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Est 11:9
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La nación de los justos, temerosa de los desastres que la amenazaban se conturbó extraordinariamente considerándose destinada a la muerte.
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Est 13:5
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Lo cual entendido por nosotros, viendo que una sola nación se opone a todo el género humano, usa de leyes perversas, y desobedece nuestros decretos, perturba la paz y concordia de las provincias que nos están sujetas;
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Est 13:17
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Escucha mis súplicas, y muéstrate propicio a una nación que has escogido por herencia tuya, y convierte nuestro llanto en gozo, para que viviendo alabemos, oh Señor, tu santo Nombre; y no cierres las bocas de los únicos que cantan tus alabanzas.
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Est 16:13
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Puesto que con nuevos y nunca oídos artificios, tramó la muerte de Mardoqueo, a cuya lealtad y buenos servicios debemos la vida, y de Ester, esposa nuestra y compañera en nuestro reino, y de toda su nación;
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Job 34:29
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Porque al que él concede la paz, o le perdona, ¿quién lo condenará? Y ¿quién amparará al que él abandona, ya sea nación, o bien un particular?
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Salm 32:12
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Feliz la nación cuyo Dios es el Señor, el pueblo a quien escogió por herencia propia suya.
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Salm 72:15
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Si yo pensare en hablar de este modo, claro está que condenaría la nación de tus hijos.
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Salm 73:8
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Coligadas entre sí las gentes de esa nación han dicho en su corazón, borremos de la tierra todos los días consagrados al culto de Dios.
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Salm 104:13
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y pasaban a menudo de una nación a otra y de un reino a otro pueblo.
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Ecli 10:8
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Un reino es trasladado de una nación a otra por causa de las injusticias, y violencias, y ultrajes y de muchas maneras de fraudes.
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Ecli 16:5
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Un solo hombre cuerdo hará que sea poblada la patria o el país; despoblada será la nación o tribu de los impíos.
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Ecli 16:7
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Arderán llamas en la reunión de los pecadores; y la ira de Dios reventará sobre la nación de los incrédulos.
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Ecli 16:10
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No tuvo lástima de ellos y destruyó a toda aquella nación que hacía gala de sus delitos.
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Ecli 45:8
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Asentó con él un pacto eterno; y le dio el sacerdocio de la nación, y lo llenó de felicidad y gloria.
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Ecli 45:29
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y por haber hecho respetar la ley de Dios en medio de la prevaricación de la nación; él con su bondad y ánimo resuelto aplacó al Señor a favor de Israel."
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Ecli 46:16
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Samuel, querido del Señor Dios suyo, y profeta del Señor, estableció un nuevo gobierno, y ungió y puso reyes en su nación.
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Ecli 47:4
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¿No fue él quién mató al gigante, quitando así el oprobio de su nación?
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Ecli 47:6
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Porque él invocó al Señor Todopoderoso; el cual dio fuerza a su brazo para degollar a tan valiente campeón, y realzar los bríos de su nación.
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Ecli 47:27
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y dejó después de sí a Roboam, uno de los hijos, ejemplo de necedad para su nación,
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Ecli 49:7
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Por esta causa tuvieron que ceder a otros el propio reino, y su gloria a una nación extranjera.
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Ecli 49:17
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Ni otro comparable a José, nacido para ser el príncipe de sus hermanos, el sostén de la nación, guía de sus hermanos y firme apoyo de su pueblo;
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Ecli 50:5
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Consiguió engrandecer la ciudad, y se granjeó gloria, viviendo sencillamente en medio de su nación; y ensanchó la entrada del templo y atrio del Señor.
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Isa 1:4
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¡Ay de la nación pecadora, del pueblo lleno de iniquidades, de la raza malvada, de los hijos desgarrados! Han abandonado al Señor, han blasfemado del Santo de Israel, le han vuelto las espaldas.
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Isa 9:3
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Multiplicaste la nación; mas no aumentaste la alegría. Sin embargo, se alegrarán algún día delante de ti, como los que se alegran en la siega, o como se huelgan los vencedores con el botín que cogieron, al repartirse los despojos.
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Isa 18:2
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la cual envía embajadores por mar en barcos de papiro, o de juncos, que corren sobre las aguas! Id, mensajeros veloces a la nación conmovida y despedazada, a aquel pueblo formidable más que otro alguno, a la nación que espera, y entretanto es hollada, cuya tierra se van comiendo los ríos.
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Isa 18:2
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la cual envía embajadores por mar en barcos de papiro, o de juncos, que corren sobre las aguas! Id, mensajeros veloces a la nación conmovida y despedazada, a aquel pueblo formidable más que otro alguno, a la nación que espera, y entretanto es hollada, cuya tierra se van comiendo los ríos.
