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Deut 32:35
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Sí: mía es la venganza, y yo les daré el pago a su tiempo, para derrocar su pie: cerca está ya el día de su perdición, y ese plazo viene volando.
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II Par 22:4
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Hizo, pues, lo malo en la presencia del Señor como la casa de Acab; de la cual escogió sus consejeros después de la muerte de su padre, para perdición suya.
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II Par 30:7
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No queráis imitar a vuestros padres y hermanos, que se alejaron del Señor Dios de sus padres, y el Señor los abandonó a la perdición, como vosotros mismos estáis viendo.
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Tob 3:22
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Porque tú no te deleitas en nuestra perdición; puesto que después de la tempestad das luego la bonanza, y tras las lágrimas y suspiros infundes el júbilo o alegría.
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Tob 4:14
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No permitas jamás que la soberbia domine tu corazón o tus palabras; porque de ella tomó principio toda especie de perdición.
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Jud 8:27
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antes bien, considerando que estos castigos son todavía menores que nuestros pecados, creamos que los azotes del Señor, con que como esclavos somos corregidos, nos han venido para enmienda nuestra, y no para nuestra perdición.
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Job 26:6
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El infierno está patente a sus ojos, y está encubierto a su vista el abismo de la perdición.
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Job 28:22
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La perdición y la muerte dijeron: A nuestros oídos llegó la fama de ella.
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Job 31:3
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Pues qué, ¿acaso no está establecida la perdición para los malvados, y el desheredamiento para los que cometen el pecado?
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Salm 1:6
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Porque conoce el Señor y premia el proceder de los justos; mas la senda de los impíos terminará en la perdición.
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Salm 9:16
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Manifestaré mi júbilo por haberme tú salvado; las gentes que me perseguían han quedado sumidas en la perdición que habían preparado contra mí. En el lazo mismo, que me tenían ocultamente armado, ha quedado preso su pie.
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Salm 48:14
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Este proceder suyo es causa de su perdición; y con todo habrá venideros que se complacerán en alabarle.
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Salm 54:24
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Al contrario tú, ¡oh Dios!, dejarás caer a aquellos en el pozo de la perdición. Los hombres sanguinarios y alevosos no llegarán a la mitad de sus días; pero yo, ¡oh Señor!, tengo puesta en ti mi esperanza.
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Salm 58:14
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En el día de la desolación serán enviados a la perdición, por la ira de Dios, que los consumirá, y quedarán exterminados. Entonces sabrán que Dios reinará sobre Jacob hasta en los últimos términos de la tierra.
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Salm 68:23
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En justo pago se les convierta su mesa en lazo de perdición y ruina.
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Salm 72:27
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Así es que los que de ti se alejan, perecerán; arrojarás a la perdición a todos aquellos que te quebrantan la fe.
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Salm 106:20
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Envió su palabra, y los sanó, y los salvó de su perdición.
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Prov 1:19
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Así que el camino o la conducta que siguen todos los avarientos, lleva arrebatadamente sus almas a la perdición.
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Prov 1:26
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yo también miraré con risa vuestra perdición, y me mofaré de vosotros cuando os sobrevenga lo que temíais.
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Prov 1:32
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La indocilidad causará a los ignorantes su perdición; y aquella que neciamente creen ser su felicidad, será su ruina.
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Prov 4:27
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No tuerzas ni a la diestra ni a la siniestra; retira tu pie de todo mal paso; porque ama el Señor los caminos que están a la derecha; pero los que caen a la siniestra son caminos de perdición. Mas él hará que sea recto tu camino, y que avances felizmente en tu viaje.
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Prov 6:15
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De repente le vendrá a éste su perdición, y súbitamente quedará hecho añicos, sin que tenga ya remedio.
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Prov 6:32
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Pero el adúltero acarrea con su insensatez la perdición a su alma:
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Prov 11:3
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La sencillez servirá como de guía a los justos; y la doblez acarreará a los pecadores su perdición.
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Prov 11:10
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En la prosperidad de los justos se alegrará la ciudad: y la perdición de los impíos se celebrará con canciones.
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Prov 15:11
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El profundo infierno, y lugar de perdición están patentes al Señor: ¿Cuánto más los corazones de los hombres?
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Prov 24:22
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porque de repente se desplomará sobre ellos la perdición. ¿Y quién sabe los suplicios que padecerán?
