Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

ofrecer

Juec 16:23 cuando los príncipes de los filisteos se juntaron todos para ofrecer sacrificios solemnes a su dios Dagón, y celebrar banquetes, diciendo: Nuestro dios nos ha puesto en las manos a Sansón, nuestro enemigo.
I Rey 1:3 Subía este hombre desde su ciudad a Silo en los días señalados a adorar y ofrecer sacrificios al Señor de los ejércitos. Allí residían entonces los dos hijos de Helí: Ofni y Finees, sacerdotes del Señor.
I Rey 1:21 Subió, pues, Elcana, su marido, con toda su familia a ofrecer al Señor una hostia solemne, y a cumplir su voto.
I Rey 2:19 Y le hacía su madre una túnica pequeña; y se la llevaba los días solemnes, cuando subía con su marido a ofrecer el anual sacrificio solemne.
I Rey 2:28 y que lo escogí entre todas las tribus de Israel por sacerdote mío para que subiese a ofrecer sobre mi altar, y me quemase perfume y anduviese vestido del efod en mi presencia; y di a la casa de tu padre una parte en todos los sacrificios de los hijos de Israel?
I Rey 2:29 Pues, ¿cómo habéis hollado o envilecido mis víctimas y mis dones, que yo mandé ofrecer en el templo, y has tenido tú más respeto a tus hijos que a mí, comiendo con ellos lo principal o mejor de todos los sacrificios de mi pueblo de Israel?
I Rey 10:8 Después descenderás antes que yo a Gálgala (donde iré yo a encontrarte), para ofrecer holocaustos y sacrificar víctimas pacíficas al Señor. Me aguardarás siete días, hasta tanto que yo llegue, y te declararé lo que debes hacer.
I Rey 13:10 Acabado que hubo de ofrecer el holocausto, he aquí que llegaba Samuel; y Saúl le salió al encuentro para saludarle.
I Rey 15:22 Dijo entonces Samuel: ¿Por ventura el Señor no estima más que los holocaustos y las víctimas, el que se le obedezca a su voz? La obediencia vale más que los sacrificios, y el ser dócil importa más que el ofrecer la grasa de los carneros.
I Rey 16:2 A lo que respondió Samuel: ¿Cómo tengo que ir? Lo sabrá luego Saúl, y me quitará la vida. Dijo el Señor: Tomarás contigo un becerro de la vacada, y dirás que has ido allí a ofrecer sacrificios al Señor.
I Rey 16:5 De paz, respondió Samuel. Vengo a ofrecer sacrificio al Señor; purificaos, y venid conmigo al sacrificio. Purificó, pues, a Isaí y a sus hijos, y los convidó al sacrificio.
II Rey 6:18 Así que acabó de ofrecer los holocaustos y las víctimas pacíficas bendijo al pueblo, en el nombre del Señor Dios de los ejércitos.
II Rey 24:24 Respondió el rey y le dijo: No ha de ser como tú quieres, sino que te pagaré lo que vale; que no quiero ofrecer yo al Señor mi Dios holocaustos que no me cuesten nada. Y así compró David la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata;
III Rey 3:4 Partió, pues, para Gabaón, a fin de ofrecer allí sacrificios; por cuanto era éste el más grande entre los lugares excelsos; mil víctimas ofreció Salomón en holocausto sobre aquel altar en Gabaón.
III Rey 12:27 porque si este pueblo ha de subir a Jerusalén a ofrecer sacrificios en el templo del Señor, se convertirá el corazón de este pueblo hacia Roboam, rey de Judá, que fue su señor, y me quitarán a mí la vida, y se reconciliarán con él.
III Rey 18:36 Siendo ya el tiempo de ofrecer el holocausto, se acercó el profeta Elías, y dijo: Oh Señor Dios de Abrahán, y de Isaac, y de Israel, muestra hoy que tú eres el Dios de Israel, y que yo soy tu siervo, y que por tu mandato he hecho todas estas cosas.
