II Par 7:14
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y mi pueblo, sobre el cual ha sido invocado mi Nombre, convertido me pidiere perdón, y procurare aplacarme, haciendo penitencia de su mala vida; yo también desde el cielo lo escucharé y perdonaré sus pecados, y libraré de los males su país.
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II Par 8:8
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a los hijos y descendientes de aquellos a quienes los israelitas habían salvado la vida, Salomón los hizo tributarios o siervos, hasta el día de hoy.
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II Par 14:13
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Los persiguió Asá con su gente hasta Gerara, y fueron los etíopes destrozados hasta no quedar hombre con vida; exterminados por el Señor que los hería y por su ejército que peleaba. Cogieron, pues, un gran botín,
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II Par 15:17
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No obstante, quedaron lugares altos en Israel si bien el corazón de Asá fue perfecto todo el tiempo de su vida.
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II Par 16:10
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Airado Asá contra el profeta, lo mandó poner en un cepo, indignado sobremanera de esto que le había dicho; y en aquel tiempo quitó la vida a muchísimos del pueblo.
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II Par 22:8
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Estando, pues, Jehú destruyendo la casa de Acab, se encontró con varios príncipes de Judá, y con los hijos de los hermanos de Ocozías que estaban a su servicio, y les quitó la vida.
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II Par 22:9
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Y andando en busca del mismo Ocozías, que se había escondido en Samaria, se apoderó de él; y traído a su presencia, le hizo quitar la vida; y le dieron sepultura en Jerusalén , por ser hijo o nieto de Josafat, el cual había seguido al Señor con todo su corazón. Ni quedó ya esperanza alguna de que pudiese reinar nadie de la estirpe de Ocozías;
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II Par 23:7
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Los levitas estarán alrededor del rey, todos armados (a cualquier otro que entre en el templo, quítesele la vida), y acompañen al rey cuando entre y salga.
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II Par 25:16
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Y diciéndole esto el profeta, le respondió Amasías: ¿Eres tú, por ventura, consejero del rey? Calla, si no quieres te mande quitar a vida. Mas el profeta dijo al partir: Sé que Dios ha decretado hacerte morir a ti por esa maldad que has cometido, y porque además no has dado oído a mis consejos.
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II Par 28:9
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Había allí en aquella sazón un profeta del Señor, llamado Oded, el cual, saliendo al encuentro del ejército que venía a Samaria, les dijo: Habéis visto que el Señor Dios de vuestros padres, irritado contra los hijos de Judá, los ha entregado en vuestras manos; mas vosotros les habéis quitado la vida atrozmente; tanto que vuestra crueldad ha subido hasta el cielo.
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II Par 33:24
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Pero conjurados contra él sus criados, le quitaron la vida en su casa.
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II Par 35:21
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Pero Necao envió a decirle por sus embajadores: ¿Qué motivo hay de disensión entre nosotros dos, oh rey de Judá? Yo no vengo ahora a pelear contra ti, sino contra otra casa, contra la cual Dios me ha mandado salir a toda prisa; deja, pues, de oponerte a Dios, el cual está conmigo; no sea que el Señor te quite la vida.
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I Esd 4:5
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Además sobornaron contra ellos consejeros del rey, que les fustraron su designio durante la vida de Ciro, rey de los persas, y hasta el reinado de Darío, rey de Persia.
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I Esd 6:10
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y de esta manera ofrezcan oblaciones al Dios del cielo, y rueguen por la vida del rey y de sus hijos.
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I Esd 9:9
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porque esclavos éramos; mas en medio de nuestra esclavitud no nos ha desamparado nuestro Dios; antes bien ha inclinado a misericordia, para con nosotros, al rey de Persia, a fin de que éste nos diese la vida concediéndonos la libertad, y ensalzase la casa de nuestro Dios, y reparase sus ruinas, y nos diese acogida segura en Judá y en Jerusalén .
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II Esd 2:3
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y respondí al rey: Oh rey, sea tu vida eterna, ¿cómo no ha de estar melancólico mi semblante cuando la ciudad, lugar de los sepulcros de mis padres, está desierta, y consumidas sus puertas por las llamas?
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II Esd 6:10
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Fui después ocultamente a casa de Semeías, sacerdote, hijo de Dalaías, hijo de Metabeel; el cual me dijo: Vámonos los dos a conferencias en la casa de Dios en medio del templo, y cerremos sus puertas; porque han de venir a matarte, y por la noche vendrán a quitarte la vida.
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II Esd 6:11
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Mas yo respondí: ¿Y un hombre en el puesto en que yo me hallo, ha de huir? ¿Y qué hombre como yo puede entrar en el templo para salvar su vida? No quiero ir.
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II Esd 9:6
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Tú mismo, oh Señor, tú solo hiciste el cielo, y el cielo de los cielos donde habitas, y toda su milicia celestial, la tierra, y cuanto ella contiene, y los mares y todo lo que hay en ellos; y tú das vida o conservas todas estas cosas, y a ti te adora el ejército o milicia celestial.
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II Esd 9:29
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Y los exhortaste vivamente a volver a tu ley; pero ellos procedieron con altivez, y no obedecieron tus mandamientos, y pecaron contra tus leyes, en cuya observancia halla el hombre la vida, y rezongones sacudieron la carga del hombro, y endurecieron su cerviz, y no hicieron caso.
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Tob 1:22
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Lo que habiendo llegado a noticia del rey, mandó quitarle la vida, y confiscarle todos los bienes.
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Tob 2:8
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Lo reprendían todos sus parientes, diciendo: Ya por esta causa se dio la orden de quitarte la vida, y a duras penas escapaste de la sentencia de muerte; ¿y vas nuevamente a enterrar los cadáveres?
