Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

príncipes

Os 8:4 Ellos reinaron, pero no por mí; fueron príncipes, mas yo no los reconocí. De su plata y de su oro se forjaron ídolos para su perdición.
Os 8:10 Pero después que se hayan procurado a caro precio el socorro de las naciones, yo entonces los reuniré en Asiria, y siendo cautivos, quedarán por algún tiempo exentos del tributo que pagan al rey y a los príncipes.
Os 9:15 El colmo de su maldad fue allá en Galgal; allí les tomé yo aversión; yo los echaré de mi casa por causa de sus perversas obras; nunca más los amaré; todos sus príncipes son unos apóstatas.
Os 13:10 ¿Dónde está tu rey?; ¿dónde tus jueces? Ahora es la ocasión de que te salven a ti y a tus ciudades; puesto que me dijiste tú: Dame un rey y príncipes que me gobiernen.
Amós 1:15 Y el ídolo Melcom irá al cautiverio, con sus príncipes, dice el Señor.
Amós 2:3 Y quitaré de en medio a su juez o monarca, y junto a él mataré a todos sus príncipes, dice el Señor.
Miq 3:1 Y dije yo: Escuchad, ¡oh vosotros, príncipes de Jacob , y caudillos de la casa de Israel! ¿Acaso no os toca a vosotros saber aquello que es justo?
Miq 3:9 Escuchad estas cosas, ¡oh príncipes de la casa de Jacob !, y vosotros, ¡oh jueces de la casa de Israel!, vosotros que abomináis la justicia, y trastornáis toda equidad.
Miq 3:11 Sus príncipes o jueces se dejan cohechar en los juicios; y sus sacerdotes predican por interés, y por el dinero adivinan sus profetas; y no obstante se apoyan en el Señor, diciendo: Pues qué, ¿acaso no está el Señor en medio de nosotros? No temáis, ningún mal nos vendrá.
Miq 5:5 Y él será nuestra paz; y cuando viniere el asirio a nuestra tierra, y asolare nuestras casas, nosotros enviaremos contra él siete pastores y ocho príncipes.
Nah 3:18 Se durmieron, ¡oh rey de Asur!, tus pastores, o capitanes; enterrados serán tus príncipes; se escondió tu gente por los montes, y no hay quien la reúna.
Sof 1:8 Y en aquel día de la víctima del Señor, yo castigaré, dice Dios, a los príncipes y los hijos del rey de Jerusalén , y a cuantos visten y viven como los extranjeros.
Sof 3:3 Sus príncipes están en medio de ella como leones rugientes; como lobos nocturnos son sus jueces, no dejan nada para el día siguiente.
Zac 11:3 Retumban los aullidos de los pastores o príncipes, porque destruida ha sido su grandeza; resuenan los rugidos de los leones, porque ha sido disipada la hinchazón del Jordán.
I Mac 1:27 Gemían los príncipes y los ancianos, quedaban sin aliento las doncellas y los jóvenes, y desapareció la hermosura en las mujeres.
I Mac 6:60 Pareció bien al rey y a sus príncipes esta proposición; y envió a hacer la paz con los judíos, los cuales la aceptaron."
I Mac 6:61 La confirmaron con juramento el rey y los príncipes; y salieron de la fortaleza los que la defendían."
I Mac 9:37 De allí a poco dieron noticia a Jonatás y a su hermano Simón, de que los hijos de Jambri celebraban unas grandes bodas, y que llevaban desde Madaba con mucha pompa la novia, la cual era hija de uno de los grandes príncipes de Canaán."
I Mac 14:20 Los príncipes y ciudades de los lacedemonios, a Simón, sumo sacerdote, a los ancianos, o senadores, a los sacerdotes y a todo el pueblo de los judíos, sus hermanos, salud:
I Mac 14:28 en la gran asamblea de los sacerdotes y del pueblo, y de los príncipes de la nación, y de los ancianos del país: Que habiendo habido en nuestra tierra continuas guerras,
II Mac 3:2 nacía de esto que aun los mismos reyes y los príncipes honraban sumamente aquel lugar sagrado, y enriquecían el templo con grandes dones.
II Mac 10:21 Así que fue informado de esto el Macabeo, congregados los príncipes o cabezas del pueblo, acusó a aquéllos de haber vendido por dinero a sus hermanos, dejando escapar a sus enemigos.
Mt 2:4 Y convocando a todos los príncipes de los sacerdotes y a los escribas del pueblo, les preguntaba en dónde había de nacer el Cristo , o Mesías.
Mt 16:21 Y desde luego comenzó a manifestar a sus discípulos que convenía que fuese él a Jerusalén , y que allí padeciese mucho de parte de los ancianos, y de los escribas, y de los príncipes de los sacerdotes, y que fuese muerto, y que resucitase al tercer día.
