:20
|
Y en cualquier especie de conocimientos y ciencias sobre que los examinó el rey, halló que eran diez veces más sabios que cuantos adivinos y magos había en todo su reino.
|
|
Dan 7:9
|
Estaba yo observando, hasta tanto que se pusieron unas sillas; y el anciano de muchos días se sentó, eran sus vestiduras blancas como la nieve, y como lana limpia los cabellos de su cabeza; de llamas de fuego era su trono, y fuego encendido las ruedas de éste.
|
|
Dan 7:10
|
Salía de delante de él un impetuoso río de fuego; eran millares de millares los que le servían, y mil millones, o innumerables, los que asistían ante su presencia. Se sentó para juzgar, y fueron abiertos los libros, o procesos.
|
|
Dan 7:19
|
Quise en seguida informarme por menor de la cuarta bestia, que era tan diferente de todas las otras, y sobremanera horrorosa; cuyos dientes y uñas eran de hierro, y que comía y desmenuzaba, hollando con sus pies aquello que quedaba;
|
|
Dan 10:6
|
su cuerpo brillaba como el crisólito, y su rostro como un relámpago, y como dos ardientes antorchas así eran sus ojos; sus brazos y el resto del cuerpo hasta los pies era semejante al bronce reluciente; y el sonido de sus palabras como el ruido de un gran gentío.
|
|
Dan 13:3
|
porque sus padres, que eran virtuosos, instruyeron a su hija según la ley de Moisés.
|
|
Dan 13:5
|
Y en aquel año fueron elegidos jueces del pueblo de los judíos dos ancianos de aquellos de quienes dijo el Señor que la iniquidad había salido en Babilonia de los ancianos que eran jueces, los cuales parecía que gobernaban al pueblo.
|
|
Dan 13:41
|
Les dio crédito la asamblea, como ancianos que eran y jueces del pueblo; y la condenaron a muerte.
|
|
Amós 2:9
|
Pero yo fui el que exterminó delante de ellos a los amorreos, los cuales eran altos como los cedros, y fuertes como la encina; yo destruí sus frutos que salen sobre la tierra, y hasta las raíces que están debajo de ella.
|
|
Jon 3:3
|
Marchó, pues, Jonás , y se dirigió a Nínive, según la orden del Señor. Era Nínive una ciudad grandísima, eran necesarios tres días para recorrerla.
|
|
Nah 3:9
|
Su inmensa fortaleza eran Etiopía y Egipto, y tenía por auxiliares Africa y Libia.
|
|
Nah 3:16
|
Tus negociantes eran en mayor número que las estrellas del cielo; mas fueron como el pulgón, que habiéndose engordado voló a otra parte.
|
|
Sof 3:18
|
Yo reuniré a aquellos hombres vanos que habían abandonado la ley puesto que eran de los tuyos, a fin de que no padezcas más confusión a causa de ellos.
|
|
Zac 5:9
|
Y levanté mis ojos, y miré, y he aquí que venían dos mujeres, cuyas alas movía el viento, las cuales eran como alas de milano, y alzaron el ánfora en el aire.
|
|
Zac 6:1
|
Y de nuevo levanté mis ojos y observé: Y he aquí cuatro carrozas que salían de entre dos montes; y estos montes eran montes de bronce.
|
|
Zac 6:7
|
Y éstos, que eran los más vigorosos, así que salieron, anhelaban recorrer toda la tierra. Y el ángel les dijo: Id, recorred la tierra; y en efecto la anduvieron toda.
|
|
Zac 10:6
|
Y yo haré fuerte la casa de Judá, y salvaré la casa de José; y los haré volver de sus errores, pues que me apiadaré de ellos; y serán como eran antes que yo los desechase; puesto que yo soy el Señor Dios suyo, y los oiré benigno.
|
|
I Mac 1:63
|
Y las mujeres que circuncidaban a sus hijos eran despedazadas, conforme a lo mandado por el rey Antíoco,"
|
|
I Mac 2:42
|
Entonces vino a reunirse con ellos la congregación de los asideos, que eran hombres de los más valientes de Israel, y celosos todos de la ley;"
|
|
I Mac 3:7
|
Daba mucho que entender a varios reyes; sus acciones eran la alegría de Jacob , y será eternamente bendita su memoria.
