Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

paño

Ex 39:9 cuya forma era cuadrangular, el paño era doblado y de la medida de un palmo.
Núm 4:6 y pondrán además una sobrecubierta de pieles moradas, extendiendo encima de todo un paño de color de jacinto; y acomodarán las varas.
Núm 4:7 Envolverán asimismo la mesa de los panes de la proposición en un paño de color de jacinto, metiendo con ella los incensarios y las navetas, las copas y las tazas, para derramar las libaciones; los panes siempre estarán sobre la mesa.
Núm 4:8 Y extenderán por encima un paño de grana, sobre el cual pondrán asimismo una cubierta de pieles moradas, y acomodarán las varas.
Núm 4:9 Tomarán también un paño de color de jacinto con que cubrirán el candelero, las lamparillas, y sus atizadores, y despabiladeras, y todas las vasijas del aceite, y cuanto sirve para aderezar las lámparas;
Núm 4:11 Y de la misma suerte envolverán el altar de oro o de los perfumes, en un paño de color de jacinto, y extenderán encima una cubierta de pieles moradas y acomodarán las varas.
Núm 4:12 Todos los vasos consagrados al ministerio del santuario los envolverán en un paño de color de jacinto, y extenderán encima una cubierta de pieles moradas, y acomodarán las varas.
I Rey 21:10 Le dijo el sumo sacerdote: Aquí tienes la espada del filisteo Goliat a quien tú mataste en el valle del Terebinto; envuelta está en su paño detrás del efod; si quieres llevarla, tómala, pues aquí no hay sino ésta. Le dijo David: No hay otra comparable a ella; dámela.
IV Rey 8:15 Llegado el día siguiente tomó Hazael un paño acolchado, lo empapó en agua, y lo extendió sobre el rostro del rey, el cual murió; y reinó Hazael en su lugar.
Est 14:16 Tú conoces mi necesidad, y que abomino el soberbio distintivo de mi gloria que llevo sobre mi cabeza en los días de gala y lucimiento, y que antes bien me da asco, cual paño de una menstruosa, y que nunca me lo pongo en los días de mi retiro y vida privada.
Jer 38:11 Tomando, pues, consigo Abdemelec los hombres, entró en el palacio del rey en una pieza subterránea que estaba debajo de la tesorería, y cogió de allí unas ropas viejas y trozos de paño medio consumidos y los echó a Jeremías en la cisterna por medio de cordeles.
Mt 9:16 Nadie echa un remiendo de paño nuevo a un vestido viejo; de otra suerte, rasga lo nuevo parte de lo viejo, y se hace mayor la rotura.
Mc 2:21 Nadie cose un retazo de paño nuevo en un vestido viejo; de otra suerte, el remiendo nuevo rasga lo viejo, y se hace mayor el daño.
Lc 5:36 Poníales también esta comparación: Nadie a un vestido viejo le echa un remedio de paño nuevo; porque, fuera de que el retazo nuevo rasga lo viejo, no cae bien el remiendo nuevo en el vestido viejo.