Lc 9:47
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pero Jesús , leyendo los afectos de su corazón, tomó de la mano a un niño y lo puso junto a sí,
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Lc 10:27
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Respondió él: Amarás al Señor Dios tuyo de todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente, y al prójimo como a ti mismo.
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Lc 11:39
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Mas el Señor le dijo: Vosotros, ¡oh fariseos!, tenéis cuidado en limpiar el exterior de las copas y de los platos; pero el interior de vuestro corazón está lleno de rapiña y de maldad.
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Lc 12:34
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Porque donde está vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón.
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Lc 12:45
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Mas si dicho criado dijere en su corazón: Mi amo no piensa venir tan presto, y empezare a maltratar a los criados, y a las criadas, y a comer, y a beber, y a embriagarse,
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Lc 12:50
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Con un bautismo tengo de ser yo bautizado: ¡oh y cómo traigo en prensa el corazón, mientras no lo veo cumplido!
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Lc 24:25
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Entonces les dijo él: ¡Oh necios, y tardos de corazón para creer todo lo que anunciaron los profetas!
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Lc 24:32
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Entonces se dijeron uno a otro: ¿No es verdad que sentíamos abrasarse nuestro corazón, mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras?
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Lc 24:38
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Y Jesús les dijo: ¿De qué os asustáis y por qué dais lugar en vuestro corazón a tales pensamientos?
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Jn 12:40
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Cegó sus ojos y endureció su corazón, para que con los ojos no vean, y no perciban en su corazón por temor de convertirse, y de que yo los cure.
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Jn 12:40
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Cegó sus ojos y endureció su corazón, para que con los ojos no vean, y no perciban en su corazón por temor de convertirse, y de que yo los cure.
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Jn 13:2
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Y así acabada la cena, cuando ya el diablo había sugerido en el corazón de Judas, hijo de Simón Iscariote, el designio de entregarle,
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Jn 13:21
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Habiendo dicho Jesús estas cosas, se turbó en su corazón, y abiertamente declaró: En verdad, en verdad os digo, que uno de vosotros me hará traición.
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Jn 14:1
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No se turbe vuestro corazón. Pues creéis en Dios, creed también en mí.
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Jn 14:27
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La paz os dejo, la paz mía os doy; no os la doy yo, como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni se acobarde.
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Jn 16:6
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Porque os he dicho estas cosas, vuestro corazón se ha llenado de tristeza.
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Jn 16:22
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Así vosotros ahora a la verdad padecéis tristeza; pero yo volveré a visitaros, y vuestro corazón se bañará en gozo, y nadie os quitará vuestro gozo.
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Hech 2:26
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Por tanto se llenó de alegría mi corazón, y resonó mi lengua en voces de júbilo, y mi carne reposará en la esperanza:
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Hech 2:37
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Oído este discurso, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los demás apóstoles: Pues, hermanos, ¿qué es lo que debemos hacer?
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Hech 2:46
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Asistiendo asimismo cada día largos ratos al templo, unidos con un mismo espíritu, y partiendo el pan por las casas de los fieles, tomaban el alimento con alegría y sencillez de corazón,
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Hech 4:32
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Toda la multitud de los fieles tenía un mismo corazón y una misma alma; ni había entre ellos quien considerase como suyo lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común.
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Hech 5:3
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Mas Pedro le dijo: Ananías, ¿cómo ha tentado Satanás tu corazón, para que mintieses al Espíritu Santo, reteniendo parte del precio de ese campo?
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Hech 5:4
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¿Quién te quitaba el conservarlo? Y aunque lo hubieses vendido, ¿no estaba su precio a tu disposición? ¿Pues a qué fin has urdido en tu corazón esta trampa? No mentiste a hombres, sino a Dios.
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Hech 7:39
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a quien no quisieron obedecer nuestros padres; antes bien le desecharon, y con su corazón y afecto se volvieron a Egipto.
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Hech 7:51
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¡Hombres de dura cerviz y de corazón y oído incircuncisos!, vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como fueron vuestros padres, así sois vosotros.
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Hech 8:21
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No puedes tú tener parte, ni cabida en este ministerio; porque tu corazón no es recto a los ojos de Dios.
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Hech 8:22
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Por tanto haz penitencia de esta perversidad tuya, y ruega de tal suerte a Dios, que te sea perdonado ese desvarío de tu corazón.
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Hech 8:37
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Ninguno, respondió Felipe, si crees de todo corazón. A lo que dijo el eunuco: Yo creo que Jesucristo es el Hijo de Dios.
