Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

madre

Deut 22:15 el padre y la madre de ella la tomarán, y presentarán las señales de la virginidad de su hija en el tribunal de los ancianos a la puerta de la ciudad;
Deut 27:16 Maldito sea el que no honra a su padre y a su madre. Y responderá todo el pueblo: Amén.
Deut 27:22 Maldito el que duerme con su hermana, hija de su padre, o de su madre. Y dirá todo el pueblo: Amén.
Deut 33:9 Aquellos que dijeron a su padre y a su madre: No os conozco; y a sus hermanos: No sé quién sois; y ni a sus propios hijos perdonaron, éstos cumplieron tus mandamientos y guardaron inviolable tu pacto.
Jos 2:13 con que salvéis a mi padre y madre, a mis hermanos y hermanas, y todos sus bienes, y los libréis de la muerte.
Jos 2:18 si cuando entráremos en la tierra estuviere por contraseña esta cinta de color de grana, atada a la ventana por donde nos has descolgado, y hubieres tenido cuidado de reunir en tu casa a tu padre y madre y hermanos, y toda tu parentela.
Jos 3:15 Y luego que éstos entraron en el Jordán, y comenzaron sus pies a mojarse en parte del agua (es de advertir que siendo el tiempo de la siega, el Jordán había salido de madre),
Jos 4:8 Hicieron, pues, los hijos de Israel lo que les ordenó Josué, trayendo del medio de la madre del Jordán doce piedras, como el Señor le había mandado a Josué, conforme al número de las tribus de los hijos de Israel, hasta el sitio en que acamparon, y las colocaron allí.
Jos 4:9 Levantó también Josué otras doce piedras en medio de la madre del Jordán, donde estuvieron parados los sacerdotes que llevaban el Arca del Testamento, y allí permanecen hasta el día de hoy.
Jos 4:18 Y luego que salieron llevando el Arca del Testamento, y comenzaron a pisar la ribera, volvieron las aguas a su madre, y corrieron como solían antes.
Juec 5:6 Se habían acabado en Israel los valientes, habían desaparecido, hasta que Débora levantó la cabeza y se dejó ver como una madre para Israel.
Juec 5:27 Mientras esto pasaba estaba mirando la madre de Sísara desde la ventana y daba voces, diciendo desde su cuarto: ¿Cómo tarda tanto en volver su carro? ¿Cómo son tan pesados los pies de sus cuatro caballos?
Juec 8:19 Les replicó Gedeón: Hermanos míos eran, hijos de mi madre. Vive Dios que si les hubieseis conservado la vida, yo tampoco os la quitaría a vosotros.
Juec 9:1 Por este tiempo Abimelec, hijo de Jerobaal, se fue a Siquem a los hermanos de su madre, y trató con ellos y con toda la parentela de la casa del padre de su madre, diciendo:
Juec 9:1 Por este tiempo Abimelec, hijo de Jerobaal, se fue a Siquem a los hermanos de su madre, y trató con ellos y con toda la parentela de la casa del padre de su madre, diciendo:
Juec 9:3 Propusieron, pues, los hermanos de su madre todas estas razones a todos los ciudadanos de Siquem, e inclinaron su corazón a favor de Abimelec, diciendo: El es nuestro hermano.
Juec 11:1 Había en aquel tiempo un hombre de Galaad llamado Jefté, varón muy esforzado y guerrero, que tuvo por padre a Galaad y por madre a una meretriz.
Juec 11:2 Este Galaad tuvo también de su esposa legítima hijos; los cuales así que fueron grandes echaron a Jefté de casa, diciendo: No puedes ser tú heredero en casa de nuestro padre, porque has nacido de otra madre.
Juec 13:5 porque has de concebir y parir un hijo, a cuya cabeza no tocará navaja; pues ha de ser nazareo, o consagrado a Dios, desde su infancia, y desde el vientre de su madre; y él ha de comenzar a libertar a Israel del poder de los filisteos.
