Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

cosas

Salm 137:2 Te adoraré en tu santo templo, y tributaré alabanzas a tu Nombre, por la misericordia y verdad de sus promesas, con que has engrandecido sobre todas las cosas tu Nombre santo.
Salm 143:15 Feliz llamaron al pueblo que goza de estas cosas. Mas yo digo: Feliz aquel pueblo que tiene al Señor por su Dios.
Salm 147:18 Pero luego despacha sus órdenes, derrite estas cosas; hace soplar su viento, y fluyen las aguas.
Salm 148:5 Porque el Señor habló, y con sólo quererlo, quedaron hechas las cosas; él mandó que existiesen y quedaron creadas.
Prov 1:22 ¿Hasta cuándo, a manera de párvulos, habéis de amar las niñerías? ¿Hasta cuándo, necios, apeteceréis las cosas que os son nocivas; e imprudentes, aborrecéis la sabiduría?
Prov 3:15 Es más apreciable que todas las riquezas; y no pueden parangonarse con ella las cosas de mayor estima.
Prov 3:21 Hijo mío, nunca pierdas de vista estas cosas: observa la ley y mis consejos;
Prov 6:16 Seis son las cosas que abomina el Señor, y otra además le es destestable.
Prov 8:6 Escuchad, porque yo voy a hablar de cosas grandes, y van a abrirse mis labios para anunciar la justicia.
Prov 8:23 Desde la eternidad tengo yo el principado de todas las cosas, desde antes de los siglos, primero que fuese hecha la tierra.
Prov 8:30 con él estaba yo disponiendo todas las cosas; y eran mis diarios placeres holgarme continuamente en su presencia,
Prov 10:32 Los labios del justo se emplean en hablar cosas agradables a Dios; y en hablar cosas perversas la boca del impío.
Prov 10:32 Los labios del justo se emplean en hablar cosas agradables a Dios; y en hablar cosas perversas la boca del impío.
Prov 16:4 Todas las cosas las ha hecho el Señor para gloria de sí mismo, y también al impío, al cual reserva, para el día del aciago.
Prov 20:10 Un peso y medida para dar, y otro peso y medida para recibir, son dos cosas que Dios abomina.
Prov 25:9 Tus cosas trátalas con tu amigo, y no descubras tus secretos a un extraño;
Prov 27:3 Pesada es la piedra y pesada es la arena; pero más pesada es todavía que estas cosas la ira del necio.
Prov 27:15 Casa con goteras en tiempo de invierno y mujer rencillosa, son dos cosas que van a la par;
Prov 28:2 Por los pecados de la tierra hay muchos príncipes en ella de corto reinado; pero será más larga la vida del príncipe, si es sabio, y adquiere la inteligencia de las cosas que aquí se enseñan.
Prov 28:5 Los malvados no se cuidan de lo que es justo; pero los que buscan al Señor, miran todas las cosas con atención.
Prov 29:11 El insensato habla luego cuanto en su pecho tiene; pero el que es sabio no se apresura, sino que reserva algunas cosas en adelante.
Prov 30:7 Dos cosas te he pedido, ¡oh Señor!, no me las niegues en lo que me resta de vida:
Prov 30:15 La sanguijuela de la concupiscencia tiene dos hijas, las cuales están diciendo siempre: Dame, dame. Tres cosas hay insaciables, o más bien cuatro, que jamás dicen ya basta:
Prov 30:18 Tres cosas son difíciles de entender, o más bien cuatro; las cuales ignoro totalmente:
Prov 30:21 Por tres cosas se perturba la tierra, o más bien por cuatro; las cuales ella no puede sufrir:
Prov 30:24 Cuatro cosas hay de las más pequeñas o ruines sobre la tierra; las cuales superan en saber a los sabios:
Prov 30:29 Tres cosas hay que andan con mucho garbo, o más bien cuatro; las cuales marchan con gran gallardía:
Ecle 1:8 Todas las cosas del mundo son difíciles: no puede el hombre comprenderlas ni explicarlas con palabras. Nunca se harta el ojo de mirar, ni el oído de oír cosas nuevas.
Ecle 1:8 Todas las cosas del mundo son difíciles: no puede el hombre comprenderlas ni explicarlas con palabras. Nunca se harta el ojo de mirar, ni el oído de oír cosas nuevas.
Ecle 1:11 No queda memoria de las cosas pasadas; mas tampoco de las que están por venir habrá memoria de aquellos que vendrán después a lo último.
