Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

necesitado

Ex 22:25 Si prestares dinero al necesitado de mi pueblo, que mora contigo, no le has de apremiar como un inspector, ni oprimirle con usuras.
III Rey 9:11 (suministrándole Hiram, rey de Tiro, las maderas de cedro y abeto, y el oro, todo cuanto había necesitado), entonces Salomón dio a Hiram veinte poblaciones en tierra de Galilea.
Salm 34:10 De todas las coyunturas de mis huesos saldrán voces que digan: ¡Oh Señor!, ¿quién hay semejante a ti, que libras al desvalido de las manos de los que pueden más que él, al necesitado y al pobre de los que lo despojan?
Salm 36:21 Tomará prestado el pecador, y no pagará; pero el justo es compasivo, y dará al necesitado.
Salm 40:2 Bienaventurado aquel que piensa en el necesitado y en el pobre; el Señor le librará en el día aciago.
Salm 81:3 Haced justicia al necesitado y al huérfano; atended la razón del abatido y del pobre.
Salm 85:1 Oracion del mismo David. Inclina, Señor, tu oído a mis ruegos, y escúchame, porque me hallo afligido y necesitado.
Salm 108:22 Líbrame, porque soy pobre y necesitado; y turbado está interiormente mi corazón.
Prov 14:31 Quien insulta al necesitado, insulta a su Creador, así como le honra quien se compadece del pobre.
Prov 19:22 El hombre necesitado es compasivo; y así es mejor ser pobre que mentiroso.
Prov 28:27 El que da al pobre, nunca estará necesitado; pero quien menosprecia al que pide rogando, padecerá indigencia.
Prov 31:20 Abre su mano para socorrer al mendigo y extiende sus brazos para amparar al necesitado.
Ecli 11:12 Al contrario, hay otro lánguido y necesitado de amparo, muy falto de fuerzas y abundante de miseria, pero piadoso;
Ecli 41:3 ¡Oh muerte!, tu sentencia es dulce al hombre necesitado y falto de fuerzas,
Ezeq 16:49 He aquí cuál fue la maldad de Sodoma tu hermana: La soberbia, la hartura o gula, y la abundancia o lujo, y la ociosidad de ella y de sus hijas, y no socorrer al necesitado y al pobre.
Ezeq 22:29 Las gentes de esta tierra forjaban calumnias, y robaban con violencia lo ajeno, afligían al necesitado y al pobre, y oprimían al extranjero con imposturas e injusticias.
II Cor 11:9 Y estando yo en vuestra patria, y necesitado, a nadie no obstante fui gravoso, proveyéndome de lo que me faltaba los hermanos venidos de Macedonia; y en todas ocasiones me guardé de serviros de carga, y me guardaré en adelante.
Ef 4:28 El que hurtaba o defraudaba al prójimo, no hurte ya; antes bien trabaje, ocupándose con sus manos en algún ejercicio honesto, para tener con qué subsistir y dar al necesitado.