Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

pueda

Job 15:31 Engañado de un vano error, no creerá que pueda ser redimido por ningún rescate.
Job 32:12 y en tanto que creí que podríais decir algo, estaba atento. Mas a lo que veo, no hay entre vosotros quien pueda convencer a Job, ni responder a sus razones.
Job 41:16 la una está trabada con la otra, sin que quede ningún resquicio por donde pueda penetrar ni el aire.
Job 41:33 En fin, no hay poder sobre la tierra que pueda comparársele, pues fue creado para no tener temor de nadie.
Salm 18:7 Sale de una extremidad del cielo, y corre hasta la otra; no hay quién pueda esconderse de su calor.
Salm 26:4 Una sola cosa he pedido al Señor, ésta solicitaré; y es que yo pueda vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida; para contemplar las delicias del Señor, frecuentando su templo.
Salm 39:6 Muchas son las maravillas que has obrado, ¡oh Señor Dios mío!, y no hay quien pueda asemejarse a ti en tus designios. Me puse yo a referirlos y anunciarlos; exceden todo guarismo.
Salm 49:22 Entended esto bien, vosotros que andáis olvidados de Dios; no sea que algún día os arrebate, sin que haya nadie que pueda libraros.
Salm 55:11 A Dios celebraré por las promesas que me tiene hechas; alabaré al Señor por ellas. En Dios tengo mi esperanza; nada temeré de cuanto pueda hacer contra mí el hombre.
Salm 55:13 Porque libraste de la muerte mi alma, y mis pies de la caída; a fin de que pueda ser grato a los ojos de Dios en la luz de los vivientes.
Salm 85:8 Ninguno hay entre los dioses que pueda, ¡oh Señor!, parangonarse contigo; ninguno que pueda imitar tus obras.
Salm 85:8 Ninguno hay entre los dioses que pueda, ¡oh Señor!, parangonarse contigo; ninguno que pueda imitar tus obras.
Salm 88:7 Porque, ¿quién hay en los cielos, que pueda igualarse con el Señor?; ¿quien entre los hijos de Dios es semejante a él?;
Salm 117:6 El Señor es mi sostén, no temo nada de cuanto pueda hacerme el hombre.
Prov 20:9 ¿Quién es el que decir pueda: mi corazón está limpio, puro soy de todo pecado?
Prov 20:24 El Señor es sólo quien dirige los pasos de los hombres; y ¿qué hombre hay que pueda por sí conocer el camino que debe llevar?
Ecle 9:4 No hay hombre que viva siempre, ni que pueda presumirse esto. Con todo, hasta el perro, que vive, vale siempre más que el mismo león ya muerto;
Sab 12:14 No hay ni rey, ni príncipe que pueda pedirte cuenta de aquellos que tú has hecho perecer.
Sab 15:19 Y no hay quien pueda observar cosa buena en el aspecto de éstas sabandijas o animales; pues ahuyentaron de sí la aprobación y bendición de Dios.
Ecli 18:5 No hay que quitar ni que añadir en las admirables obras del Señor, ni hay quien pueda comprenderlas.
Ecli 26:15 Ella, como un caminante sediento, aplicará la boca a toda fuente, y beberá del agua más cercana, sea la que fuere, y se sentará junto a cualquier esquina, y abrirá la aljaba a cualquier saeta hasta que más no pueda.
Ecli 26:20 No hay cosa de tanto valor que pueda equivaler a esta alma casta.
Isa 11:15 El Señor secará la lengua del mar de Egipto, y extenderá su mano sobre el río con su impetuoso viento, y le herirá en sus siete bocas, de modo que se pueda pasar sin descalzarse.
Isa 14:31 Aúllen las puertas, esfuercen sus gritos las ciudades, todo el país de los filisteos está por tierra, porque hacia el septentrión viene la humareda, y no habrá quien pueda escapar de sus escuadrones.
Isa 22:22 Y pondré sobre sus hombros la llave de la casa de David; y abrirá, y no habrá quien pueda cerrar; y cerrará, y no habrá quien pueda abrir.
Isa 22:22 Y pondré sobre sus hombros la llave de la casa de David; y abrirá, y no habrá quien pueda cerrar; y cerrará, y no habrá quien pueda abrir.
Isa 36:20 ¿Cuál es el dios entre todos los dioses de estos países, el cual haya podido librar su tierra de la fuerza de mi brazo, para que esperéis que el Señor pueda salvar a Jerusalén de caer en mis manos?
Isa 43:13 y yo soy el mismo desde el principio o desde la eternidad; y no hay nadie que pueda sustraerse de mi mano. Yo haré una cosa ¿y quién me la impedirá?
Isa 45:1 Esto dice el Señor a mi ungido Ciro, a quien he tomado de la mano, para sujetar a él las naciones y hacer volver las espaldas a los reyes, y para abrir delante de él las puertas, sin que ninguna pueda resistirle.
Isa 50:2 Porque yo vine al mundo, y no hubo nadie que me recibiese; llamé y no hubo quien me escuchase. ¿Es por ventura que se ha acortado o achicado mi mano, de suerte que no pueda redimir? ¿O no tengo yo poder para libertaros? Sabed que a una amenaza mía haré del mar un desierto, y secaré los ríos; se pudrirán los peces por falta de agua, y morirán en seco.