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Hech 11:23
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Llegado allá, y al ver los prodigios de la gracia de Dios, se llenó de júbilo; y exhortaba a todos a permanecer en el servicio del Señor con un corazón firme y constante.
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Hech 13:22
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Y removido éste, les dio por rey a David, a quien abonó diciendo: He hallado a David, hijo de Jesé, hombre conforme a mi corazón, que cumplirá todos mis preceptos.
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Hech 16:14
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Y una mujer llamada Lidia, que comerciaba en púrpura o grana, natural de Tiatira, temerosa de Dios, estaba escuchando; y el Señor le abrió el corazón para recibir bien las cosas que Pablo decía.
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Hech 21:13
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A lo que respondió, y dijo: ¿Qué hacéis con llorar y afligir mi corazón? Porque yo estoy pronto, no sólo a ser aprisionado, sino también a morir en Jerusalén por el Nombre del Señor Jesús .
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Hech 28:27
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Porque embotando este pueblo su corazón, ha tapado sus oídos, y apretado las pestañas de sus ojos, de miedo que con ellos vean y oigan con sus oídos, y entiendan con el corazón, y así se conviertan, y yo les dé la salud.
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Hech 28:27
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Porque embotando este pueblo su corazón, ha tapado sus oídos, y apretado las pestañas de sus ojos, de miedo que con ellos vean y oigan con sus oídos, y entiendan con el corazón, y así se conviertan, y yo les dé la salud.
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Rom 1:21
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porque habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias; sino que ensoberbecidos devanearon en sus discursos, y quedó su insensato corazón lleno de tinieblas;
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Rom 1:24
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Por lo cual, Dios los abandonó a los deseos de su depravado corazón, a los vicios de la impureza, en tanto grado que deshonraron ellos mismos sus propios cuerpos;
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Rom 2:5
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Tú, al contrario, con tu dureza y corazón impenitente vas atesorándote ira y más ira para el día de la venganza y de la manifestación del justo juicio de Dios,
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Rom 2:29
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sino que el verdadero judío es aquel que lo es en su interior, así como la verdadera circuncisión es la del corazón que se hace según el espíritu, y no según la letra de la ley; y este verdadero judío recibe su alabanza, no de los hombres, sino de Dios.
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Rom 6:17
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Pero, gracias a Dios, vosotros, aunque fuisteis siervos del pecado, habéis obedecido de corazón la doctrina de la buena nueva y según su modelo habéis sido formados de nuevo.
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Rom 8:23
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Y no solamente ellas, sino también nosotros mismos, que tenemos ya las primicias del Espíritu Santo, nosotros, con todo eso, suspiramos de lo íntimo del corazón, aguardando el efecto de la adopción de los hijos de Dios, esto es, la redención de nuestro cuerpo.
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Rom 9:2
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al asegurarnos que estoy poseído de una profunda tristeza y de continuo dolor en mi corazón,
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Rom 10:1
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Es cierto, hermanos míos, que siento en mi corazón un singular afecto a Israel, y pido muy de veras a Dios su salvación.
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Rom 10:6
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Pero de la justicia que procede de la fe, dice así: No digas en tu corazón: ¿Quién podrá subir al cielo?, esto es, para hacer que Cristo descienda;
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Rom 10:8
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Mas ¿qué es lo que dice la Escritura? Cerca está de ti la palabra que da la justificación, en tu boca está y en tu corazón; esta palabra es la palabra de la fe que predicamos.
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Rom 10:9
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Pues si confesareis con tu boca al Señor Jesús , y creyeres en tu corazón que Dios le ha resucitado de entre los muertos, serás salvo.
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Rom 10:10
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Porque es necesario creer de corazón para justificarse, y confesar la fe con las palabras u obras para salvarse.
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Rom 15:6
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a fin de que no teniendo sino un mismo corazón y una misma boca, glorifiquéis unánimes a Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo.
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I Cor 7:37
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Aunque por otra parte quien ha hecho en su interior la firme resolución de conservar virgen a su hija no teniendo necesidad de obrar de otro modo, sino pudiendo disponer en esto de su voluntad, y así lo ha determinado en su corazón, obra bien.
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I Cor 14:25
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Los secretos de su corazón se harán manifiestos y, por tanto, postrado sobre su rostro, adorará a Dios, confesando que verdaderamente Dios está en medio de vosotros.
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II Cor 1:12
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Porque toda nuestra gloria consiste en el testimonio que nos da la conciencia de haber procedido en este mundo con sencillez de corazón y sinceridad delante de Dios, no con la prudencia de la carne, sino según la gracia de Dios o espíritu de la buena nueva, y especialmente entre vosotros.
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