Juec 13:7 solamente me ha respondido: Sábete que concebirás y parirás un hijo: mira que no bebas vino, ni sidra, ni comas cosa alguna inmunda: por cuanto el niño ha de ser nazareo o consagrado a Dios desde su infancia, desde el vientre de su madre hasta el día de su muerte.
Juec 14:2 se volvió y habló a su padre y a su madre, diciendo: He visto en Tamnata una mujer entre las hijas de los filisteos, la que os ruego que me la toméis por esposa.
Juec 14:3 Le dijeron su padre y su madre: Pues qué, ¿no hay mujeres entre las hijas de tus hermanos, y en todo nuestro pueblo, que quieres tomar esposa de la nación filistea, gente incircuncisa? Dijo Sansón a su padre: Pide ésta para esposa mía: pues me ha caído en gracia.
Juec 14:5 Bajó, pues, Sansón con su padre y madre a Tamnata; y al llegar a las viñas de la ciudad, se dejó ver un león cachorro, feroz y rugiendo, el cual arremetió contra él.
Juec 14:6 Mas el espíritu del Señor entró en Sansón, y despedazó éste al león haciéndole trizas, como si hubiese sido un cabrito; y eso que no tenía arma alguna en la mano; mas no quiso manifestar nada de esto al padre, ni a la madre.
Juec 14:9 el que habiendo cogido con las manos, se lo iba comiendo por el camino; y volviendo a unirse con su padre y su madre les dio parte de él, y comieron ellos también; mas no quiso descubrirles que había tomado la miel de la boca del león.
Juec 14:16 Ella, pues, no cesaba de llorar delante de Sansón, y se le quejaba diciendo: Tú me has aborrecido, no me amas; y por eso no quieres declararme el enigma que propusiste a los jóvenes de mi pueblo. A lo que respondió: No quise decírselo a mi padre, ni a mi madre, ¿y quieres que te lo diga a ti?
Juec 16:17 Entonces descubriéndole la verdad, la dijo: Nunca jamás ha pasado navaja por mi cabeza; porque soy nazareo, esto es, consagrado a Dios desde el vientre de mi madre; si fuese rapada mi cabeza, se retiraría de mí la fortaleza mía, y perderé las fuerzas, y seré como los demás hombres.
Juec 17:2 el cual dijo a su madre: Los mil cien siclos de plata que habías apartado para ti, y acerca de los cuales jurabas, estando yo presente, que te los había hurtado, sábete que yo los tengo, y que están en mi poder. Le respondió ella: Colme el Señor a mi hijo de bendiciones.
Juec 17:3 Volvió, pues, Micás a su madre los siclos de plata. Y ella le dijo: Consagré y ofrecí con voto al Señor esta plata, para que recibiéndola mi hijo de mi mano, haga una imagen de talla y de fundición; y por lo mismo ahora te la entrego.
Juec 17:4 Luego que Micás restituyó a su madre la plata, separó ella doscientas monedas de plata, y se las dio a un platero que hiciera de ellas una imagen de talla y fundición, que se colocó en la casa de Micás.
Juec 17:7 Hubo también en este tiempo otro joven, natural de Betlehem de Judá, de esta misma estirpe de Judá por parte de madre: el cual era de la tribu de Leví, y tenía allí su habitación.
I Rey 2:5 Los que estaban antes colmados de bienes, se han alquilado por un pedazo de pan, y los que se hallaban acosados del hambre han sido plenamente saciados. La que era estéril ha venido a ser madre de muchos hijos; y la que estaba rodeada de ellos, perdió todos sus bríos.
I Rey 2:19 Y le hacía su madre una túnica pequeña; y se la llevaba los días solemnes, cuando subía con su marido a ofrecer el anual sacrificio solemne.
I Rey 15:33 Y Samuel respondió: Así como tu espada ha dejado sin hijos a tantas madres, así tu madre será otra de las mujeres que quedarán sin hijos. Y le hizo pedazos delante del Señor, en Gálgala.