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Tob 2:14
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sino que permaneció firme en el temor de Dios, dándole gracias todos los días de su vida.
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Tob 2:18
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puesto que nosotros somos los hijos de los santos patriarcas, y esperamos aquella vida que ha de dar Dios a los que siempre conservan en él su fe.
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Tob 3:8
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porque había tenido siete maridos, y un demonio llamado Asmodeo les había quitado la vida al tiempo de querer acercarse a ella.
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Tob 3:21
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Lo que tiene por cierto cualquiera que te adora y sirve, es que si su vida saliere aprobada, será coronado; y si estuviere en tribulación, será librado; y si el azote del castigo descargare sobre él, podrá acogerse a tu misericordia.
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Tob 4:3
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Luego que Dios recibiere mi alma, entierra mi cuerpo; y honrarás a tu madre todos los días de su vida;
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Tob 4:5
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Y cuando ella haya también terminado la carrera de su vida, la enterrarás junto a mí.
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Tob 4:6
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Tú ten a Dios en tu mente todos los días de tu vida; y guárdate de consentir jamás en pecado, y de quebrantar los mandamientos del Señor Dios nuestro.
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Tob 4:23
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No temas, hijo mío, no te aflijas; es verdad que pasamos una vida pobre, pero tendremos muchos bienes, si temiéremos a Dios, y huyéremos de todo pecado, y obráremos bien.
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Tob 8:4
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Al mismo tiempo Tobías exhortó a la doncella, y le dijo: Levántate, Sara, y hagamos oración a Dios, hoy y mañana, y después de mañana; porque estas tres noches las pasaremos unidos en oración con Dios, y pasada la tercera noche haremos vida maridable.
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Tob 10:4
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Sobre todo su madre, inconsolable, lloraba amargamente, y decía: ¡Ay de mí; ay hijo mío! ¿Para qué te hemos enviado a lejanas tierras, lumbrera de nuestros ojos, báculo de nuestra vejez, consuelo de nuestra vida, esperanza de nuestra posteridad?
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Tob 12:9
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Porque la limosna libra de la muerte, y es la que purga los pecados, y alcanza la misericordia y la vida eterna.
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Tob 14:4
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Todo el resto de la vida lo pasó con alegría; y habiendo adelantado muchísimo en el temor de Dios, vino a descansar en paz.
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Jud 5:26
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Luego que acabó Aquior de hablar estas palabras, se indignaron todos los magnates de Holofernes, y trataban de quitarle la vida, diciéndose unos a otros:
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Jud 8:6
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y ceñida de un cilicio, ayunaba todos los días de su vida, menos los sábados, y novilunios, y otras festividades de la casa de Israel.
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Jud 10:15
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Y le dijeron: Has salvado tu vida con ese designio de venir a presentarte a nuestro príncipe y señor;
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Jud 12:4
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Yo juro por tu vida, oh mi señor, respondió Judit, que no consumirá tu sierva todo lo que trae consigo, antes que cumpla Dios por mi medio lo que ha pensado. En seguida los criados de Holofernes la acompañaron al alojamiento que había mandado.
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Jud 12:14
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Haré todo lo que él guste y mejor le parezca, y cuanto sea de su agrado, eso será para mí lo mejor en todos los días de mi vida.
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Jud 12:18
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Le contestó Judit: Beberé, oh señor, pues que recibo yo en este día mayor gloria que en todos los demás de mi vida.
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Jud 12:20
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Por su causa rebosaba Holofernes de contento; el cual bebió vino sin medida, más de lo que nunca en su vida había bebido.
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Jud 13:18
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y por medio de mí, esclava suya, ha dado una muestra de aquella misericordia que prometió a la casa de Israel; y ha quitado la vida esta noche por mi mano al enemigo de su pueblo.
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Jud 13:25
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Porque hoy ha hecho tan célebre tu nombre, que no cesarán jamás de publicar tus alabanzas cuantos conservaren en los siglos venideros la memoria de los prodigios del Señor; pues no has temido exponer tu vida por tu pueblo, viendo las angustias y la tribulación de tu gente, sino que has acudido a nuestro Dios para impedir su ruina.
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Jud 16:26
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Porque a su valor juntaba la castidad; de suerte que después que falleció su marido Manasés, no conoció otro varón en toda su vida."
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Jud 16:30
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Durante toda su vida no hubo quien turbase a Israel, ni después de su muerte en muchos años."
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Est 4:11
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Todos los criados del rey y todas las provincias sujetas a su imperio saben que cualquier hombre o mujer, que, sin ser llamados, entraren en el cuarto interior del rey, al punto sin remisión alguna deben ser muertos; a no ser que el rey extienda hacia ellos su cetro de oro en señal de clemencia, salvándoles así la vida. Esto supuesto, ¿cómo podré yo entrar al rey, habiéndose ya pasado treinta días que no he sido llamada a su presencia?
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Est 4:13
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envió todavía a decir esto a Ester: No pienses que por estar en el palacio del rey podrás tú sola salvar la vida entre todos los judíos;
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Est 7:3
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Ester le respondió: Si yo he hallado gracia en tus ojos, oh rey mío, y si es de tu agrado, sálvame la vida, por la cual te ruego, y la de mi pueblo, por quien imploró tu clemencia.
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Est 7:7
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Al mismo tiempo el rey, lleno de cólera, se levantó del lugar del convite, y pasó a un jardín inmediato plantado de árboles. Se levantó igualmente Amán para rogar a la reina Ester que le salvase la vida; pues conoció que el rey había resuelto su castigo.
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Est 9:10
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Después de haberles quitado la vida, no quisieron saquear ni tocar nada de sus bienes.
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