Ex 11:7
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Pero entre todos los hijos de Israel, desde el hombre hasta la bestia, no chistará siquiera un perro; para que conozcáis cuán milagrosa distinción hace el Señor entre egipcios e israelitas.
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Deut 23:18
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No ofrecerás en la casa de tu Señor Dios para cumplir cualquier voto que hayas hecho la paga de la prostitución, ni el precio del perro, por ser el uno y el otro abominable en la presencia del Señor Dios tuyo.
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I Rey 17:43
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y le dijo: ¿Soy yo acaso algún perro para que vengas contra mí con un palo? Por lo que maldijo el filisteo a David, jurando por sus dioses.
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I Rey 24:14
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Pero ¿a quién persigues, oh rey de Israel? ¿Quién es al que tú persigues? Persigues a un perro muerto, a una pulga.
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I Rey 25:22
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Trate el Señor con toda su severidad a los enemigos de David, como juro yo que no dejaré de aquí a mañana cosa con vida de todo lo perteneciente a Nabal, ni un perro siquiera.
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I Rey 25:34
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Que si no, juro, por el Señor Dios de Israel, el cual me ha prohibido hacerte daño, que a no venir tú tan presto a encontrarme, no hubiera quedado en casa de Nabal, de hoy a mañana, cosa con vida, ni siquiera un perro.
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II Rey 3:8
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¿Cómo te has acercado a la mujer secundaria, viuda de mi padre? Mas él, sumamente indignado por esas palabras de Isboset, respondió: ¿Acaso valgo yo tan poco como un vil perro contra la tribu de Judá; yo que he sostenido la casa de Saúl, tu padre, y a sus hermanos y allegados, y no he querido entregarte en manos de David? Y en pago de esto, ¿vas buscando ahora cómo hacerme cargos por razón de una mujer?
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II Rey 9:8
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Mifiboset, haciéndole profunda reverencia, dijo: ¿Quién soy yo, siervo tuyo, para que te hayas dignado poner los ojos en un perro muerto cual soy yo?
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II Rey 16:9
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Entonces Abisai, hijo de Sarvia, dijo al rey: Y ¿por qué ese perro muerto ha de estar maldiciendo al rey mi señor? Iré y le cortaré la cabeza.
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III Rey 16:11
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Luego que llegó a ser rey, y se hubo sentado en el trono, exterminó toda la casa de Baasa, y todos sus deudos y amigos, no dejando vivo ni siquiera un perro.
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IV Rey 8:13
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Replicó Hazael: Pues, ¿soy yo, siervo tuyo, otra cosa más que un perro muerto, para que pueda ejecutar cosas tan grandes y terribles? A lo que respondió Eliseo: El Señor me ha manifestado que tú serás rey de Siria.
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Tob 6:1
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Partió, pues, Tobías, al cual fue siguiendo el perro; y paró en la primera posada junto al río Tigris.
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Tob 11:9
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En esto el perro que les había seguido en el viaje, echó a correr delante; y como si viniese a traer una buena nueva, se alegraba y hacía fiestas meneando la cola.
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Jud 11:15
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el cual me dirá cuándo querrá castigarlos por su pecado, y yo vendré a avisártelo, de suerte que yo misma te conduciré por medio de Jerusalén , y verás en tu presencia a todo el pueblo de Israel como ovejas sin pastor, sin que ni un perro siquiera ladre contra ti.
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Prov 26:11
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Como el perro que vuelve a lo que ha vomitado; así es el imprudente que repite o recae en su necedad.
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Prov 26:17
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El que yendo de paso se mezcla acalorado en riñas de otros, corre peligro que le suceda lo que a quien agarra por las orejas a un perro irritado.
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Ecle 9:4
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No hay hombre que viva siempre, ni que pueda presumirse esto. Con todo, hasta el perro, que vive, vale siempre más que el mismo león ya muerto;
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Ecli 13:22
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¿Qué comunicación puede haber entre un hombre santo y un perro? ¿O cuál unión entre un rico y un pobre?
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Isa 66:3
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Aquel que me inmola un buey es como el que degollase un hombre; el que sacrifica un cordero, es como quien descabezase un perro; el que hace una ofrenda, es como quien me presentase la sangre de cerdo; el que se acuerda de ofrecerme incienso, es como quien bendijese u honrase a un ídolo. En efecto, todas estas cosas prohibidas en mi ley han elegido ellos, según sus antojos; y su alma ha puesto sus delicias en estas abominaciones.
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II Ped 2:22
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cumpliéndose en ellos lo que suele significarse por aquel refrán verdadero: Se volvió el perro a comer lo que vomitó; y: La marrana lavada, a revolcarse en el cieno.
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