Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

veas

Núm 23:13 Dijo, pues, Balac: Ven conmigo a otro lugar de donde veas una parte de Israel, y no puedas ver todo el campamento; desde allí le maldecirás.
Deut 4:32 Infórmate de lo que ha pasado de un polo del cielo al otro, desde los tiempos más remotos que te han precedido, desde que Dios creó al hombre sobre la tierra, y veas si alguna vez ha sucedido una cosa como ésta; o si jamás se ha dicho
Deut 22:1 Cuando veas que un buey o una oveja de tu prójimo andan perdidos, no te pasarás de largo, sino que los conducirás a tu hermano.
Jud 6:17 diciendo: El Dios de nuestros padres, cuyo poder has publicado, ése mismo trocará tu suerte de tal manera que veas tú antes la ruina de los enemigos.
Salm 127:6 y veas a los hijos de tus hijos y la paz en Israel.
Prov 4:5 Procura adquirir la sabiduría, veas de alcanzar la prudencia, y no te olvides ni apartes las palabras de mi boca.
Prov 20:13 No seas amigo del sueño, para que no te veas oprimido en la indigencia; abre tus ojos, desvélate, y te sobrará pan.
Ecli 11:4 No te gloríes jamás por el traje de distinción que llevas, y no te engrías cuando te veas ensalzado en alto puesto; porque sólo las obras del Altísimo son las admirables, y gloriosas son ellas y ocultas, y nunca bien conocidas.
Isa 23:12 Y ha dicho: No te vanagloriarás ya más, cuando te veas afrentada, ¡oh virgen hija de Sidón!; levántate, navega a Cetim, y allí tampoco tendrás reposo.
Isa 58:7 ¿Que partas tu pan con el hambriento, y que a los pobres y a los que no tienen hogar los acojas en tu casa, y vistas al que veas desnudo, y no desprecies tu propia carne o a tu prójimo?
Ezeq 26:19 Porque esto dice el Señor Dios: Cuando te haya convertido en un desierto, como las ciudades despobladas, y haya enviado sobre ti un diluvio de desastres, y te veas sumergida en un abismo de aguas,
Lc 14:9 y sobreviniendo el que a ti y a él os convidó, te diga: Has lugar a éste; y entonces con sonrojo te veas precisado a ponerte el último.
Apoc 3:18 Te aconsejo que compres de mí el oro afinado en el fuego, con que te hagas rico, y te vistas de ropas blancas, y no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio para que veas.