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Isa 18:7
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En aquel tiempo, el pueblo dividido y despedazado, el pueblo formidable más que cualquier otro, la nación que espera y más espera y es entretanto hollada (cuya tierra está desmoronada por los ríos) llevará ofrendas al Señor de los ejércitos que reside en el lugar donde se invoca el Nombre del mismo Señor de los ejércitos, en el monte de Sión.
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Isa 49:7
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Esto dice el Señor, el Redentor, el Santo de Israel, al hombre reputado como despreciable entre los suyos; a la nación abominada de todos, a aquel que es tratado como un esclavo de los príncipes: Día vendrá en que los reyes y los príncipes al verte se levantarán, y te adorarán por amor del Señor, porque has sido fiel en tus promesas, y por amor del Santo de Israel que te escogió.
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Isa 51:4
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Atiende a lo que te digo, ¡oh pueblo mío!, y escúchame, nación mía; porque de mí ha de salir la nueva ley, y mi justicia se establecerá entre los pueblos a fin de iluminarlos.
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Isa 60:12
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Puesto que la nación y el reino que a ti no se sujetare, perecerá, y tales gentes serán destruidas y asoladas.
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Isa 60:22
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El menor de ellos valdrá por mil, y el párvulo por una nación poderosísima. Yo el Señor haré súbitamente todo esto cuando llegare su tiempo.
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Isa 65:1
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Han venido a buscarme aquellos que antes no preguntaban por mí, me han hallado aquellos que no me buscaron. Yo he dicho a una nación que no invocaba mi Nombre: Aquí estoy, heme aquí.
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Isa 66:8
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¿Quién jamás oyó cosa tal, ni quién vio cosa semejante a esto? ¿Tiene acaso la tierra en un solo día el fruto? ¿O ha sido engendrada nunca de una vez toda una nación? Pues he aquí que Sión se sintió preñada y parió sus hijos.
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Jer 5:15
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Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
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Jer 5:15
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Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
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Jer 5:15
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Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
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Jer 5:15
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Yo voy a traer sobre vosotros, ¡oh familia de Israel!, dice el Señor, una nación lejana, nación robusta, nación antigua, nación cuya lengua tú no sabrás, ni entenderás lo que habla.
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Jer 5:17
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Esta nación conquistadora se comerá tus cosechas y tu pan; se tragará tus hijos y tus hijas; comerá tus rebaños y tus vacadas; acabará con tus viñas y tus higuerales: y asolará con la espada tus fuertes ciudades, en que tú tienes puesta la confianza.
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Jer 6:22
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Esto dice el Señor: Mirad que viene un pueblo del septentrión, y una nación grande saldrá de los extremos de la tierra.
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Jer 7:28
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Y así les dirás: Esta es aquella nación que no ha escuchado la voz del Señor Dios suyo, ni ha admitido sus instrucciones. Muerta está su fe o fidelidad; desterrada está de su boca.
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Jer 18:7
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Yo pronunciaré de repente mi sentencia contra una nación y contra un reino, para arrancarlo, destruirlo y aniquilarlo.
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Jer 18:8
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Pero si esa nación hiciere penitencia de sus pecados, por los cuales pronuncié el decreto contra ella, me arrepentiré yo también del mal que pensé hacer contra ella.
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Jer 18:9
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Asimismo trataré yo de repente de fundar y establecer una nación y un reino.
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Jer 25:12
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Y cumplidos que sean los setenta años, yo tomaré cuentas al rey de Babilonia y a aquella nación, dice el Señor, castigando sus iniquidades, y a todo el país de los caldeos, reduciéndolo a un eterno páramo.
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Jer 27:8
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Mas a la nación y al reino que no quiera someterse a Nabucodonosor, rey de Babilonia, a cualquiera que no doblare su cerviz al yugo del rey de Babilonia, yo los castigaré, dice el Señor, con la espada, con hambre y con peste hasta que por medio de Nabucodonosor acabe con ellos.
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Jer 27:11
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Al contrario, la nación que doblare su cerviz al yugo del rey de Babilonia y le sirviere, yo la dejaré en su tierra, dice el Señor, y seguirá cultivándola y habitando en ella.
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Jer 27:13
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¿Para qué queréis morir tú y el pueblo tuyo, a cuchillo, y de hambre, y de peste, como tiene Dios predicho a la nación que no quisiere someterse al rey de Babilonia?
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Jer 31:36
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Cuando estas leyes, dice el Señor, establecidas por mi providencia vinieren a faltar, entonces podrá faltar también el linaje de Israel, y dejar de ser nación perdurable a mi presencia.
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Jer 33:24
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¿No has tú hecho alto en lo que habla este pueblo, que dice: Las dos familias que el Señor había escogido están desechadas? De tal manera desprecian ellos a mi pueblo, que a sus ojos ya no es nación.
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Jer 45:4
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Esto dice el Señor: Tú le dirás: He aquí que yo destruyo a aquellos que había ensalzado, y arranco a los que había plantado, y a toda esta tierra o nación entera.
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