Ex 21:12
|
Quien hiriere a un hombre, matándole voluntariamente, muera sin remisión.
|
Ex 21:15
|
Quien hiriere a su padre o madre, muera sin remedio.
|
Ex 21:18
|
Si riñeren entre sí dos hombres, y el uno hiriere a su prójimo con piedra o con el puño, y éste no muriere, pero tuviere que guardar cama;
|
Ex 21:20
|
Quien hiriere a palos a su esclavo o esclava, si murieren entre sus manos, será reo de crimen.
|
Ex 21:22
|
Si armando pendencia algunos hombres, uno de ellos hiriere a una mujer preñada, y ésta abortase, pero no muriese, resarcirá el daño, según lo que pidiere el marido de la mujer y juzgaren los árbitros.
|
Ex 21:26
|
Si alguno hiriere en el ojo a su esclavo o esclava y los dejare tuertos, les dará libertad por causa del ojo que les sacó.
|
Ex 21:35
|
Si el buey de alguno hiriere al buey de otro y éste muriere, venderán el buey vivo y partirán su precio, y la carne del muerto la repartirán entre sí.
|
Lev 24:17
|
Quien hiriere a un hombre y le matare, muera irremisiblemente.
|
Lev 24:18
|
Quien hiriere o matare a un animal, restituirá otro equivalente, a saber, animal por animal.
|
Lev 24:21
|
Quien hiriere de muerte a un jumento, pagará otro; quien matare a un hombre, será ajusticiado.
|
Núm 35:16
|
Si alguno hiriere con hierro, y muriere el herido, será reo de homicidio, y por tanto será muerto.
|
Deut 19:4
|
Esta será la ley o calidad del homicida fugitivo, cuya vida debe salvarse: el que hiriere a su prójimo sin advertirlo, y de quien no consta que tuviese el día antes o el otro más allá ningún rencor contra él;
|
Jos 6:5
|
Y cuando se oiga su sonido más continuado, y después más cortado e hiriere vuestros oídos, todo el pueblo gritará a una con grandísima algazara, y caerán hasta los cimientos los muros de la ciudad por todas partes, y cada uno entrará por la que tuviere delante.
|
Mt 5:39
|
Yo os digo, que no hagáis resistencia al agravio; antes si alguno te hiriere en la mejilla derecha, vuélvele también la otra;
|
Lc 6:29
|
A quien te hiriere en una mejilla, preséntale asimismo la otra; y a quien te quitare la capa, no le impidas que se te lleve aun la túnica.
|