|
|
I Mac 3:25
|
Con esto Judas y sus hermanos eran el terror de todas las naciones circunvecinas;
|
|
I Mac 3:38
|
En esto eligió Lisias a Tolomeo, hijo de Dorimino, a Nicanor y a Gorgias, que eran personas de gran valimiento entre los amigos del rey;"
|
|
I Mac 3:45
|
Se hallaba a esta sazón Jerusalén sin habitantes, de modo que parecía un desierto; no se veían ya entrar ni salir los naturales de ella, era hollado el santuario, los extranjeros eran dueños del alcázar, el cual servía de habitación a los gentiles: Desterrada estaba de la casa de Jacob toda alegría, no se oía ya en ella flauta ni cítara."
|
|
I Mac 5:4
|
También se acordó de castigar la malicia de los hijos de Beán, los cuales eran para el pueblo un lazo de tropiezo, armándole emboscadas en el camino.
|
|
I Mac 5:16
|
Luego que Judas y su gente oyeron tales noticias, tuvieron un gran consejo para deliberar qué era lo que harían a favor de aquellos hermanos suyos que se hallaban en la angustia, y eran estrechados por aquella gente.
|
|
I Mac 5:62
|
Mas ellos no eran de la estirpe de aquellos varones, por medio de los cuales había sido salvado Israel."
|
|
I Mac 7:23
|
Viendo, pues, Judas las extorsiones que Alcimo y los suyos habían hecho a los hijos de Israel, y que eran mucho peores que las causadas por los gentiles,
|
|
I Mac 8:1
|
Y oyó Judas la reputación de los romanos, y que eran poderosos, y se prestaban a todo cuanto se les pedía, y que habían hecho amistad con todos los que se habían querido unir a ellos, y que era muy grande su poder.
|
|
I Mac 9:61
|
Entonces Jonatás prendió a cincuenta personas del país, que eran los principales jefes de aquella conspiración, y les quitó la vida."
|
|
I Mac 12:1
|
Viendo Jonatás que el tiempo o circunstancias le eran favorables, eligió diputados y los envió a Roma, para confirmar y renovar la amistad con los romanos;
|
|
II Mac 1:19
|
Porque cuando nuestros padres fueron llevados cautivos a Persia, los sacerdotes que a la sazón eran temerosos de Dios, cogiendo secretamente el fuego que había sobre el altar, lo escondieron en un valle donde había un pozo profundo y seco, y lo dejaron allí guardado, sin que nadie supiese dicho lugar.
|
|
II Mac 2:1
|
Se lee en los escritos del profeta Jeremías, cómo mandó él a los que eran conducidos al cautiverio de Babilonia, que tomasen el fuego sagrado del modo que queda referido, y cómo prescribió varias cosas a aquellos que eran llevados cautivos.
|
|
II Mac 2:1
|
Se lee en los escritos del profeta Jeremías, cómo mandó él a los que eran conducidos al cautiverio de Babilonia, que tomasen el fuego sagrado del modo que queda referido, y cómo prescribió varias cosas a aquellos que eran llevados cautivos.
|
|
II Mac 3:10
|
Entonces el sumo sacerdote le representó que aquellos eran unos depósitos y alimentos de viudas y de huérfanos;
|
|
II Mac 3:11
|
y que entre lo que había denunciado el impío Simón había una parte que era de Hircano Tobías, varón muy eminente, y el todo eran cuatrocientos talentos de plata y doscientos de oro;
|
|
II Mac 7:24
|
Antíoco, pues, considerándose humillado, y creyendo que aquellas voces de los mártires eran un insulto a él, como quedase todavía el más pequeño de todos, comenzó no sólo a persuadirle con palabras, sino a asegurarle también con juramento, que lo haría rico y feliz si abandonaba las leyes de sus padres, y que le tendría por uno de sus amigos, y le daría cuanto necesitase.
|
|
II Mac 8:20
|
como también la batalla que ellos habían dado a los gálatas en Babilonia, en la cual, no habiendo osado entrar en la acción sus aliados los macedonios, ellos, que sólo eran seis mil, mataron ciento veinte mil, mediante el auxilio que les dio el cielo; y consiguieron en recompensa grandes bienes.
|
|
II Mac 8:36
|
y aquel mismo que antes había prometido pagar el tributo a los romanos con el producto de los cautivos de Jerusalén , iba publicando ahora que los judíos tenían por protector a Dios, y que eran invulnerables, porque seguían las leyes que el mismo Señor les había dado."
|
|
II Mac 11:13
|
Y como no le faltaba talento, meditando para consigo la pérdida que había tenido, y conociendo que los hebreos eran invencibles cuando se apoyaban en el socorro de Dios Todopoderoso, les envió comisionados;
|