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Sab 1:12
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No os afanéis en acarrearos la muerte con el descamino de vuestra vida; ni os granjeéis la perdición con las obras de vuestras manos.
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Sab 1:13
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Porque no es Dios quien hizo la muerte, ni se complace en la perdición de los vivientes.
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Sab 5:7
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Nos hemos fatigado en seguir la carrera de la iniquidad y de la perdición; hemos andado por senderos fragosos, sin conocer el camino del Señor.
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Ecli 9:13
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ni la desafíes con brindis a quién de los dos bebe más vino; no sea que tu corazón se incline hacia ella, y a costa de tu vida caigas en la perdición.
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Ecli 20:27
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Menos malo es el ladrón que el hombre que miente a todas horas; aunque ambos tendrán por herencia la perdición."
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Ecli 22:33
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¿Quién pondrá un candado a mi boca, y sobre mis labios un sello inviolable para que no me deslice por su culpa y no sea mi lengua la perdición mía?"
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Ecli 23:21
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Dos especies de personas pecan con frecuencia, y otra tercera provoca la ira y la perdición:
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Ecli 26:27
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y el hombre que de la justicia se vuelve al pecado, al cual destina Dios a la perdición.
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Ecli 31:6
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Muchos han caído en el precipicio a causa del oro, cuyo resplandor fue su perdición.
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Ecli 31:30
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A los buenos bebedores no los provoques a beber; porque la perdición de muchos del vino viene."
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Ecli 36:11
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Devorados sean por el fuego de la ira aquellos que escapan; y hallen su perdición los que tanto maltratan a tu pueblo.
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Ecli 41:13
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Todo aquello que de la tierra procede, en tierra se convertirá; así los impíos pasarán de la maldición a la perdición eterna.
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Ecli 50:4
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Este cuidó bien de su pueblo, y lo libró de la perdición.
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Ecli 51:3
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y has librado mi cuerpo de la perdición, y del lazo de la lengua maligna, y de los labios que urden la mentira; y delante de mis acusadores te has manifestado mi defensor.
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Ecli 51:16
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y me libraste de la perdición, y me sacaste a salvo en el tiempo calamitoso.
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Isa 38:17
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Ved cómo se ha cambiado en paz mi amarguísima aflicción; y tú, ¡oh Señor! has librado de la perdición a mi alma; has arrojado tras de tus espaldas todos mis pecados.
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Jer 13:21
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¿Qué dirás cuando Dios te llame a tomar cuentas puesto que tú amaestraste contra ti a los enemigos, y los instruiste para tu perdición. ¡Cómo no te han de asaltar dolores, semejantes a los de una mujer que está de parto!
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Jer 18:17
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Porque como viento abrasador los dispersaré delante de sus enemigos; les volveré las espaldas, y no mi benigno rostro, el día de su perdición.
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Jer 19:7
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Y en este sitio disiparé yo los designios de los habitantes de Judá y de Jerusalén ; exterminaré a éstos con la espada, a la vista de sus enemigos, y por mano de aquellos que buscan su perdición, y daré sus cadáveres en pasto a las aves del cielo y a las bestias de la tierra.
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Jer 44:30
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Esto dice el Señor: He aquí que yo entregaré al faraón Efre, o Vafres, rey de Egipto, en poder de sus enemigos, en manos de aquellos que buscan su perdición, así como entregué a Sedecías, rey de Judá, en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, enemigo suyo, que buscaba cómo perderlo.
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Bar 4:25
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Hijos, soportad con paciencia el castigo que ha descargado sobre vosotros. Porque, ¡oh Israel!, tu enemigo te ha perseguido; pero en breve verás tú su perdición, y pondrás tu pie sobre su cuello.
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Ezeq 3:18
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Si diciendo yo al impío: Morirás sin remedio; tú no se lo comunicas, ni le hablas, a fin de que se retraiga de su impío proceder y viva, aquel impío morirá en su pecado; pero yo te pediré a ti cuenta de su sangre o perdición.
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Ezeq 18:30
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Por tanto, yo juzgaré, dice el Señor Dios, ¡oh casa de Israel!, a cada cual según sus obras. Convertíos y haced penitencia de todas vuestras maldades; y no serán éstas causa de vuestra perdición.
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