IV Rey 10:24 Entraron, pues, para ofrecer las víctimas y holocaustos. Mas Jehú tenía dispuestos afuera ochenta hombres, a quienes había dicho: Cualquiera que dejare escapar alguno de estos hombres que yo entrego en vuestras manos, pagará con su vida la vida del que escapare.
IV Rey 16:12 Y el rey, llegado que hubo de Damasco, vio aquel altar, y lo veneró, y subió a ofrecer en él holocausto, y su sacrificio.
IV Rey 17:36 sino al Señor Dios vuestro que os sacó de la tierra de Egipto con gran fortaleza y con el poder de su brazo; a ése habéis de temer, a ése adorar, y a ése ofrecer sacrificios.
I Par 16:2 Y luego que David hubo acabado de ofrecer los holocaustos y las hostias pacíficas, bendijo al pueblo en el nombre del Señor;
I Par 21:24 Le replicó el rey David: No ha de ser así, sino que te pagaré en dinero todo su valor; porque no debo yo quitártelo a ti, y ofrecer así al Señor holocaustos que no me cuesten nada.
II Par 2:4 hazlo conmigo, para que yo pueda edificar una casa al Nombre del Señor Dios mío, y consagrársela para ofrecer incienso en su presencia, y esparcir el humo de los aromas, y tenerle presentados perpetuamente los panes, ofrecerle los holocaustos por la mañana y por la tarde, y en los sábados, y en los novilunios, y en las solemnidades del Señor Dios nuestro para siempre, como está mandado a Israel.
II Par 2:6 Mas ¿quién será capaz de edificarle una casa que sea digna de él? Si el cielo, si los cielos de los cielos no pueden abarcarle, ¿quién soy yo para poder construirle una casa? Mas no la hago para otra cosa, sino para ofrecer en ella incienso en su honor.
II Par 11:16 Pero de todas las tribus de Israel vinieron a Jerusalén a ofrecer sus sacrificios delante del Señor Dios de sus padres, cuantos habían resuelto en su corazón seguir al Señor Dios de Israel.
II Par 23:18 Joíada estableció prefectos de la casa del Señor, los cuales estaban subordinados a los sacerdotes y levitas, que habían sido distribuidos por David para el servicio del templo del Señor, para ofrecer al Señor los holocaustos, según está escrito en la ley de Moisés, con cánticos de alegría, conforme a lo dispuesto por David.
II Par 26:16 Mas al verse tan poderoso se enfrió su corazón para ruina suya, y despreció a su Señor Dios; y habiendo entrado en el templo del Señor, quiso ofrecer allí incienso sobre el altar de los perfumes.
II Par 26:18 y se opusieron al rey, y le dijeron: Oh Ozías, no te pertenece a ti el ofrecer incienso al Señor, sino a los sacerdotes, esto es, a los hijos de Aarón que han sido consagrados para este ministerio. Sal del santuario; no quieras despreciar nuestro consejo; porque no será esa acción gloriosa para ti delante del Señor, sino criminal.
II Par 26:19 Pero Ozías, arrebatado de cólera, y teniendo en la mano el incensario para ofrecer el incienso, amenazaba a los sacerdotes; y de repente apareció la lepra en su frente, a vista de los sacerdotes, en la casa del Señor, junto al altar de los perfumes.
II Par 29:7 Cerraron las puertas del atrio, y apagaron las lámparas, dejaron de quemar el incienso y de ofrecer los holocaustos en el santuario al Dios de Israel.
I Esd 3:2 Donde el sumo sacerdote Josué, hijo de Josedec, con sus hermanos los sacerdotes, y Zorobabel, hijo de Salatiel con sus hermanos emprendieron edificar el altar del Dios de Israel para ofrecer en él los holocaustos, según está escrito en la ley de Moisés, varón de Dios.
I Esd 3:6 Desde el primer día del mes séptimo, empezaron a ofrecer holocaustos al Señor, aunque todavía no se habían echado los cimientos del templo de Dios.
I Esd 10:19 los cuales prometieron, extendiendo su mano, despedir a sus mujeres, y ofrecer por su delito un carnero de los rebaños.