Mt 20:18 Mirad que vamos a Jerusalén , donde el Hijo del hombre ha de ser entregado a los príncipes, y le condenarán a muerte;
Mt 20:25 Mas Jesús los convocó a sí, y les dijo: No ignoráis que los príncipes de las naciones avasallan a sus pueblos, y que sus magnates los dominan con imperio.
Mt 21:15 Pero los príncipes de los sacerdotes y los escribas, al ver las maravillas que hacía, y los niños que le aclamaban en el templo, diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David!, se indignaron,
Mt 21:23 Llegado al templo, se acercaron a él, cuando estaba ya enseñando, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos o senadores del pueblo, y le preguntaron: ¿Con qué autoridad haces estas cosas, y quién te ha dado tal potestad?
Mt 21:45 Oídas estas parábolas de Jesús , los príncipes de los sacerdotes y los fariseos entendieron que hablaba por ellos;
Mt 26:3 Al mismo tiempo se juntaron los príncipes de los sacerdotes y los magistrados del pueblo en el palacio del sumo sacerdote, que se llamaba Caifás;
Mt 26:14 Entonces Judas Iscariote, uno de los doce, fue a verse con los príncipes de los sacerdotes, y les dijo:
Mt 26:47 Aún no había acabado de decir esto, cuando llegó Judas, uno de los doce, seguido de gentes armadas con espadas y con palos, que venían enviadas por los príncipes y sacerdotes y ancianos o senadores del pueblo.
Mt 26:59 Los príncipes, pues, de los sacerdotes, y todo el concilio andaban buscando algún falso testimonio contra Jesús para condenarlo a muerte.
Mt 27:1 Venida la mañana, todos los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo tuvieron consejo contra Jesús para hacerle morir.
Mt 27:3 Entonces Judas, el que le había entregado, viendo a Jesús sentenciado, arrepentido de lo hecho, restituyó las treinta monedas de plata a los príncipes de los sacerdotes y a los ancianos.
Mt 27:6 Pero los príncipes de los sacerdotes, recogidas las monedas, dijeron: No es lícito meterlas en el tesoro del templo siendo como son precio de sangre.
Mt 27:12 Y por más que le acusaban los príncipes de los sacerdotes y los ancianos, nada respondió.
Mt 27:18 porque sabía bien que se lo habían entregado los príncipes de los sacerdotes por envidia.
Mt 27:20 Entretanto, los príncipes de los sacerdotes y los ancianos indujeron al pueblo a que pidiese la libertad de Barrabás y la muerte de Jesús .
Mt 27:41 De la misma manera también los príncipes de los sacerdotes, a una con los escribas y los ancianos, insultándole decían:
Mt 27:62 Al día siguiente, que era el de después de la preparación del sábado, o el sábado mismo, acudieron junto a Pilato los príncipes de los sacerdotes y los fariseos,
Mt 28:11 Mientras ellas iban, algunos de los guardias vinieron a la ciudad, y contaron a los príncipes de los sacerdotes todo lo que había pasado.
Mc 8:31 Y comenzó a declararles cómo convenía que el Hijo del hombre padeciese mucho, y fuese desechado por los ancianos, y por los príncipes de los sacerdotes, y por los escribas, y que fuese muerto, y que resucitase a los tres días.
Mc 10:33 Nosotros, les dijo, vamos, como veis, a Jerusalén , donde el Hijo del hombre será entregado a los príncipes de los sacerdotes, y a los escribas y ancianos, que le condenarán a muerte, y le entregarán a los gentiles:
Mc 10:42 Mas Jesús , llamándolos todos a sí, les dijo: Bien sabéis que los que tienen autoridad de mandar a las naciones, las tratan con imperio; y que sus príncipes ejercen sobre ellos un poder absoluto.
Mc 11:18 Sabido esto por los príncipes de los sacerdotes y los escribas, andaban trazando el modo de quitarle la vida secretamente; porque le temían, viendo que todo el pueblo estaba maravillado de su doctrina.
Mc 11:27 Volvieron, pues, otra vez a Jerusalén . Y paseándose Jesús por el atrio exterior del templo instruyendo al pueblo, se acercaron a él los príncipes de los sacerdotes, y los escribas, y los ancianos;
Mc 14:1 Dos días después era la Pascua , cuando comienzan los ázimos: y los príncipes de los sacerdotes y los escribas andaban trazando como prender a Jesús con engaño y quitarle la vida.
Mc 14:43 Estando todavía hablando, llega Judas Iscariote, uno de los doce, acompañado de mucha gente, con espadas y con garrotes, enviada por los príncipes de los sacerdotes, por los escribas y por los ancianos.
Mc 14:55 Mientras tanto los príncipes de los sacerdotes, con todo el concilio, andaban buscando contra Jesús algún testimonio, para condenarle a muerte, y no lo hallaban.