Isa 55:6 Buscad al Señor, mientras pueda ser hallado: invocadle mientras está cercano.
Isa 59:1 Porque mirad que no se ha encogido la mano del Señor, para que ella no pueda salvar; ni se le han entupido sus oídos, para no poder oír vuestros clamores;
Isa 60:11 Y estarán abiertas siempre tus puertas, ni de día ni de noche se cerrarán, a fin de que a toda hora pueda introducir en ti la riqueza de las naciones, con sus reyes.
Jer 4:4 Circuncidaos por amor del Señor, y separad de vuestro corazón las inmundicias, ¡oh vosotros, varones de Judá, y moradores de Jerusalén !, no sea que se manifieste cual fuego abrasador mi enojo, y suceda un incendio, y no haya quien pueda apagarle por causa de la malicia de vuestros designios.
Jer 21:12 ¡Oh vosotros de la casa de David!, esto dice el Señor: Administrad pronto la justicia, y a los oprimidos por la prepotencia libradlos del poder del opresor; no sea que prenda en vosotros como fuego mi enojo, y encendido que sea, no haya quien pueda apagarlo, por causa de la malignidad de vuestras inclinaciones o mala conducta vuestra.
Jer 36:3 por si tal vez los hijos de la casa de Judá, oyendo todos los males que yo pienso enviarles, se convierte cada uno de su pésimo proceder, de suerte que pueda yo perdonarles sus maldades y pecados.
Jer 46:6 No hay que pensar en que pueda escaparse el ligero, ni salvarse el valiente; a la parte del norte, junto al río Eufrates, han sido derrotados y postrados por el suelo.
Jer 50:44 He aquí que un rey vendrá como un león, desde el hinchado Jordán a caer sobre la bella y fuerte Babilonia; porque yo lo haré correr súbitamente hacia ella. ¿Y quién será el escogido, a quien yo le encargue que se apodere de ella? Pues ¿quién hay semejante a mí? ¿Quién habrá que se me oponga? ¿Ni cuál es el pastor o capitán que pueda ponérseme delante?
Bar 3:31 No hay nadie que pueda conocer los caminos de ella, ni investigar las veredas por donde anda."
Ezeq 21:19 Y tú, hijo de hombre, diséñate dos caminos, por los cuales pueda venir la espada del rey de Babilonia; ambos saldrán de un mismo punto; y al principio del doble camino el rey con su misma mano sacará por suerte una ciudad.
Ezeq 24:7 Porque en medio de ella está la sangre inocente que ha derramado; sobre muy limpias piedras la derramó; no la derramó sobre la tierra, de modo que se pueda cubrir con el polvo.
Ezeq 30:21 Hijo de hombre: Yo he roto el brazo del faraón, rey de Egipto, y he aquí que no ha sido vendado para restablecerlo en su primer estado, ni envuelto con paños, ni fajado con vendas, a fin de que, recobrando el vigor, pueda manejar la espada.
Dan 2:10 A esto dijeron los caldeos, respondiendo al rey: No hay hombre sobre la tierra, ¡oh rey!, que pueda cumplir tu mandato; ni hay rey alguno grande y poderoso que demande tal cosa a ningún adivino, mago o caldeo,
Dan 2:11 porque es cosa muy difícil, ¡oh rey!, la que pides, y no se hallará nadie que pueda ilustrar al rey sobre ella, fuera de los dioses, los cuales no tienen trato con los hombres.
Dan 3:96 Este, pues, es el decreto que yo expido: Perezca cualquier pueblo, tribu o lengua que hable mal del Dios de Sidrac, Misac y Abdénago; y sean derruidas sus casas, porque no hay otro dios que pueda así salvar.
Dan 4:32 y ante él son reputados como una nada todos los habitantes de la tierra; porque según él quiere, así dispone, tanto de las potestades del cielo, como de los moradores de la tierra, ni hay quien resista a lo que él hace, y le pueda decir: ¿Por qué has hecho esto?
Dan 11:16 Y viniendo aquél sobre el rey del mediodía, hará cuanto quiera, sin que haya quien pueda resistirle y entrará en la tierra ilustre de la Judea, la cual será por él asolada.
Os 13:14 No obstante, yo los libraré del poder de la muerte; de las garras de la misma muerte los redimiré. ¡Oh muerte!, yo he de ser la muerte tuya; seré tu destrucción, ¡oh infierno! No veo cosa que pueda consolarme.
Joel 2:3 Delante de él va un fuego devorador, y lleva en pos de sí una abrasadora llama; la tierra que antes de su llegada era un paraíso de delicias, la deja hecha un asolado desierto, sin que nadie pueda librarse de él.
Amós 9:1 Yo vi al Señor que estaba sobre el altar, y dijo: Hiere el quicio o umbral, y se conmoverán los dinteles. Porque no hay nadie que no esté dominado de la avaricia; y yo haré morir al filo de la espada hasta el último de ellos, sin que haya quien pueda escapar; huirán, y ninguno de los que huyeren se salvará.