Ecle 1:13 y propuse en mi corazón inquirir e investigar curiosamente acerca de todas las cosas que suceden debajo del sol. Esta ocupación penosísima ha dado Dios a los hijos de los hombres, para que trabajen en ella.
Ecle 1:16 Hice también dentro de mí mismo estas reflexiones: yo he llegado a ser grande o poderoso y he aventajado en sabiduría a todos los que florecieron antes de mí en Jerusalén ; mi espíritu ha contemplado muchas cosas sabiamente, o con gran atención, y he aprendido mucho;
Ecle 2:10 En suma, nunca negué a mis ojos nada de cuanto desearon; ni vedé a mi corazón el que gozase de todo género de deleites, y se recrease en las cosas que tenía yo preparadas; antes bien juzgué ser esta mi suerte el disfrutar de mi trabajo o industria.
Ecle 2:16 Porque no ha de ser eterna la memoria del sabio, como no lo es la del necio; y los tiempos venideros sepultarán en el olvido todas las cosas, muriendo así el docto como el ignorante.
Ecle 2:20 Por este motivo he dado de mano a todas estas cosas, y he resuelto en mi corazón no afanarme más por nada de este mundo,
Ecle 3:1 Todas las cosas tienen su tiempo, y todo lo que hay debajo del cielo pasa en el término que se le ha prescrito.
Ecle 3:11 Todas las cosas que hizo Dios son buenas, usadas a su tiempo; y el Señor entregó al mundo a las vanas disputas de los hombres; de suerte que ninguno de ellos puede entender perfectamente las obras que Dios creó desde el principio hasta el fin.
Ecle 3:14 He visto que todas las cosas que ha creado Dios, duran perpetuamente; ni podemos añadir ni quitar nada de lo que Dios hizo para ser temido y adorado.
Ecle 3:17 y he dicho luego en mi corazón: Dios ha de juzgar algún día al justo y al impío; y entonces será el tiempo de ordenar todas las cosas.
Ecle 3:20 y todo va a parar a un mismo lugar; de la tierra fueron hechas todas estas cosas, y en tierra igualmente o polvo vuelven a parar.
Ecle 4:1 Volví todavía mi atención a otras cosas, y vi los actos de opresión que se cometen debajo del sol y las lágrimas de los inocentes, sin haber nadie que los consuele; y la imposibilidad en que se hallan de resistir a la violencia, estando como están destituidos de todo socorro.
Ecle 6:6 Mas el avaro, aunque haya vivido dos mil años, si no ha podido gozar de los bienes, ¿acaso no corren todas las cosas con él a un mismo paradero?
Ecle 6:9 Mejor es el ver y gozar lo que deseas, que codiciar cosas que ignoras; pero también esto es vanidad y presunción de espíritu.
Ecle 6:12 ¿Qué necesita el hombre andar inquiriendo cosas superiores a su capacidad, cuando ignora lo que le es conducente durante su vida, en el corto número de días de su peregrinación, y en el tiempo de ella, que pasa como sombra? ¿Ni quién podrá descubrirle lo que ha de suceder después de él debajo del sol?
Ecle 7:25 Recorrió mi espíritu todas las cosas para saber y considerar, y buscar la sabiduría y la razón, para conocer asimismo la malicia de los insensatos y el error de los imprudentes;
Ecle 8:9 Todas estas cosas consideré, y apliqué mi espíritu a la meditación de cuanto se hace deba-jo del sol. Y observé que un hombre domina sobre otro hombre a veces para su propia desdicha.
Ecle 9:1 Todas estas cosas traté en mi corazón, poniendo todo cuidado en averiguarlas. Los justos y los sabios, y las obras de ellos, están en las manos de Dios; y con ello no sabe el hombre si es digno de amor o de odio;
Ecle 9:2 sino que todo se reserva incierto para lo venidero; porque ahora todas las cosas suceden igualmente al justo como al impío, al bueno y al malo, al limpio y al no limpio, al que sacrifica víctimas y al que desprecia los sacrificios: en suma, así es tratado el inocente como el pecador, y el que jura verdad como el perjuro.
Ecle 11:5 Así como ignoras por dónde viene el espíritu al cuerpo, y la manera con que se compaginan los huesos en el vientre de la que está encinta, así tampoco puedes conocer la obra de Dios, hacedor de todas las cosas.
Ecle 11:8 Pero, aunque viva un hombre muchos años, y en todos ellos contento, debe no obstante acordarse del tiempo de las tinieblas, y de la cantidad de días de la eternidad; llegados los cuales, quedarán convencidas de vanidad las cosas pasadas.