Gen 13:6
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Ni podían caber en aquel terreno, viviendo juntos; porque su hacienda era mucha, y no les era posible habitar en un mismo lugar.
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Gen 17:5
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Ni de hoy más será tu nombre Abram: sino que serás llamado Abrahán: porque te tengo destinado por padre de muchas naciones.
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Gen 39:23
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Ni el alcaide tenía cuenta de nada, fiándose de José en todo; porque el Señor le asistía y dirigía todas sus acciones.
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Ex 9:11
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Ni los hechiceros podían comparecer delante de Moisés, a causa de las úlceras que padecían, igual que todos los demás egipcios.
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Ex 11:9
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E irritado Moisés en extremo, se apartó del faraón. Entonces dijo el Señor a Moisés: Ni aún ahora ha de escucharos el faraón, a fin de que se multipliquen los prodigios en la tierra de Egipto.
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Ex 23:3
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Ni aun del pobre has de tener compasión, tratándose de la justicia.
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Ex 24:11
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Ni por eso la mano de Dios hirió a estos hijos de Israel, que habían avanzado mucho hacia el monte; sino que después de haber visto a Dios, comieron ellos y bebieron lo mismo que antes.
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Ex 34:16
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Ni desposarás a tus hijos con las hijas de ellos; no suceda que después de haber idolatrado ellas, induzcan también a tus hijos a corromperse con la idolatría.
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Ex 36:6
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Con eso mandó publicar Moisés a voz de pregonero: Ni hombre ni mujer ofrezca ya más para la fábrica del santuario. Y así cesaron de ofrecer dones,
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Ex 40:33
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Ni podía Moisés entrar en el Tabernáculo de la Alianza, cubriendo como cubría la nube todas las cosas, y brillando por todas partes la majestad del Señor: todo lo cubría la nube.
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Lev 7:24
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Ni tampoco la grasa de carne mortecina, o que ha sido presa de alguna bestia; bien que podéis guardarla para otros usos.
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Lev 10:9
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Ni tú ni tus hijos bebáis vino, ni bebida que pueda embriagar, cuando entréis en el Tabernáculo del Testimonio, so pena de muerte; así por ser esto un precepto perpetuo para vuestra posteridad,
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Lev 18:9
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Ni tendrás que ver con hermana tuya de padre o de madre, ora sea nacida en casa o fuera de ella.
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Lev 19:10
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Ni tampoco en tu viña rebuscarás los racimos y granos de uvas caídos, sino que dejarás a los pobres y forasteros que lo recojan. Yo el Señor Dios vuestro.
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Lev 19:27
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No os cortaréis vuestros cabellos en forma de corona. Ni os raeréis la barba de un modo supersticioso.
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Lev 21:12
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Ni saldrá entonces de los lugares santos, por no contaminar el santuario; por cuanto tiene sobre sí el óleo de la unción santa de su Dios. Yo el Señor.
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Núm 14:23
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no verán la tierra que prometí con juramento a sus padres: Ni uno siquiera de los que han blasfemado de mí la llegará a ver.
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Deut 1:37
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Ni es de maravillar ésta su indignación contra el pueblo; visto que aun contra mí, enojado el Señor por causa vuestra, dijo: Ni tampoco tú entrarás en esa tierra.
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Deut 1:37
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Ni es de maravillar ésta su indignación contra el pueblo; visto que aun contra mí, enojado el Señor por causa vuestra, dijo: Ni tampoco tú entrarás en esa tierra.
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Deut 4:7
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Ni hay otra nación por grande que sea que tenga tan cercanos a sí los dioses, como está cerca de vosotros el Dios nuestro, y presente a todas nuestras súplicas y oraciones.
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Deut 4:19
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Ni suceda tampoco que alzando los ojos al cielo, mirando el sol y la luna, y todos los astros del cielo cayendo en error, adores ¡oh Israel!, y reverencies las criaturas que el Señor Dios tuyo creó para el servicio de todas las gentes que viven debajo del cielo.
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Deut 7:26
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Ni meterás cosa alguna de ídolo en tu casa, porque no vengas a ser anatema, como él lo es. La detestarás como inmundicia y la abominarás como suciedad y horruras; por cuanto es un anatema.
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Deut 29:14
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Ni yo concierto esta alianza, y confirmo estos juramentos con solos vosotros,
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Deut 30:13
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Ni está situado a la otra parte del mar, para que te excuses y digas: ¿Quién de nosotros podrá atravesar los mares, y traérnosle de allá para que podamos oír y hacer lo que se nos manda?
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Deut 34:10
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Ni después se vio jamás en Israel un profeta como Moisés, con quien conversase el Señor cara a cara;
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Jos 11:22
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Ni uno siquiera dejó de la raza de los enaceos en la tierra de los hijos de Israel; sino los que quedaron en las ciudades de Gaza, y de Get y de Azoto.
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Jos 21:45
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Ni una sola palabra de todo lo que prometió darles quedó sin efecto; sino que todo se verificó puntualmente.
