Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

Jeremías

Jer 28:5 En seguida el profeta Jeremías respondió al falso profeta Hananías, en presencia de los sacerdotes y de todo el pueblo que se hallaba en la casa del Señor,
Jer 28:10 Entonces el falso profeta Hananías quitó del cuello del profeta Jeremías la cadena o atadura, y la hizo pedazos.
Jer 28:12 Y se fue Jeremías profeta por su camino. Y el Señor, después que Hananías profeta hubo roto la atadura o cadena, que llevaba al cuello el profeta Jeremías, habló a éste diciendo:
Jer 28:12 Y se fue Jeremías profeta por su camino. Y el Señor, después que Hananías profeta hubo roto la atadura o cadena, que llevaba al cuello el profeta Jeremías, habló a éste diciendo:
Jer 28:13 Ve y di a Hananías: Esto dice el Señor: Tú quebraste las ataduras o correas de madera; y yo digo a Jeremías: Tú en lugar de ellas hazte otras de hierro.
Jer 28:15 Y añadió Jeremías profeta al falso profeta Hananías: Oye tú, Hananías: A ti el Señor no te ha enviado, y sin embargo, tomando su Nombre, has hecho que este pueblo confiase en la mentira.
Jer 29:1 Estas son las palabras de la carta que el profeta Jeremías envió desde Jerusalén a los ancianos que quedaban entre los cautivos transportados a Babilonia, y a los sacerdotes, y a los profetas, y a todo el pueblo transportado por Nabucodonosor desde Jerusalén a Babilonia.
Jer 29:3 Jeremías envió esta carta por mano de Elasa, hijo de Safán y de Gamarías, hijo de Helcías, despachados a Babilonia por Sedecías, rey de Judá, a Nabucodonosor, rey de Babilonia. El contenido de la carta era:
Jer 29:27 ¿cómo es, pues, que no has castigado a Jeremías, natural de Anatot, que hace de profeta entre vosotros,
Jer 29:29 Leyó, pues, el sacerdote Sofonías esta carta de Semeías delante del profeta Jeremías;
Jer 29:30 y el Señor habló entonces a Jeremías en estos términos:
Jer 30:1 Habló el Señor a Jeremías, diciendo:
Jer 32:1 Palabras que el Señor habló a Jeremías el año décimo de Sedecías, rey de Judá, que corresponde al año decimoctavo de Nabucodonosor.
Jer 32:2 (A la sazón el ejército del rey de Babilonia tenía sitiada a Jerusalén ; y el profeta Jeremías estaba preso en el patio de la cárcel que había en el palacio del rey de Judá;
Jer 32:6 Jeremías, pues, estando preso, dijo: El Señor me ha hablado, diciendo:
Jer 32:26 Entonces respondió el Señor a Jeremías, diciendo:
Jer 33:1 Segunda vez el Señor habló a Jeremías, estando éste todavía preso en el patio de la cárcel, y dijo:
Jer 33:19 Habló el Señor todavía a Jeremías, diciendo:
Jer 33:23 Habló el Señor aun a Jeremías, diciendo:
Jer 34:1 Palabras dichas por el Señor a Jeremías cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, y todo su ejército, y todos los reinos de la tierra, y pueblos que estaban bajo su dominio, hacían guerra contra Jerusalén y contra todas sus ciudades.
Jer 34:6 Todas estas cosas dijo el profeta Jeremías en Jerusalén a Sedecías, rey de Judá.
Jer 34:8 Palabras que dijo el Señor a Jeremías, después que el rey Sedecías hizo un pacto con todo el pueblo de Jerusalén , publicando
Jer 34:12 Entonces habló el Señor a Jeremías, diciendo:
Jer 35:1 Palabras que el Señor dirigió a Jeremías en tiempo de Joakim, hijo de Josías, rey de Judá, diciéndole:
Jer 35:3 Llevé, pues, conmigo a Jezonías, hijo de Jeremías, hijo de Habsanías, y a sus hermanos, y a todos sus hijos, y a la familia toda de los recabitas;
Jer 35:12 Entonces el Señor habló a Jeremías, diciendo:
Jer 35:18 Pero a la familia de los recabitas le dijo Jeremías: Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Por cuanto vosotros habéis obedecido el mandamiento de vuestro padre Jonadab, y habéis observado todas sus órdenes, y cumplido todo cuanto os prescribió;
Jer 36:1 Corriendo el año cuatro de Joakim, hijo de Josías, rey de Judá, el Señor habló a Jeremías, y le dijo:
Jer 36:4 Llamó, pues, Jeremías a Baruc, hijo de Nerías, y, dictándole Jeremías, escribió Baruc en aquel volumen todas las palabras que el Señor le dijo.
