Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

verdadera

Gen 40:22 y al otro le colgó en un patíbulo; de manera que se acreditó ser verdadera la exposición del intérprete.
Job 28:28 Y dijo al hombre: Mira, la verdadera sabiduría consiste en temer al Señor y honrarle, y la inteligencia en apartarse de lo malo.
Prov 9:10 El principio de la sabiduría es el temor del Señor; y la ciencia de los santos es la verdadera prudencia.
Ecle 6:8 ¿Cuál es la ventaja del sabio respecto del insensato? ¿Cuál la del pobre, sino encaminarse allá donde se halla la verdadera vida?
Sab 7:17 El mismo me dio la verdadera ciencia de las cosas existentes; para que yo conozca la constitución del mundo, y las virtudes de los elementos;
Ecli 21:13 El perfecto temor de Dios es la verdadera sabiduría y prudencia.
Ecli 45:12 Le puso el racional, o pectoral santo, tejido de oro, y de jacinto, y de púrpura, obra de un varón sabio, dotado de verdadera prudencia;
Jer 14:13 Entonces dije yo: ¡Ah!, ¡ah! ¡Señor Dios mío! ¡Ah!, que los profetas les dicen: No temáis; no veréis vosotros la espada enemiga; ni habrá hambre entre vosotros; antes bien os concederá el Señor una paz verdadera en este lugar.
Bar 3:14 Aprende, pues, dónde está la sabiduría, donde está la fortaleza, donde está la inteligencia, para que sepas así también donde está la vida larga y el sustento, y donde está la luz de los ojos del alma, y la paz o felicidad verdadera.
Bar 3:23 Asimismo los hijos de Agar, que van en busca de la prudencia o sabiduría que procede de la tierra, y los negociantes de Merra y de Temán y los autores de fábulas instructivas, y los investigadores de la sabiduría e inteligencia, desconocieron igualmente el camino de la verdadera sabiduría, y no hicieron mención de sus veredas.
Bar 4:1 La sabiduría, éste es el libro de los mandamientos de Dios, y la ley que subsiste eternamente, todos los que la abrazan, llegarán a la vida verdadera; mas aquellos que la abandonan, van a parar en la muerte.
Ezeq 3:21 Mas si hubieres reprendido al justo a fin de que no peque, y él no pecare, en verdad que tendrá él verdadera vida, porque lo reprendiste; y tú has librado tu alma.
Ezeq 18:9 si arreglare su proceder a mis mandamientos, y observare mis leyes para obrar rectamente, éste tal es varón justo, y tendrá vida verdadera y feliz, dice el Señor Dios.
Ezeq 18:19 Y vosotros decís: ¿Por qué motivo no ha pagado el hijo la pena de la iniquidad de su padre? Por esto, porque el hijo ha obrado según la ley y según la justicia; él ha observado todos mis mandamientos, y los ha cumplido; y por lo mismo tendrá vida verdadera y feliz.
Ezeq 18:21 Pero si el impío hiciere penitencia de todos los pecados que ha cometido, y observare todos mis preceptos, y obrare según derecho y justicia, tendrá vida verdadera, y no morirá.
Ezeq 18:28 porque si él entra otra vez en sí mismo, y se aparta de todas las iniquidades que ha cometido, tendrá verdadera vida y no morirá.
Ezeq 33:13 Aun cuando yo haya dicho al justo que gozará de vida verdadera, si él, confiado en su justicia, cometiere la maldad, todas sus buenas obras serán puestas en olvido, y morirá en la misma iniquidad que él ha cometido.
Ezeq 33:15 si este impío volviere la prenda al deudor, y restituyere lo que ha robado, si siguiere los mandamientos que dan vida, y no hiciere cosa injusta, él tendrá verdadera vida, y no morirá.
Ezeq 33:16 Ninguno de los pecados que cometió le será imputado, ha hecho obras de equidad y de justicia; tendrá, pues, vida verdadera.
Dan 2:9 Por lo cual si no me decís aquello que he soñado, yo no pensaré otra cosa de vosotros, sino que forjaréis también una interpretación falaz y llena de engaño para entretenerme con palabras hasta que vaya pasando el tiempo. Por tanto, decidme el sueño mío a fin de que conozca que también la interpretación que de él daréis será verdadera.
Dan 8:26 Y es verdadera esta explicación de la visión, y tendrá cumplimiento entre la tarde y la mañana del último día. Sella tú, pues, o guarda la visión, que ella se verificará pasados muchos años.
Jn 1:9 El Verbo era la luz verdadera, que cuanto es de sí alumbra a todo hombre que viene a este mundo.
Jn 15:1 Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el labrador.
Rom 2:28 Porque no está en lo exterior ser judío, ni es la verdadera circuncisión la que se hace en la carne;
Rom 2:29 sino que el verdadero judío es aquel que lo es en su interior, así como la verdadera circuncisión es la del corazón que se hace según el espíritu, y no según la letra de la ley; y este verdadero judío recibe su alabanza, no de los hombres, sino de Dios.
II Cor 3:10 Y aun lo que ha habido de glorioso por aquel lado, no ha sido una verdadera gloria si se compara con la excelente gloria de la buena nueva.
Gál 5:5 Pues nosotros solamente en virtud de la fe esperamos recibir del espíritu la verdadera justicia o santidad.
Ef 4:24 Y revestíos del hombre nuevo, que ha sido creado conforme a la imagen de Dios en justicia y santidad verdadera.
Col 1:5 en vista de la esperanza de la gloria, que os está reservada en los cielos, esperanza que habéis adquirido cuando se os anunció la verdadera doctrina del Evangelio.
II Tes 2:13 Mas nosotros debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, ¡oh hermanos amados de Dios!, por haberos Dios escogido por primicias de salvación en toda la Macedonia, mediante la santificación del espíritu y la verdadera fe que os ha dado,
I Tim 6:19 a atesorar un buen fondo para lo venidero, a fin de alcanzar la vida verdadera.
Sant 1:9 Aquel hermano que sea de baja condición ponga su gloria en la verdadera exaltación suya;
Sant 3:18 Y es que los pacíficos son los que siembran en paz los frutos de la verdadera justicia, o santidad.
I Ped 5:12 Por Silvano, el cual es, a mi juicio, un fiel hermano, os he escrito brevemente, declarándoos y protestándoos, que la verdadera gracia de Dios, o la verdadera religión, es ésta, en que vosotros permanecéis constantes.
I Ped 5:12 Por Silvano, el cual es, a mi juicio, un fiel hermano, os he escrito brevemente, declarándoos y protestándoos, que la verdadera gracia de Dios, o la verdadera religión, es ésta, en que vosotros permanecéis constantes.
I Jn 2:8 y no obstante, yo os digo que el mandamiento de que os hablo, que es el de la caridad, es un mandamiento nuevo, el cual es verdadero en sí mismo y en vosotros; porque las tinieblas desaparecieron y luce ya la luz verdadera.
I Jn 4:2 En esto se conoce el espíritu de Dios, todo espíritu, que confiesa que Jesucristo vino al mundo en carne verdadera, es de Dios;
II Jn 1:7 Puesto que se han descubierto en el mundo muchos impostores que no confiesan que Jesucristo haya venido en carne verdadera; negar esto es ser un impostor y un anticristo.