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Juec 1:30
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Ni tampoco Aser extirpó a los moradores de Accó y de Sidón, y de Ahalab, y de Acazib, y de Helba, y de Afec, y de Rohob;
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I Rey 14:45
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El pueblo dijo a Saúl: ¿Conque morirá Jonatás, que acaba de salvar de un modo maravilloso a Israel? Ni hablarse debe de tal cosa. Vive el Señor que no caerá en tierra ni un solo cabello de su cabeza; porque él ha obrado este día con beneplácito y asistencia de Dios. En efecto, el pueblo libertó a Jonatás de la muerte.
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II Rey 5:8
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Para lo cual había ofrecido aquel día del asalto un premio al que batiese a los jebuseos, y ganando lo alto de los muros, arrojase de allí a los ciegos y a los cojos enemigos enconados de David; de donde se dice por refrán: Ni ciego ni cojo entrarán en el templo.
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III Rey 1:6
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Ni por eso su padre lo reprendió nunca, ni le dijo: ¿Por qué haces eso? Era Adonías de hermosísima presencia, y el segundo hijo después de Absalón.
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III Rey 3:26
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Mas entonces la mujer que era madre del hijo vivo, clamó al rey (porque se le conmovieron sus entrañas por amor a su hijo): Dale, te ruego, oh señor, a ella vivo el niño, y no lo mates. Al contrario decía la otra: Ni sea mío ni tuyo, sino divídase.
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III Rey 12:16
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Viendo, pues, el pueblo que el rey no había querido atenderlo, le replicó diciendo: ¿Qué tenemos nosotros que ver con la familia de David? ¿Ni qué herencia o provecho esperamos del hijo de Isaí? Vete a tus estancias, oh Israel; y tú, oh hijo de David, gobierna ahora tu casa. Con eso Israel se retiró a sus estancias.
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IV Rey 18:30
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Ni os inspire confianza en el Señor, diciéndoos: Sin falta nos librará el Señor y no caerá esta ciudad en poder del rey de los asirios.
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II Par 7:2
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Ni podían los sacerdotes entrar dentro del templo del Señor por cuanto la majestad del Señor había llenado su templo.
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II Par 13:20
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Ni pudo Jeroboam alzar ya cabeza mientras vivió Abía; y lo hirió el Señor, y murió.
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II Par 22:9
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Y andando en busca del mismo Ocozías, que se había escondido en Samaria, se apoderó de él; y traído a su presencia, le hizo quitar la vida; y le dieron sepultura en Jerusalén , por ser hijo o nieto de Josafat, el cual había seguido al Señor con todo su corazón. Ni quedó ya esperanza alguna de que pudiese reinar nadie de la estirpe de Ocozías;
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I Esd 9:1
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Cumplidas estas cosas, acudieron a mí los príncipes de las familias, diciendo: Ni el pueblo de Israel, ni los sacerdotes y levitas se han mantenido segregados de los pueblos de estos países y de sus abominaciones, es a saber, de los cananeos, heteos y ferezeos, de los jebuseos y amonitas, y moabitas, y egipcios, y amorreos;
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Jud 11:7
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Ni se ignora lo que habló Aquior; ni menos lo que tú has dispuesto acerca de él.
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Job 25:5
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Ni aun la misma luna tiene resplandor en su presencia, y las estrellas no están limpias a sus ojos;
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Job 28:14
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El abismo de la tierra dice: No está dentro de mí; y el mar afirma: Ni conmigo.
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Job 29:22
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Ni una palabra se atrevían a añadir a las mías; y como rocío, así caían sobre ellos mis discursos.
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Salm 5:6
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Ni morará junto a ti el maligno, ni los injustos podrán permanecer delante de tus ojos.
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Salm 24:3
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Ni se burlarán de mí mis enemigos; porque ninguno que espere en ti quedará confundido.
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Salm 34:25
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No digan en sus corazones: Albricias, hemos logrado nuestro deseo. Ni digan tampoco: Le hemos devorado.
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Salm 120:6
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Ni de día el sol te quemará, ni de noche te dañará la luna.
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Ecle 6:12
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¿Qué necesita el hombre andar inquiriendo cosas superiores a su capacidad, cuando ignora lo que le es conducente durante su vida, en el corto número de días de su peregrinación, y en el tiempo de ella, que pasa como sombra? ¿Ni quién podrá descubrirle lo que ha de suceder después de él debajo del sol?
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Ecle 9:12
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Ni sabe el hombre su fin; sino que como los peces se prenden con el anzuelo, y como las aves caen en el lazo, así los hombres son sorprendidos de la adversidad, que los sobrecoge de repente.
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Sab 13:17
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Y sin embargo, ofreciéndole votos, la consulta sobre su hacienda, sobre sus hijos y sobre sus matrimonios. Ni se corre de hablar con aquello que carece de vida;
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Sab 17:11
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Ni es otra cosa el temor, sino pensar que está uno destituido de todo auxilio.
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