Jer 36:4 Llamó, pues, Jeremías a Baruc, hijo de Nerías, y, dictándole Jeremías, escribió Baruc en aquel volumen todas las palabras que el Señor le dijo.
Jer 36:5 Y le dio Jeremías a Baruc esta orden, diciendo: Yo estoy encerrado y no puedo ir a la casa del Señor.
Jer 36:8 Ejecutó Baruc, hijo de Nerías, puntualmente todo cuanto le ordenó Jeremías profeta, y puesto en la casa del Señor leyó en el libro las palabras del Señor.
Jer 36:10 Y entonces leyó Baruc por el libro las palabras de Jeremías en la casa del Señor, desde la habitación, que está a cargo de Gamarías, hijo de Safán, doctor de la ley, sobre el atrio de arriba, a la entrada de la puerta nueva del templo del Señor, oyéndolo todo el pueblo.
Jer 36:19 Entonces los príncipes dijeron a Baruc: Ve y escóndete tú, y Jeremías, y nadie sepa en dónde estáis.
Jer 36:26 Antes bien mandó a Jeremiel, hijo de Amelec, y a Saraías, hijo de Ezriel, y a Selemías, hijo de Abdeel, que prendiesen a Baruc, el amanuense o secretario, y al profeta Jeremías; pero el Señor los ocultó.
Jer 36:27 Después que el rey quemó el libro y las palabras que, dictando Jeremías, había escrito Baruc, habló el Señor a Jeremías profeta, diciéndole:
Jer 36:27 Después que el rey quemó el libro y las palabras que, dictando Jeremías, había escrito Baruc, habló el Señor a Jeremías profeta, diciéndole:
Jer 36:29 Y le dirás a Joakim, rey de Judá: Esto dice el Señor: Tú has quemado aquel cuaderno, diciendo a Jeremías: ¿Por qué has puesto tú por escrito en él ese vaticinio, amenazando con decir que vendrá con presteza el rey de Babilonia, y asolará esta tierra sin dejar en ella hombre ni bestia?
Jer 36:32 Tomó, pues, Jeremías otro cuaderno, y se lo dio a Baruc, hijo de Nerías, su secretario; el cual, dictándole Jeremías, escribió en él todas las palabras del libro quemado por Joakim, rey de Judá; y aun fueron añadidas muchas más cosas sobre las que antes había.
Jer 36:32 Tomó, pues, Jeremías otro cuaderno, y se lo dio a Baruc, hijo de Nerías, su secretario; el cual, dictándole Jeremías, escribió en él todas las palabras del libro quemado por Joakim, rey de Judá; y aun fueron añadidas muchas más cosas sobre las que antes había.
Jer 37:2 Y ni él, ni sus servidores, ni la gente de la tierra obedecieron a las palabras que el Señor dijo por boca del profeta Jeremías.
Jer 37:3 Y envió el rey Sedecías a Jucal, hijo de Selemías, y a Sofonías, hijo de Maasías sacerdote, a decir al profeta Jeremías: Ruega por nosotros al Señor Dios nuestro.
Jer 37:4 Andaba entonces Jeremías libremente por entre el pueblo, pues no le habían aún puesto en la cárcel.
Jer 37:6 Entonces el Señor habló al profeta Jeremías del modo siguiente:
Jer 37:12 partió Jeremías de Jerusalén para irse a la tierra de Benjamín, y para repartir allí cierta posesión en presencia de aquellos ciudadanos.
Jer 37:13 Y así que llegó a la puerta llamada de Benjamín, el que estaba por turno haciendo la guardia de la puerta, el cual se llamaba Jerías, hijo de Selemías, hijo de Hananías, asió al profeta Jeremías, diciendo: Tú huyes a los caldeos.
Jer 37:14 Es falso, respondió Jeremías, yo no hu-yo a los caldeos. Pero Jerías no lo escuchó, sino que prendió a Jeremías y lo presentó a los príncipes.
Jer 37:14 Es falso, respondió Jeremías, yo no hu-yo a los caldeos. Pero Jerías no lo escuchó, sino que prendió a Jeremías y lo presentó a los príncipes.
Jer 37:15 Irritados con eso los príncipes contra Jeremías, después de haberlo hecho azotar, lo metieron en la cárcel que había en la casa de Jonatán, secretario o escriba, por tener éste a su cargo la cárcel.
Jer 37:16 Entró, pues, Jeremías en un hondo calabozo, y en una mazmorra, donde permaneció muchos días.