Concordancia

Sagrada Biblia (Torres Amat)

heridos

Núm 14:37 fueron heridos de muerte a la presencia del Señor.
Núm 16:29 Si éstos que me acusan murieren de la muerte ordinaria de los hombres, y fueren heridos del azote que suele también herir a los demás, no me ha enviado el Señor;
I Rey 17:52 Pero los hijos de Israel y de Judá los acometieron con gran gritería, y fueron acuchillándolos hasta llegar al valle y hasta las puertas de Accarón; y cayeron heridos muchos filisteos por el camino de Saraím y hasta Get y Accarón.
II Rey 1:18 Cántico llamado del Arco, que mandó a que se enseñase a los hijos de Judá, como está escrito en el Libro de los Justos. Dijo, pues, así: Considera, oh Israel, quiénes son los que fueron heridos y perdieron la vida sobre tus colinas.
II Rey 1:22 Nunca disparó flecha Jonatás que no se tiñera en sangre de los heridos; que no clavara en las entrañas de los valientes. Jamás dio golpe en vano la espada de Saúl.
I Par 5:22 De los heridos murieron muchos, porque de su cuenta había tomado Dios aquella batalla. Los vencedores habitaron en el país de los vencidos hasta la salida a Babilonia.
I Par 10:1 Peleando los filisteos contra Israel fueron los israelitas puestos en fuga por los palestinos, y cayeron muchos heridos de muerte en el monte Gelboé.
II Par 13:17 Con esto Abía y su gente hicieron en ellos gran destrozo, tanto que cayeron heridos quinientos mil valientes por parte de Israel.
Jud 6:4 y sabrás por experiencia que Nabucodonosor es el señor de toda la tierra. Entonces la espada de mis soldados atravesará tu costado, y caerás traspasado entre los heridos de Israel, sin poder ya respirar más, pereciendo con ellos.
Jer 37:10 Pero aun cuando vosotros derrotaréis todo el ejército de los caldeos, que os hace la guerra, y solamente quedaren de él algunos pocos heridos, saldrían éstos solos de sus tiendas, y entregarían esta ciudad a las llamas.
Jer 51:4 Y muertos caerán en tierra de los caldeos, y heridos serán en sus regiones.
Jer 51:52 Por eso, dice el Señor, he aquí que llega el tiempo en que yo destruiré sus simulacros, y en todo su territorio se oirán los aullidos de sus heridos.
Lam 2:12 Ellos decían a sus madres: ¿Dónde está el pan y vino?, cuando, a manera de heridos, iban muriéndose por las calles de la ciudad, cuando exhalaban su alma en el regazo de sus madres.
Ezeq 30:4 Y la espada enemiga descargará contra Egipto; y Etiopía quedará aterrorizada, cuando los egipcios caigan heridos al filo de la espada, y el pueblo sea llevado cautivo, y sean destruidos sus cimientos.
Nah 3:3 Y de relucientes espadas, y de relumbrantes lanzas, y de muchedumbre de heridos que mueren, y de grandísima derrota; son innumerables los cadáveres; los unos caen muertos encima de los otros.
I Mac 1:19 Y haciendo la guerra a Tolomeo, rey de Egipto, temió éste su encuentro, y echó a huir, y fueron muchos los muertos y heridos.
II Mac 4:42 de cuyas resultas muchos quedaron heridos, algunos fueron muertos, y todos los restantes fueron puestos en fuga, perdiendo también la vida junto al erario el mismo sacrílego Lisímaco."
II Mac 8:24 En efecto, declarándose el Todopoderoso a favor de ellos, mataron más de nueve mil hombres, y pusieron en fuga al ejército de Nicanor, que había quedado muy disminuido por razón de los muchos heridos.
II Mac 11:12 y pusieron en fuga a todos los demás, la mayor parte de los cuales escaparon heridos y despojados de sus armas, salvándose el mismo Lisias por medio de una vergonzosa fuga.
II Mac 12:22 Mas al dejarse ver el primer batallón de Judas, se apoderó el terror de los enemigos a causa de la presencia de Dios, que todo lo ve, y se pusieron en fuga uno tras otro, de manera que el mayor daño lo recibían de su propia gente, y quedaban heridos por sus propias espadas.
Hech 19:16 Y al instante el hombre, que estaba poseído de un pésimo demonio, se echó sobre ellos y se apoderó de dos, y los maltrató de tal suerte que los hizo huir de aquella casa desnudos y heridos.
Apoc 18:4 Y oí otra voz del cielo, que decía: Los que sois del pueblo mío escapad de ella, para no ser participantes de sus delitos, ni quedar heridos de sus plagas.