II Esd 4:2 y dijo en presencia de sus hermanos y de un gran concurso de samaritanos: ¿Qué pretenden hacer esos miserables judíos? ¿Por ventura se lo permitirán estas naciones vecinas?¿Piensan poder ofrecer sacrificios, concluyendo toda la obra en un día? ¿Podrán acaso restaurar las piedras de los montones reducidos a cenizas?.
II Esd 10:34 Echamos también suertes entre los sacerdotes y levitas, y el pueblo, sobre la leña que se debía ofrecer, y conducir a costa de las familias de nuestros padres a la casa de nuestro Dios a sus tiempos, de un año para otro, para quemar sobre el altar del Señor Dios nuestro, según está escrito en la ley de Moisés.
II Esd 10:36 como también los primerizos de nuestros hijos y de nuestros ganados, conforme está escrito en la ley, y los primerizos de nuestros bueyes, y de nuestras ovejas, para ofrecer todas estas cosas en la casa de nuestro Dios a los sacerdotes que están ejerciendo sus funciones en el templo de Dios nuestro.
Salm 48:8 El hermano no redime, ¿cómo redimirá otro hombre? Ninguno podrá ofrecer a Dios cosa que le aplaque,
Salm 65:13 Entraré en tu templo a ofrecer holocaustos, y te cumpliré mis votos,
Salm 95:7 ¡Oh vosotras, familias de las naciones!, venid a ofrecer al Señor; venid a ofrecerle honra y gloria.
Prov 7:14 Había hecho voto de ofrecer víctimas pacíficas por tu salud; cabalmente hoy lo he cumplido;
Prov 20:25 Es la ruina del hombre devorar los santos, o hurtar los bienes de los santos, y después ofrecer éstos para votos a Dios.
Ecli 35:3 Y apartarse de la injusticia es como ofrecer un sacrificio de propiciación por las injusticias cometidas, y remover la pena merecida por los pecados.
Ecli 50:19 Asimismo todo el pueblo, a una, se postraba de repente sobre su rostro en tierra para adorar al Señor Dios suyo, y ofrecer sus plegarias al Altísimo, Dios omnipotente.
Jer 7:18 Los hijos recogen la leña, encienden el fuego los padres, y las mujeres amasan la pasta con manteca, para hacer tortas, y presentarlas a la que adoran por reina del cielo, y ofrecer libaciones a los dioses ajenos, y provocar mi ira.
Jer 11:13 Porque sabido es que tus dioses, ¡oh Judá!, eran tantos como tus ciudades, y que tú, ¡oh Jerusalén !, erigiste en todas tus calles altares de ignominia, altares para ofrecer sacrificios a los ídolos.
Jer 44:3 por causa de la maldad que ellos cometieron para provocar mi indignación, yéndose a ofrecer sacrificios, y adorar a dioses ajenos, desconocidos de ellos, de vosotros y de vuestros padres.
Jer 44:5 Mas no quisieron escuchar, ni dar oídos a eso para convertirse de sus maldades, y abstenerse de ofrecer sacrificios a los dioses extraños.
Jer 44:18 Desde aquel tiempo en que dejamos de ofrecer sacrificios y libaciones a la reina del cielo, estamos faltos de todo, y nos vemos consumidos por la espada y por el hambre.
Jer 44:25 Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Vosotros y vuestras mujeres habéis pronunciado con vuestra boca y habéis ejecutado con vuestras manos aquello que decíais: Cumplamos los votos que hicimos de ofrecer sacrificios y libaciones a la reina del cielo. En efecto, vosotros cumplisteis vuestros votos y los pusisteis por obra.
Os 4:14 Yo les daré rienda suelta, no castigaré a vuestras hijas cuando hayan pecado, ni a vuestras esposas cuando se hayan hecho adúlteras; pues los mismos padres y esposos tienen trato con las rameras, y van a ofrecer sacrificios con los hombres afeminados y corrompidos. Por esta causa será azotado este pueblo insensato que no quiere darse por entendido.
Joel 2:14 ¿Quién sabe si se inclinará a piedad, y os perdonará, y os dejará gozar de la bendición, y el poder ofrecer sacrificios y libaciones al Señor Dios vuestro?