I Rey 20:30 Saúl, indignado contra Jonatás, le dijo: ¡Hijo de prostituta, hijo desamorado y perverso!, ¿piensas que yo ignoro el amor que tienes al hijo de Isaí, para confusión tuya e ignominia de tu envilecida madre?
I Rey 22:4 Partió de aquí David para Masfa, que es del país de Moab, y dijo al rey de Moab: Te ruego permitas que mi padre y mi madre se queden con vosotros, hasta tanto que yo sepa lo que Dios dispone de mí.
II Rey 1:26 ¡Oh, hermano mío Jonatás!, gallardo sobremanera, y digno de ser amado más que la más amable doncella, yo lloro por ti. Del modo que una madre ama a un hijo único que tiene, así te amaba yo.
II Rey 17:25 Dio Absalón el mando del ejército a Amasa, en lugar de Joab, que seguía el partido de David. Era Amasa hijo de un varón natural de Jezrael, llamado Jetra, el cual había casado con Abigaíl, hija de Naas, padre de David, y hermano de Sarvia, madre de Joab.
II Rey 19:37 y te suplico que dejes volver a este tu siervo a morir en su patria, y a que sea sepultado junto a su padre y a su madre. Aquí tienes a mi hijo Camaán, tu siervo; éste puede ir contigo, mi rey y señor; y haz con él lo que bien te parezca.
III Rey 1:11 Por lo que dijo Natán a Betsabé, madre de Salomón : ¿No has oído que Adonías, hijo de Haggit, se ha hecho rey, sin que David nuestro señor lo sepa?
III Rey 2:13 Mas Adonías, hijo de Haggit, fue a encontrar a Betsabé, madre de Salomón , la cual le dijo: ¿Es de paz tu venida? De paz, respondió él;
III Rey 2:19 Pasó, pues, Betsabé a ver al rey Salomón para hablarle a favor de Adonías, y se levantó el rey a recibirla, y la saludó con profunda reverencia; se sentó después en su trono; y pusieron un trono o asiento real para la madre del rey, la cual se sentó a su derecha.
III Rey 2:20 Y le dijo: Una gracia bien pequeña vengo a pedirte; no me hagas el desaire de negármela. Le respondió el rey: Pide, madre mía, que no es razón que yo te disguste.
III Rey 2:22 Respondió el rey Salomón , y dijo a su madre: ¿Por qué me pides la sunamita Abisag para Adonías? Pide también para él mi reino; pues él es mi hermano mayor, y tiene de su parte al sumo sacerdote Abiatar, y a Joab hijo de Sarvia.
III Rey 3:26 Mas entonces la mujer que era madre del hijo vivo, clamó al rey (porque se le conmovieron sus entrañas por amor a su hijo): Dale, te ruego, oh señor, a ella vivo el niño, y no lo mates. Al contrario decía la otra: Ni sea mío ni tuyo, sino divídase.
III Rey 3:27 Entonces el rey pronunció esta sentencia: Dad a la primera el niño vivo, y ya no hay que matarlo, pues ella es su madre.
III Rey 11:26 Asimismo Jeroboam, hijo de Nabat, efrateo, de Sareda, criado de Salomón , cuya madre era una mujer viuda llamada Sarva, se sublevó contra el rey.
III Rey 14:21 Al mismo tiempo Roboam, hijo de Salomón , reinó en Judá. Cuarenta y un años tenía Roboam cuando empezó a reinar; y reinó diecisiete años en Jerusalén , ciudad escogida por el Señor entre todas las tribus de Israel, para establecer en ella su culto. Su madre era amonita, y llamábase Naama.
III Rey 14:31 Durmió Roboam con sus padres, y fue sepultado con ellos en la ciudad de David. Su madre se llamó Naama, la cual era de nación amonita. Lo sucedió en el reino su hijo Abiam.
III Rey 15:2 Tres años reinó éste en Jerusalén . Se llamaba su madre Maaca, hija de Abesalom o Absalón.