Gen 37:36
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Entretanto los madianitas vendieron a José en Egipto a Putifar, eunuco o valido del faraón, y capitán de sus guardias.
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Gen 39:1
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José, pues, como queda dicho, fue conducido a Egipto, y le compró Putifar, egipcio, eunuco del faraón y general de sus tropas, de mano de los ismaelitas que le habían llevado.
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Lev 21:20
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si corcovado, si legañoso, si tiene nube en el ojo, si sarna incurable, si algún empeine en el cuerpo, o fuere eunuco.
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Deut 23:1
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El eunuco, cuyas partes han sido majadas, cercenadas o cortadas, no entrará en la iglesia o pueblo del Señor.
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III Rey 22:9
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Llamó, pues, el rey de Israel a un eunuco o camarero y le dijo: Anda, ve, y trae luego a Miqueas, hijo de Jemla.
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IV Rey 8:6
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Y preguntó el rey a la mujer, la cual se lo contó. Inmediatamente el rey envió con ella un eunuco o ministro, a quien dijo: Haz que se le restituya todo lo que le pertenece, y todos los réditos de sus heredades, desde el día que salió de su tierra hasta el presente.
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IV Rey 23:11
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Quitó también los caballos que los reyes de Judá tenían consagrados al Sol a la entrada del templo del Señor, junto a la vivienda del eunuco Natanmelec, la cual estaba en Farurim; y los carros del Sol los entregó a las llamas.
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IV Rey 25:19
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Y también a un eunuco de la ciudad, bajo cuya inspección estaba la gente de guerra, y cinco señores del servicio doméstico del rey, hallados en la ciudad; y a Sofer, inspector del ejército, que amaestraba a los soldados bisoños del país, y a sesenta varones del pueblo que se hallaron en la ciudad.
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Jud 12:10
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A los cuatro días celebró Holofernes una cena o convite con sus domésticos, y dijo a Vagao su eunuco: Anda y persuade a esa hebrea que de su voluntad se resuelva a cohabitar conmigo.
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Est 2:3
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enviando por todas las provincias personas que escojan doncellas vírgenes y de buen parecer, y las traigan a la ciudad de Susán, al palacio de las mujeres, entregándolas al cuidado del eunuco Egeo, superintendente y guarda de las mujeres del rey, y déseles allí cuanto sea necesario para su ornato mujeril y lo demás que hubiere menester,
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Est 2:8
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Divulgada la orden del rey, como fuesen conducidas según la real disposición muchas hermosas vírgenes a Susán, y entregadas al eunuco Egeo, le fue también entregada entre las demás doncellas Ester, para ser guardada con las otras.
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Est 2:9
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Esta se llevó las atenciones de Egeo, y cayó en gracia a sus ojos; y así mandó a otro eunuco que le aprontase luego los adornos mujeriles, y le diese lo que le correspondía, con siete muchachas de las más bien parecidas en la casa real para servirla, y que cuidase del adorno y buen trato, así de ella como de sus criadas.
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Est 2:14
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Y la que había entrado por la tarde salía por la mañana; y de allí era conducida a otro departamento, de que cuidada el eunuco Susagazi, que tenía el gobierno de las mujeres secundarias del rey; y no podía ya ella volver más al rey, si el rey no lo deseaba, y no la mandaba venir expresamente.
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Est 2:15
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Pasado, pues, un cierto tiempo, se acercaba ya el día en que debía ser presentada al rey Ester, hija de Abihail, hermano de Mardoqueo, quien se la había prohijado. No pidió Ester adornos mujeriles, sino que el eunuco Egeo, a cuyo cuidado estaban las doncellas, le dio para adornarse lo que él quiso. Porque era de extremada hermosura e increíble belleza, y así parecía graciosa y amable a los ojos de todos.
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Est 4:5
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Entonces ella llamó a Atac, eunuco que el rey le había dado para servirle, y lo mandó ir a Mardoqueo a fin de informarse de él por qué hacía tales cosas.
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Sab 3:14
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Asimismo más feliz es el eunuco, cuyas manos no han obrado la iniquidad, ni ha pensado cosas criminales contrarias a Dios; pues se le dará un don precioso por su fidelidad y un destino muy distinguido en el cielo, que es el templo de Dios.
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Ecli 20:2
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Como el eunuco que deshonra a una doncellita encargada a su custodia,
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Ecli 30:21
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Está mirando con sus ojos muchos bienes, y no hace sino gemir, como el eunuco que abraza una doncella, y da un suspiro.
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Isa 56:3
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Y no diga ya el hijo del advenedizo o gentil que por la fe está unido al Señor: El Señor me ha separado de su pueblo con un muro de división. Ni tampoco diga el eunuco: He aquí que yo soy un tronco seco y estéril.
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Jer 38:7
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Y Abdemelec, eunuco etíope que estaba en el palacio del rey, supo que habían echado a Jeremías en la cisterna. Se hallaba el rey a la sazón sentado en la puerta de Benjamín.
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Jer 52:25
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Y además se llevó de la ciudad un eunuco, que era el comandante de las tropas, y a siete personas de las principales de la corte del rey, que fueron halladas en la ciudad; y al secretario, jefe o inspector de la milicia (el cual instruía a los soldados nuevos) y a sesenta hombres del vulgo del país, que se hallaron en la ciudad.
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Hech 8:27
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Partió luego Felipe, y se fue hacia allá. Y he aquí que encuentra a un etíope, eunuco, gran valido de Candace, reina de los etíopes, y superintendente de todos sus tesoros, el cual había venido a Jerusalén a adorar a Dios;
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Hech 8:34
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A esto preguntó el eunuco a Felipe: Dime, te ruego, ¿de quién dice esto el profeta?, ¿de sí mismo, o de algún otro?
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Hech 8:36
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Siguiendo su camino, llegaron a un paraje en que había agua; y dijo el eunuco: Aquí hay agua: ¿qué impedimento hay para que yo sea bautizado?
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Hech 8:37
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Ninguno, respondió Felipe, si crees de todo corazón. A lo que dijo el eunuco: Yo creo que Jesucristo es el Hijo de Dios.
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Hech 8:38
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Y mandando parar el carruaje, bajaron ambos, Felipe y el eunuco, al agua, y Felipe le bautizó.
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Hech 8:39
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Así que salieron del agua el Espíritu del Señor arrebató a Felipe, y no le vio más el eunuco; el cual prosiguió su viaje rebosando de gozo.
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