Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

pelea

Ex 14:25 y trastornó las ruedas de los carros, los cuales caían precipitados al profundo del mar. Por lo que dijeron los egipcios: Huyamos de Israel, pues el Señor pelea por él contra nosotros.
Juec 1:3 Dijo entonces Judá a la tribu de Simeón su hermano: Ven conmigo a la tierra que me ha cabido en suerte, y pelea contra el cananeo, que yo iré también después contigo a la conquista de la tuya: y Simeón le acompañó.
Juec 9:38 Le dijo Zebul: ¿Dónde está ahora aquel tu orgullo con que decías: ¿Quién es Abimelec para que hayamos de estarle sujetos? ¿No es ésa la gente que despreciabas? Sal y pelea contra él.
I Rey 15:18 El Señor te envió a esta empresa, diciendo: Anda, y pasa a cuchillo a los perversos amalecitas, y pelea con ellos hasta su total exterminio.
I Rey 18:17 Por lo que dijo Saúl a David: He aquí a Merob, mi hija mayor, voy a dártela por esposa. Tú sobre todo sé valiente, y pelea al servicio del Señor. Al mismo tiempo decía Saúl para consigo: No sea yo el que lo mate; sino sean los filisteos los que lo hagan.
III Rey 22:30 Y dijo el rey de Israel a Josafat: Toma tus armas y entra en batalla, vestido de tus ropas. Mas el rey de Israel mudó de traje, y entró disfrazado en la pelea.
II Par 32:8 Pues él tiene consigo un brazo de carne; pero con nosotros está el Señor Dios nuestro, el cual es nuestro defensor, y pelea por nosotros. Al oír el pueblo estas palabras de Ezequías , rey de Judá, cobró gran aliento.
Job 41:8 Pon tu mano sobre él, tócalo solamente, y te quedará memoria eterna de tal pelea, y no volverás a hablar más de ella.
Salm 17:35 Que adiestra mis manos para la pelea. Tú eres, ¡oh Dios mío!, el que fortaleciste mis brazos como arcos de bronce,
Salm 143:1 Salmo de David contra Goliath. Bendito sea el Señor Dios mío, que adiestra mis manos para la pelea y mis dedos para manejar las armas.
Ezeq 13:5 Vosotros no habéis hecho frente, ni os habéis opuesto como muro a favor de la casa de Israel, para sostener la pelea en el día del Señor.
I Mac 9:17 y encendiéndose con más vigor la pelea, perdieron muchos la vida de una y otra parte.
II Mac 12:36 Fatigados ya los soldados que mandaba Esdrín con tan larga pelea, invocó Judas al Señor para que protegiese y dirigiese el combate;
Ef 6:12 Porque no es nuestra pelea solamente contra hombres de carne y sangre, sino contra los príncipes y potestades, contra los adalides de estas tinieblas del mundo, contra los espíritus malignos esparcidos en los aires.