Ezeq 18:21
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Pero si el impío hiciere penitencia de todos los pecados que ha cometido, y observare todos mis preceptos, y obrare según derecho y justicia, tendrá vida verdadera, y no morirá.
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Ezeq 18:23
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¿Acaso quiero yo la muerte del impío, dice el Señor Dios, y no antes bien que se convierta de su mal proceder, y viva?
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Ezeq 18:24
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Pero si el justo se desviare de su justicia, y cometiere la maldad según las abominaciones que suele hacer el impío, ¿por ventura tendrá él vida? Todas cuantas obras buenas había él hecho, se echarán en olvido; por la prevaricación en que ha caído y por el pecado que ha cometido, por eso morirá.
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Ezeq 18:27
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Y si el impío se apartare de la impiedad que obró, y procediere con rectitud y justicia, dará él mismo la vida a su alma;
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Ezeq 21:3
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Y dirás a la tierra de Israel: Esto dice el Señor Dios: Mira que yo vengo contra ti, y desenvainaré mi espada, y mataré en ti al justo y al impío.
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Ezeq 21:4
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Y por cuanto he de matar en ti al justo y al impío, por eso saldrá mi espada de su vaina contra todo hombre, desde el mediodía hasta el septentrión,
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Ezeq 21:25
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Mas tú, ¡oh profano e impío caudillo de Israel!, para quien ha llegado el día señalado del castigo de tu iniquidad,
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Ezeq 33:8
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Si cuando yo digo al impío: Impío, tú morirás de mala muerte, no hablares al impío para que se aparte de su mala vida, morirá el impío por su iniquidad, pero a ti te pediré cuenta de su sangre.
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Ezeq 33:8
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Si cuando yo digo al impío: Impío, tú morirás de mala muerte, no hablares al impío para que se aparte de su mala vida, morirá el impío por su iniquidad, pero a ti te pediré cuenta de su sangre.
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Ezeq 33:8
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Si cuando yo digo al impío: Impío, tú morirás de mala muerte, no hablares al impío para que se aparte de su mala vida, morirá el impío por su iniquidad, pero a ti te pediré cuenta de su sangre.
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Ezeq 33:9
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Mas si amonestando tú al impío, para que se convierta, no dejare él su mala vida, morirá el impío por su iniquidad pero tu alma no será responsable de su muerte.
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Ezeq 33:9
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Mas si amonestando tú al impío, para que se convierta, no dejare él su mala vida, morirá el impío por su iniquidad pero tu alma no será responsable de su muerte.
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Ezeq 33:11
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Pero diles a ésos: Yo juro, dice el Señor Dios, que no quiero la muerte del impío, sino que se convierta de su mal proceder y viva. Convertíos, convertíos de vuestros perversos caminos; ¿y por qué habéis de morir, oh vosotros los de la casa de Israel?
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Ezeq 33:12
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Tú, pues, ¡oh hijo de hombre!, diles a los hijos de tu pueblo: En cualquier ocasión en que el justo pecare, no podrá librarle su justicia, y en cualquier ocasión en que el impío se convirtiere de su impiedad, la impiedad no le dañará; y el justo, siempre y cuando pecare, no podrá ya vivir por su justicia.
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Ezeq 33:14
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Mas si yo dijere al impío: Tú morirás de mala muerte, y él hiciere penitencia de sus pecados, y practicare obras buenas y justas,
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Ezeq 33:15
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si este impío volviere la prenda al deudor, y restituyere lo que ha robado, si siguiere los mandamientos que dan vida, y no hiciere cosa injusta, él tendrá verdadera vida, y no morirá.
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Ezeq 33:19
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Y asimismo siempre que el impío abandonare su impiedad, e hiciere obras de equidad y de justicia, hallará en ellas la vida.
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Miq 6:10
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Aún están en casa del impío, como fuego devorador, los tesoros inicuamente adquiridos; y llena está de la ira del Señor la medida corta de que usaba.
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Miq 6:16
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Porque tú has observado lo que te enseñó tu impío rey Amri y todos los usos de la casa de Acab, y has seguido todos sus antojos, para que yo te abandonase, ¡oh Jerusalén !, a la perdición, y al escarnio a tus moradores. Y vosotros, ¡oh poderosos!, llevaréis el castigo del oprobio causado al pueblo mío.
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Hab 1:4
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Por eso la ley se ve burlada, y no se hace justicia, por cuanto el impío puede más que el justo, por eso salen corrompidos los juicios.
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Hab 1:13
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Limpios son siempre tus ojos, no puedes tú ver el mal ni podrías sufrir delante de ti la iniquidad. ¿Por qué, pues, te quedas contemplando a aquellos que obran mal, y callas cuando el impío está tragándose al que es más justo que él?
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Hab 3:13
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Saliste para salvar a tu pueblo, para salvarlo por medio de tu Mesías. Heriste la cabeza de la casa del impío, descubriste sus cimientos de arriba abajo.
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Mal 1:4
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Que si los idumeos dijeren: Destruidos hemos sido, pero volveremos a restaurar nuestras ruinas; he aquí lo que dice el Señor de los ejércitos: Ellos edificarán, y yo destruiré; y serán llamados país impío, pueblo contra el cual está el Señor indignado para siempre.
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Mal 3:18
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Y vosotros cambiaréis entonces de parecer, y conoceréis la diferencia que hay entre el justo y el impío, y entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.
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I Mac 7:9
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a reconocer las vejaciones que había hecho Judas, confiriendo además el sumo sacerdocio al impío Alcimo, al cual dio orden de castigar a los hijos de Israel.
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II Mac 3:11
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y que entre lo que había denunciado el impío Simón había una parte que era de Hircano Tobías, varón muy eminente, y el todo eran cuatrocientos talentos de plata y doscientos de oro;
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II Mac 4:13
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siendo esto no un principio , sino un progreso y consumación de la vida pagana y extranjera, introducida con detestable e inaudita maldad por el no sacerdote, sino intruso e impío Jasón.
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II Mac 8:14
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Pero otros vendían cuanto les había quedado, y a una rogaban al Señor que los librase del impío Nicanor, que aun antes de haberse acercado a ellos los tenía ya vendidos;
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II Mac 9:9
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pues hervía de gusanos el cuerpo de este impío, y aún viviendo se le caían a pedazos las carnes en medio de los dolores, y ni sus tropas podían sufrir el mal olor y fetidez que de sí despedía.
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II Mac 10:10
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Mas ahora referimos los hechos de Eupátor, hijo del impío Antíoco, recopilando los males que ocasionaron sus guerras.
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II Mac 15:33
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mandó luego que la lengua de este impío fuese cortada en menudos trozos, y arrojada después para pasto de las aves; y que se colgara enfrente del templo la mano de aquel insensato.
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Mc 6:26
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El rey se puso triste; mas en atención al impío juramento, y a los que estaban con él a la mesa, no quiso disgustarla,
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Rom 4:5
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Al contrario, cuando a alguno, sin hacer las obras exteriores, o de la ley, con creer en aquel que justifica al impío, se le imputa su fe por justicia, es éste un don gratuito según el beneplácito de la gracia de Dios.
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I Ped 4:18
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Que si el justo a duras penas se salvará, ¿a dónde irán el impío y el pecador?
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